La educación durante la primera infancia

La Educación durante la primera infancia

La primera infancia es primera etapa del ser humano y comprende desde la concepción hasta los primeros siete años de vida; esta etapa es de suma importancia para el desarrollo integral de los niños y niñas, ya que es aquí donde se forman y fomentan las bases del desarrollo, tanto físico como emocional del ser humano.

Romero y Nereida (2016) afirman que “La estimulación en edades tempranas incrementa las probabilidades de rendimiento positivo en diferentes ámbitos” (p. 56). Y es debido a esto, que nosotros como futuros docentes debemos afrontar y ponernos retos para lograr ayudar a que los menores de edad tengan y cumplan con el desarrollo adecuado.

Durante la primera infancia, el niño desarrolla capacidades y habilidades físicas, intelectuales, sociales y emocionales, además, es durante este periodo que el menor, forma su personalidad y fundamenta los conocimientos básicos. Por tal motivo es imprescindible que los niños desde su concepción cuenten con las condiciones necesarias y adecuadas de vida, tales como: una apropiada alimentación, ya que si la nutrición del menor es inadecuada tendrá un desarrollo más lento, asimismo se debe tener en cuenta el acceso a la salud, contar con padres de familias interesados en el desarrollo de sus hijos, una educación de calidad que les garantice oportunidades en el futuro, para que así puedan tener una mejor calidad de vida, entre otros.  

Es por esto que, según Amaya Villegas (2019) “…padres, educadores, organismos gubernamentales y no gubernamentales empiezan a entender que la educación, principalmente en esta etapa de la vida, desempeña un papel casi protagónico en la estructuración y funcionalidad del sistema nervioso y del cerebro.” (p. 10). Sin embargo, es indiscutible que existe una brecha en cuanto a lo que saben los educadores acerca del desarrollo cerebral infantil y lo que hacen para fomentar y desarrollar el mismo durante la practica pedagógica

De ahí que, los educadores son actores principales y con la ayuda de los padres de familias, que también son agentes indispensables, deben cumplir su rol y proveerles a los niños y niñas recursos y experiencias para que construyan su propio proceso de desarrollo y así poder cerrar esta brecha. Por una parte, los maestros deben preparar un entorno de aprendizaje donde el menor pueda experimentar la creatividad, la capacidad de razonamiento, la autonomía, el individualismo, además de la oportunidad de dudar, cuestionar y cambiar de dirección.

Mientras que los padres de familias deben de tener un dialogo y cooperación constante con los docentes para procurar que la educación de sus hijos sea efectiva; asimismo, deben formar y guiar a sus hijos e inculcarles valores, conducirlos a través de las diversas etapas y procurar su desarrollo intelectual, moral, físico y psicológico.

En conclusión, es indiscutible que la primera infancia es de suma importancia, ya que es durante este periodo en donde el niño se define, es aquí donde se desarrollan las destrezas y habilidades y, sobre todo, es durante este tiempo en donde podemos hacer un cambio para el futuro de los niños y niñas. Asimismo, tanto los docentes, padres de familia e instituciones gubernamentales, deben ejercer su rol y cumplir con su deber, por lo cual, están obligados a participar en el desarrollo de la primera infancia de los menores, ya que, son ellos los que representan el futuro del pais, por lo que, se les debe dar la importancia que merecen y ayudarles a conseguir mejores oportunidades. Y una estrategia para que esto se cumpla y para que todos los niños y niñas puedan tener igualdad de oportunidades, es crear programas dirigidos a la primera infancia (vivienda, alimentación, salud, creatividad, arte, …) para lo cual se debe hacer una mayor inversión por parte del estado y debe haber un monitoreo y evaluación constante sobre los resultados del programa.

...