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FORMACIÓN DOCENTE, ESCUELA Y PROYECTOS EDUCATIVOS, 1857-1940

lizzie7076Tesis1 de Diciembre de 2013

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INSTITUTO ESTATAL DE EDUCACION PÚBLICA DE OAXACA

UNIVERSIDAD PEDAGOGICA NACIONAL

UNIDAD 201-OAXACA

LICENCIATURA EN EDUCACION PLAN 1994

FORMACION DOCENTE, ESCUELA Y PROYECTOS EDUCATIVOS

PROFR:

ALUMNO: LUIS GERARDO CERVANTES AGUILAR

GRUPO 3.3

FORMACIÓN DOCENTE, ESCUELA Y PROYECTOS EDUCATIVOS, 1857-1940.

La primera unidad es la que corresponde a Escuela pública y estado educador, y se trata de una introducción al curso mismo, pues entre los primeros planteamientos que se dejan claros es el de la educación como una necesidad social, esto para ubicar el papel del educador dentro del contexto de la sociedad moderna influenciada por la su acontecimientos gestor La Revolución francesa.

Propuestas y actuaciones en la escuela estatal

La primera lectura Propuestas y actuaciones en la escuela estatal de Mario Alighiero Manacorda se muestra como en tanto los grandes enciclopedistas de la Revolución Francesa estaban ocupados en aspectos más “utópicos”, hubo pensadores como Louis René de la Chalotais que se pronunciaba a favor de una educación laica proporcionada por el estado. De igual manera en su obra Essai d’education nationale, desarrollaba todo un plan para el establecimiento de escuelas en el que eran de vital importancia la enseñanza de las ciencias naturales y la historia. A pesar de ser un plan tan adelantado a su época, no era completamente incluyente y democrático puesto que se oponía a la instrucción de los trabajadores que los protestantes llevaban a cabo, pues temía que dicha acción desviara la principal labor de la vida de los trabajadores que era la del ejercicio de sus humildes profesiones para servir a los demás.

Por otro lado en Alemania Johan Bernhard Basedow, apelaba a favor del estatismo y el laicismo de la enseñanza.

En Francia Mably en su De la législation ou príncipes des lois, trataba sobre las normas relativas a la educación, leyes que la República debe dar a los ciudadanos puestos que defendía la perfecta igualdad entre ellos.

En Italia Filangieri debatía sobre las leyes referentes a la educación, a las costumbres y a la educación pública. Él se mostró como partidario de la universalidad de la instrucción más no de la igualdad, pues separaba a la sociedad en dos: aquellos que servían con sus brazos y los que sirven a la sociedad con sus talentos.

En 1760 la emperatriz de Austria María Teresa celebrara la decisión “La instrucción es y seguirá siendo en cualquier época un hecho político”. Eran los tiempos de la Reforma educativa que tuvo lugar en Prusia con Federico II.

¿De dónde salieron las escuelas?

La segunda lectura de esta unidad uno es la que lleva por título ¿De dónde salieron las escuelas? De Everett Reimer, en ella exponen la noción de escuela desde la época prehistórica, cuando la educación incluía mucho más de lo que actualmente estamos acostumbrados y dicha instrucción recaía en el chamán, una personaje que combinaba el papel de maestro, sacerdote, mago, actor, ideólogo, poeta y artista.

Posteriormente tomando como línea divisoria de la prehistoria con la historia a la invención de la escritura la educación se refugió en los recintos religiosos. Por tanto, la evolución del hombre es en cierta medida aportada por los chamanes y sacerdotes. Pero no sólo la escritura, sino también la contabilidad, las matemáticas, la astronomía, la química, la música la, pintura, la poesía, tuvieron su primario desarrollo en los recintos sacerdotes sumerios y egipcios.

Los primeros vestigios de aulas se encuentran en la antigua cultura sumeria y en las primeras escuela de Atenas. En antigua educación griega, en principio, se observaba una educación tutelar, pero a medida que la sociedad ateniense se fue haciendo más democrática y el número de alumnos superó al de instructores la educación tutelar se dejó por completo de lado para dar paso a la instrucción por grupos.

En el caso de Roma también se adoptó el sistema educativo de los helenos, y la escuela, a pesar de educar a su élite, no fue la institución central del Imperio.

A la caída del Imperio Romano, las escuelas fueron los monasterios y las catedrales que perdurarían durante los mil años del Medioevo.

Ya sea en órdenes benedictinas, dominicanas, franciscanas o jesuitas las escuelas fueron el medio para preservar los valores que poco a poco amenazaban con perder su predominio.

Es importante mencionar que esta misma educación a cargo de los religiosos sirvió, en la Europa Medieval, para la gesta la institución más importante a nivel académico: la Universidad.

Durante La Reforma la invención de Gutenberg fue el pretexto ideal para que los seguidores de Lutero se alfabetizaran, pues vieron en la reimpresión de biblias, el vehículo para la conversión al protestantismo.

La Revolución Industrial encontró una nueva razón en el desarrollo de los avances tecnológicos y el manejo del capital para la expansión del alfabetismo.

La dimensión de una alta escolarización se dio definitivamente con el surgimiento del estado-nación. Por ello, históricamente, se sitúa a las primeras escuelas públicas en Estados Unidos, Francia y Prusia.

El desarrollo en Prusia, a pesar de ser más tardío, era mucho más nítido, convirtiéndose por ello en un importante modelo internacional. En Prusia, y más tarde en Alemania, el desarrollo del sistema escolar fue parejo con el desarrollo de estado-nación, y diseñado deliberadamente para ser uno de los principales pedestales de este último (Reimer, 1981: 14).

En Francia, la educación moderna surgió como oposición a los sistemas educativos de los jesuitas, la Revolución Francesa vendría a respaldar esta idea. Sin embargo, posteriormente, con la restauración de la monarquía, las órdenes religiosas, incluso los jesuitas, recuperaron su posición en la educación francesa.

En Estados Unidos, a pesar de haber pugnado por el carácter público de la educación, pocos condados fueron los que gozaron de estas reformas, quienes la tuvieron probaron las peripecias de una mala organización.

En esta larga historia de la educación se observa un panorama actual en el que prácticamente todas las naciones apelan a favor de la educación pública y cada nación tiene un plan desarrollado para llevarla a cabo. Cada escuela tiene su propio currículum que generalmente es copiado de las naciones más avanzadas en este rubro. Las escuelas sirven también a todo un sistema, a las élites que ostentan el poder y, los pueblos que aún están sometidos al yugo de un colonizador, ven favorecida su opresión a través del sistema educativo.

La educación en la primera mitad del siglo XIX

La tercera lectura de esta unidad uno lleva el nombre de La educación en la primera mitad del siglo XIX de Mario Alighiero Manacorda, en el cual toma las siguientes consideraciones. Las conquistas ideales de la burguesía que respectan a la educación durante la Revolución Francesa se resumen de la siguiente manera: universalidad, gratuidad, estatismo, laicismo, renovación cultural y el notable interés de la incorporación al trabajo. Como es ya sabido, el período Neoclásico por lo que transitaba la Nación Luz, hace que hallemos dentro de sus planteamientos sobre la instrucción académica un retorno a la antigüedad clásica: Trivium en las letras, quiadrivium para las ciencias de la naturaleza, more francorum en la preparación física, “aculturación” en los problemas de índole moral y sobre todo se observa una primera y notable separación entre escuela y tirocinio. Tales ideales prevalecerán como los preceptos de la educación durante el siglo XIX.

Con la revolución industrial el modo de producir los bienes materiales se ha transformado radicalmente. La secuencia es una primera iniciativa del mercader capitalista, que asigna tanto materia prima como proceso de elaboración a individuos totalmente ajenos entre sí y controlados por el capitalista. Posteriormente se da la cooperación simple donde los artesanos, acostumbrados a sus talleres, ahora se conglomeran con un solo lugar para hacer lo mismo que saben realizar. La siguiente fase es la manufactura donde el “arte” de cada trabajador es fragmentado puesto que a cada trabajador se le asigna sólo un detalle o paso del proceso completo. Finalmente, gracias a la incorporación de la ciencia en el proceso de fabricación, se llega al instante en que las máquinas, ayudadas por el combustible, llevan a cabo la labor más importante, reemplazando así al hombre.

Este proceso de transformación del trabajo humano desplaza enteras masas de población no sólo de los talleres artesanales a las fábricas, sino también del campo a las ciudades, provocando conflictos sociales, transformaciones culturales y desmoronamientos morales inauditos […] ¡Qué difícil es aceptar la propia muerte! Pero, ¿qué comporta esto para la instrucción? (Alighiero, 1976: 17).

Al notar la industrialización a costa de la preparación y humanización de los trabajadores, importantes pensadores filántropos, utopistas, incluso los mismo industriales, se plantean el problema de la instrucción de las masas obreras, surgen así las escuelas científicas, técnicas y profesionales.

Los problemas

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