El relato tiene acontecimiento en una mañana como cualquier otra de Josef K

Resumen de El Proceso

 El relato tiene acontecimiento en una mañana como cualquier otra de Josef K. La extraña mañana había comenzado algo distinta a lo habitual ya que, su casera, la señora Grubach no se había presentado ese día con su desayuno como es costumbre. Luego de levantarse, unos minutos más tarde Josef K. escucho el sonido del timbre, de repente un hombre que nunca antes había visto entro en su habitación. Pero este hombre no estaba solo, otro lo acompañaba. Entonces se sentó de inmediato en su cama y les pregunto quién eran, pero ninguno le respondió.

Cuando Josef K quiso irse de su habitación estos hombres le dijeron que desde ese momento estaba detenido. Desorientado y aturdido, él les pregunto que lo acusaba pero ni ellos mismos lo sabían, lo único que le dijeron fue que el proceso acababa de iniciar. Pidió hablar con sus superiores pero ellos solo le dijeron que no podían que esperara hasta que llegara el supervisor.

Finalmente, le dijeron que el supervisor quería hablar con él, Josep sintió cierto alivio, por fin podría ver que es lo que estaba pasando y el por qué lo tenían detenido. Pero eso no fue así, este hombre le aclaro a Josef K. que él y sus hombres no tenían ninguna información sobre su proceso y apenas ellos se encontraban informados de ello. No podía decirle si él habría sido acusado formalmente o no, solo tenía la certeza de que él se encontraba arrestado. Josef K  no podía entender, se encontraba mucho más confundido de lo que ya estaba. 

Josef K deseaba regresar a su casa pronto, él necesitaba hablar con la señora Grubach, hablo de lo que había pasado esa mañana y la señora dio su opinión, le dijo que ciertamente él se encontraba detenido pero no como cualquier delincuente. Para ella si una persona era detenida por ser delincuente era un hecho grave, pero en su caso le parecía algo abstracto y no lo llegaba a entender.

Mientras tanto que hacer su vida lo más normal posible el, ya que él trabaja en un banco los señores que están en la habitación de la señoritas Bürsten le dijeron que tenía que ir a trabajar que solo era un arresto domiciliario pero que tenía que ir al banco.

 
Después del trabajo el señor Josef K. espero varias horas para poder hablar con la señorita Bürstern, la mujer que vivía en la habitación contigua, quería explicarle por qué su habitación se encontraba tan desordenada ya que los hombres que lo habían detenido revolvieron un poco su habitación. Cuando al fin pudo hablar con la señorita le explico todo lo ocurrido en esa mañana y ésta interesada en lo sucedido le ofreció su ayuda, fue entonces que comenzó un romance bastante corto y sin éxito.

Al transcurrir un tiempo, Josef K. es citado un domingo al primer interrogatorio del proceso, en donde se investigaría a fondo y estaba obligado a asistir. Esto lo asusto y molesto un poco, fue al  lugar.

Cuando llego Josef K. se dejó guiar, en el lugar se encontraba muchísima gente y también un pasillo estrecho y libre que dividía en dos partes la sala. Un hombre gordo lo miro, observo su reloj y le dijo que había llegado una hora y cinco minutos tarde, una voz se escuchó apoyando lo que había dicho el hombre, pero entonces Josef K. respondió que aceptaba el haber llegado tarde pero ya estaba allí.

A sus palabras hubo una ovación de parte de la sala. El juez instructor oyó con atención las declaraciones de Josef K dijo todo lo que opinaba como la idea de que esa organización solo se dedicaba a detener personas inocentes e iniciar procesos estúpidos. Josef K fue interrumpido por un griterío al final de la sala, pero prosiguió y dijo que todos los que se encontraban en la sala eran funcionarios corruptos que se aprovechaban de los inocentes y saqueaban todos sus bienes.

Al finalizar, enojado, se retiró de aquel lugar. 

Una tarde, su tío Karl se hizo presente en el despacho, se había enterado del proceso de su Josef y venia dispuesto a ayudarlo. Después de que Josef puso al tanto de lo sucedido a su tío, este lo llevo con el abogado Huld.  

Al llegar a la casa del abogado son atendidos por Leni, la mujer que cuida de Huld, porque éste se encuentra en la cama por problemas de corazón. Aun así, el abogado está enterado del proceso de K y decide hacerse cargo de su defensa. Mientras conversan Huld y el tío, suena un ruido fuera de la habitación y Josef K, aburrido de escuchar, decide ir a ver qué sucede y se encuentra a Leni, que ha roto un tiesto a propósito para llamar su atención.

Ésta le conduce al despacho del abogado donde conversan acerca del proceso, Leni se ofrece para prestarle ayuda, intercambian confidencias y flirtean, después Leni le entrega la llave de la casa para que vaya a verle cuando quiera. Al salir de la casa del abogado el señor Josef K encuentra a su tío esperándolo en la calle, que, muy avergonzado, le llama la atención por su comportamiento.

A medida que se va sumergiendo en su misterioso proceso, va perdiendo el interés por su trabajo, circunstancia de la cual comienza a aprovecharse el subdirector del banco para ganarse la confianza de los clientes de K y ganar influencia.

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