Los casos de la educación en la esfera de la empresa

Los cimientos de los emprendedores se forjan desde las aulas

El emprendimiento se afianza desde los primeros años de educación básica, donde ya existen materias especializadas. Los docentes, padres de familia y el Estado son fundamentales.

Redacción Líderes

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La formación de emprendedores se inicia en los primeros años de educación básica, se fortalece en la secundaria y se especializa dentro de las universidades. Así lo aseguran especialistas consultados por LÍDERES.

Los jóvenes de hoy tienen una visión más amplia del mercado, además cuentan con herramientas de comunicación que les permiten participar activamente en la sociedad y son más dinámicos, opina Oswaldo Boada, director de bachillerato de la Unidad Educativa Tomás Moro, con sede en Quito.

En este colegio se dicta la materia de Empresa y Gestión desde el 2008. Pero hace dos años se la denominó como Business and Management para incentivar el uso del idioma inglés.

Jonathan Westmoreland guía a los estudiantes para que conformen los 32 emprendimientos que se presentan cada año en la Feria de Empresas del Tomás Moro. El evento busca que el aprendizaje no se limite a las aulas sino a que la comunidad conozca las destrezas que están desarrollando los estudiantes. Una de ellas es la asignación de tareas para el funcionamiento de una idea de negocios.

Westmoreland, como docente, cree que las bases de conocimiento sobre emprendimiento se generan desde los párvulos para que puedan canalizarse correctamente en los cursos superiores.

Con aquello coincide Rodrigo Varela, director del Centro de Desarrollo de Espíritu Empresarial de la Universidad Icesi (Colombia). Él considera necesario modificar la conceptualización que se da al emprendimiento en el sistema educativo latinoamericano.

Para Varela, el emprendedor es visto como alguien que monta un negocio y punto. No obstante, cree que la escuela y el colegio deben priorizar la formación de destrezas en los niños como la creatividad y la solidaridad. Y luego poner énfasis en temas vinculados al aprendizaje de cuestiones empresariales. “Es difícil motivar a un niño de 10 años a que elabore un plan de negocios impecable”.

Otro caso de educación en emprendimiento ocurre en el Colegio Internacional SEK(Quito). Allí los estudiantes desarrollan microempresas desde hace siete años, para el programa La Compañía, de la Fundación Junior Achievement.

Verónica Tobar, docente de economía de la entidad educativa, cree que es fundamental que las personas desde temprana edad asuman responsabilidades y se conecten con el manejo de dinero, para que en un futuro sean organizados. “Desde las aulas se forma al profesional”.

Leonardo

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