ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Organizar y animar situaciones de aprendizaje


Enviado por   •  22 de Octubre de 2021  •  Síntesis  •  1.137 Palabras (5 Páginas)  •  149 Visitas

Página 1 de 5

Organizar y animar situaciones de aprendizaje

El profesor guía a su alumno, el cual, analiza sus palabras, forma relaciones y trabaja su pensamiento. Escuchar una lección, hacer ejercicios o estudiar en un libro pueden ser actividades de aprendizaje para los estudiantes, esto, visto por un profesor tradicionalista. Pero cada niño o adolescente da más importancia a los ejercicios o a las experiencias conducidas. Aprenden por sus ganas y su disponibilidad, de lo que oyen y entienden, según sus medios intelectuales, su capacidad de concentración, lo que les interesa, lo que tiene sentido para ellos, lo que se relaciona con otros conocimientos o realidades que le resultan familiares o que logra imaginar. Por esta situación, el docente debe de sacar energía, tiempo y disponer de las competencias para imaginar y crear situaciones de aprendizaje referentes al proceso de investigación, identificación y resolución de problemas. En otras palabras, organizar y animar situaciones de aprendizaje.

Conocer, a través de una disciplina determinada, los contenidos que hay que enseñar y su traducción en objetivos de aprendizaje. Consiste en relacionar los contenidos, los objetivos, y las situaciones de aprendizaje. Es decir, que el alumno de sus conocimientos previos que adquirió logre asimilarlos en una prueba oral, un control escrito o un examen. La enseñanza busca objetivos. El de la planificación didáctica, para identificar los objetivos trabajados en las situaciones consideradas, para elegirlas y fomentarlas con conocimiento de causa. El del análisis posterior de situaciones y de actividades que trata de delimitar lo que realmente se ha desarrollado y modificar las actividades. El de la evaluación, que trata de controlar las experiencias de los alumnos. Los conocimientos y habilidades de alto nivel se construyen en situaciones complejas, de las cuales persiguen varios objetivos. Para organizar y favorecer semejantes situaciones de aprendizaje, es indispensable que el profesor controle los conocimientos, que tenga más de una lección de ventaja respecto a los alumnos y sea capaz de encontrar lo esencial bajo múltiples apariencias, en contextos variados.

Trabajar a partir de las representaciones de los alumnos. “Olvidad lo que sabéis, desconfiad del sentido común y de lo que os han contado y escuchadme, yo os diré cómo suceden en realidad las cosas” (Giordan y De Vecchi, 1987). El alumno cuenta con un montón de conocimientos, se ha hecho preguntas y ha elaborado respuestas que le dan una respuesta provisional. Así pues, la enseñanza a menudo choca de frente con las concepciones de los alumnos.

Trabajar a partir de representaciones de los alumnos es darles regularmente libertad en la clase, interesarse por ellos, tratar de comprender sus raíces y su forma de coherencia, no sorprendernos de que éstas reaparezcan cuando las creíamos perdidas. Por esta razón, debe abrirse un espacio para la palabra, no censurar sus ideas, las explicaciones, los razonamientos espontáneos, con el pretexto de que conducen a conclusiones erróneas.

Falta trabajar a partir de las concepciones de los alumnos, entrar en diálogo con éstas, hacerlas evolucionar para acercarles conocimientos cultos que enseñar. Así pues, la competencia del profesor es esencialmente didáctica. Le ayuda a apoyarse en las representaciones previas de los alumnos, para encontrar un modo de conducirlos en los conocimientos.

Trabajar a partir de los errores y de los obstáculos en el aprendizaje. Aprender no es primero memorizar o almacenar información, sino más bien comprender. Esto requiere un importante trabajo mental. Según la edad de los alumnos y el programa que el profesor tenga en mente, éste puede introducir limitaciones como prohibir el procedimiento más empírico. Los alumnos, no harán los mismos aprendizajes si conocen el tema, lo ponen en práctica o es un conocimiento adquirido. Los alumnos si no conocen la solución de algún problema deberán usar su intuición y se contentarán en buscar una solución pragmática mediante estimaciones y simulaciones basadas en sus experiencias. Si los alumnos se apropian de estos problemas, su pensamiento se pone en movimiento, crea las bases de hipótesis, procede a exploraciones, propone pruebas visibles. En un trabajo colectivo, se inicia la discusión, el choque de representaciones obliga a cada uno a precisar su idea y para tener en cuenta las de los otros.

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (7 Kb) pdf (56 Kb) docx (10 Kb)
Leer 4 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com