“Organización del espacio pedagógico para 1er ciclo”

INSTITUTO PEDAGÓGICO NACIONAL MONTERRICO

PROGRAMA DE FORMACIÓN INICIAL DOCENTE

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MONOGRAFÍA

“Organización del espacio pedagógico para 1er  ciclo”

EDUCACIÓN INICIAL

ESPACIOS Y JUEGOS

Aldana Delgado, Lucero

Barzola Casas, Romina

Calderómn Casachagua, María Sheyla

Cuellar Ramoz, Andrea

Quispe Fernandez, Diana

Raucana Quispe, Gabriela

Lima - Perú

2017

Organización del espacio pedagógico para 1er ciclo

En los últimos años, se han dado mayor importancia a los distintos factores que influyen en el desarrollo integral de los niños y niñas desde el ámbito educativo tales como: las relaciones sociales, estrategias utilizadas, etc. pero entre ellas encontramos el ambiente. Durante mucho tiempo, hemos visto que distintos autores refuerzan la importancia del contexto en el proceso de enseñanza - aprendizaje, brindándonos distintos ejemplos de cómo poder organizar el aula de manera que nuestros niños y niñas logren el desarrollo de las distintas capacidades del ser humano, pero como futuros docentes surge la pregunta: ¿Cuál de todas las propuestas es la correcta para una buena organización del aula? A continuación, se detallará los distintos aspectos que se deben tener en cuenta al organizar un espacio pedagógico para 1er ciclo.

En primer lugar, se debe tener en cuenta que el 1er ciclo abarca las edades de 0 – 3 años, es aquí donde el niño (a) empezará el viaje del descubrimiento y desarrollo de sus distintas capacidades. Es necesario que, desde un principio, los niños y niñas sientan seguridad y comodidad puesto que al entrar a un ambiente totalmente nuevo con personas desconocidas se sentirá abrumado y muchas veces querrá volver a casa, pero debemos entender que todo es parte de un proceso en el cual tanto familiares como los docentes somos personajes activos. Citando a Baker (1968) “El ambiente o contexto en el que se produce el comportamiento posee sus propias estructuras (límites físicos, atributos funcionales, recursos disponibles, etc.) que facilitan, limitan y ordenan la conducta de los sujetos”. (Zabalza, 1996:120), comenzaremos con la primera característica de un espacio: sus dimensiones.

Al momento de ingresar a un aula, debemos tener en cuenta que tan grande o pequeño es, si es necesario alguna limpieza o modificación de la misma, esto nos dará hincapié a poder organizar de forma metódica los distintos sectores, materiales, etc. que vayamos a establecer durante el ciclo educativo. El objetivo del ambiente educativo es lograr autonomía en el niño (a), desarrollar la capacidad de relacionarse socialmente, motivar su curiosidad y plantar en el la iniciativa; es por ello que al contar con un espacio pequeño se debe evitar la excesiva implementación de inmobiliaria que dificulte desarrollar actividades de manera libre y divertida; además, de dificultar las relaciones sociales que se puedan establecer durante ella.

 Por otro lado, si se cuenta con un espacio grande, la insuficiente implementación de materiales innovadores provocará que el niño (a) no despierte con la necesidad de explorar o descubrir su ambiente, trayendo como consecuencia que no disfrute al máximo su estadía durante las horas de clase; cabe agregar, que los niños (as) son investigadores por excelencia y es por ello que es necesario incorporar nuevos materiales que satisfagan esa necesidad por descubrir y reafirmar o negar hipótesis que puedan realizar durante su exploración.

Por último, la ubicación o implementación de los materiales se podría trabajar conjuntamente con los padres de familia que podrían implementar o donar materiales que tengan relación con la vida diaria de los niños para que se puedan sentir cómodos, por otro lado, la ubicación de los materiales será dirigida conforme las necesidades de nuestro grupo de niños (as) que irá variando de acuerdo a sus deseos o sugerencias de ellos mismos.

Para los niños de este primer ciclo, se deben implementar dos sectores que son de su curiosidad y preferencia: el sector de construcción y el de dramatizaciones. Según el MINEDU al momento de ingresar al aula son los dos sectores que lograrán que el niño (a) se pueda sentir cómodo. El sector de construcción propiciará al niño (a) que realice sus primeras nociones matemáticas, las comparaciones, clasificación, agrupación entre otros.  

Asimismo, propicia el juego individual y grupal, es aquí donde la docente deberá estar presenta e identificar que niños (as) se desenvuelven mejor en grupo y quienes prefieren realizar actividades de manera individual, lo cual ayudará también a confeccionar las estrategias necesarias para desarrollar esta capacidad. Por otro lado, este sector puede ser implementado con materiales utilizados en la vida diaria: conos de papel, chapas, latas, etc. que puede ser recolectados por ellos mismos o ya implementados por la institución (la situación de cada institución y el contexto en donde se encuentre variarán los materiales y el espacio).

Encontramos en otro sector el de dramatización, es en el cual el niño tendrá sus primeras interacciones con el juego simbólico, esto conllevará a que exprese emociones a través de distintas situaciones que el/ella mismo (a) propondrán. Se sugiere que, en este sector, los padres de familia puedan donar materiales o ropa que puedan ser familiares para el niño (a), y así poder tomar distintos roles de acuerdo a su familia u otras familias. Este sector, puede cambiar y transformarse en el del mercado para así fortalecer los conocimientos matemáticos que puedan adquirir en el sector de construcción tales como: cantidad, peso, etc.  

En otra instancia, se debe recordar que se pueden añadir distintos sectores de acuerdo al espacio con el que contamos, se sugiere que los sectores se encuentren en ambientes estratégicos donde el niño (a) pueda visualizarlos y elegir libremente, asimismo tendrá que sentirse cómodo con su elección; por ejemplo: si un niño elige el sector de dramatización y quiere vestirse de alguna profesión y moverse por todo el espacio, si existen muchos sectores juntos o materiales a su alrededor que impidan esos movimientos, se sentirá retraído y no elegirá ese sector nuevamente; partiendo de ello, no debemos excedernos con la cantidad de niños (as) hacía un sector  y tomar en cuenta con que materiales se cuenta y la posibilidad que hay para conseguirlos y organizar los sectores y sus implementos, en una institución educativa alejada no contamos con estantes y/o mesas necesarias para guardar todos los implementos; es por ello, que los padres de familia deberán apoyar junto con la docente e ingeniar maneras de organización.

Otro punto, para la organización de materiales se debe basar en las capacidades que quisiéramos realizar, por ejemplo, si la docente desea fomentar el interés de la lectura y escritura, promoverá el sector de biblioteca o estratégicamente distribuirá en los distintos sectores como el de dramatización (mercado) hojas y papel o materiales relacionados a la lectura y escritura, para realizar "las cuentas" y así sucesivamente con el resto de sectores, estos servirán de apoyo para lograr el objetivo de incentivar alguna capacidad que la docente crea que deba ser reforzada.

Para culminar, los materiales deberán tener las siguientes características:

• Encontrase al alcance de los niños (as): Una buena ubicación de estos, facilitará el momento del juego y evitará accidentes, es necesario que el niño (a) se sienta capaz y autónomo antes, durante y después de utilizar los materiales; es por ello, que ubicarlo en la parte baja de los estantes, incentivará al niño (a) que puede alcanzar cualquier material que desee.
  
• Organización y presentación atractiva: Los niños y niñas del primer ciclo aún siguen descubriendo que es este nuevo espacio en donde se encuentra y que le puede ofrecer; es por esta razón, que se deben poner etiquetas, dibujos o un símbolo que le ayude al niño (a) reconocer el objeto y/o material con el que está trabajando y si es el que deseó en primera instancia; además, es necesario innovar con nuevos materiales mensualmente o dependiendo del grupo humano con el que contemos. Recordemos que los niños (as) al manipular un material no solo se divierten sino también reconocen, descubren y sobre todo desarrollan capacidades de si mismo, por consecuencia es sugerible que sean materiales innovadores que llamen la atención del niño (a).
  
• Contenedores y estantes de apoyo: Es necesario que los niños y niñas sepan desde un inicio que todo objeto tiene su lugar en el espacio, es por ello, que debemos orientarlos a que, al momento de terminar una actividad, se deben regresar los materiales utilizados de la manera y el lugar de donde lo encontraron. Estos incentivos llevarán al niño (a) a establecer ciertas normas en sus vidas que le ayudarán más adelante, y lo llevará a darse cuenta que al realizar esta acción puede lograr obtener el espacio adecuado para jugar la próxima vez.

En segundo lugar, más allá de los sectores que son establecidos en su mayoría para niños de 3 años, en los primeros años de vida de 0-2 es necesario que desarrollen las necesidades básicas tales como: fisiológicas, motoras, afectivas y sociales, por ello se deben propiciar ambientes cómodos y espaciosos puesto que, las actividades de alimentación, descanso y aseo ocupan la mayor parte del tiempo. Sabemos que los niños de estas edades se desplazan de manera autónoma (en la mayoría de los casos) hacia cualquier lugar que puedan encontrar, asimismo, buscarán objetos que llamen su atención, pero para poder elegir los adecuados debemos tener en cuenta que en esta edad los niños (as) necesitan estímulos que lo ayuden a tener autonomía y desarrollen de manera natural sus distintas capacidades que se verán reforzadas a los 3 años.

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