Primera Experiencia

MI PRIMERA EXPERIENCIA. ME FALTA MUCHO.

Primer día

Timbre tras timbre, pero solo esperaba el cuarto, el primero se marcó por ansiedad, quería que llegará el timbre que anunciaría mi hora, el segundo, el miedo, no quería que llegará, el tercero me preguntaba ¿y si no me hacen caso?, el cuarto llegó, y el corazón se salía de mi pecho.

La maestra titular apareció en la puerta con mi planeación firmada, daba el permiso para que trabajará en su grupo, pero me dijo, “manejas muchos contenidos, no te dará tiempo”, pero no le creí, estaba segura de que sí, los chicos me ayudarían y pondrían disposición para lograrlo, entramos al grupo.

Con la boca seca y la nariz constipada fui presentada, afortunadamente poco a poco estos síntomas fueron desapareciendo, empecé a relatarles una historia que los involucraba y que ellos hacen continuamente, el contar chismes, todos se interrogaban ¿Cuánta gente sabría el chisme de Diana a la hora de la salida? Esa fue mi entrada victoriosa en la secuencia didáctica, ellos motivados y yo cada segundo más segura frente ellos.

Les presenté el problema y con solo verlo lograron formular la regla general, todos la gritaron, me dio pánico, profeticé mas tiempo, dejé transcurrir solo 5 minutos para que lo pusieran en su cuaderno, después tres alumnos tenían que pasar a explicar el cómo llegaron a esa regla, pero ellos se rehusaban aun cuando sabían que estaban bien, casi les rogué que pasarán, con timidez y con la voz más baja que lograron sacar de sus gargantas relataron sus procedimientos, después tenía que exponer mi procedimiento de nuevo los nervios y la inseguridad se apoderaron de mí, el miedo de que al hablar lo hiciera muy rápido o tartamudeará y que no me entendieran lo que decía, rondaba en mi cabeza, dichosamente no lo hice, terminó esto y hasta aquí solo habían pasado 15 minutos de los 75 que preví en la planeación , faltaban 60 y ya había pasado 2/3 de la secuencia.

Ante esto iba a presentar el otro problema, pero la titular me recordó que los alumnos necesitaban tiempo para pasar lo que había anotado en el pizarrón, dejé pasar un tiempo, exactamente 15 minutos, el que el alumno transcriba es la actividad que más gasta tiempo.

Les presenté el otro problema y nuevamente al solo verlo mencionaron la respuesta, lo copiaron en su cuaderno sonó el timbre y me invitaron a salir a activación física, me sorprendí ya que me habían mencionado que no se realizaba ¿por qué justamente hoy se retomaba la actividad? Se acabó la clase y se quedó de tarea al igual que una página del libro. Se cumplió lo planeado. Fue un buen primer día.

Segundo día

Con la experiencia de ayer, estaba súper segura y feliz, llegamos al salón y mi sorpresa fue que la maestra les empezó a contar un cuento, ¿Qué pasaba?, ya no me iba a dejar practicar o ¿qué?, favorablemente solo se trataba de un nuevo programa en la escuela que era leer 5 minutos antes de empezar la clase, raramente solo mi titular y la de español lo hacían.

El plan marcaba que tenía que comentar los ejercicios que se dejaron de tarea, rápidamente se habló y se revisó el primer problema, pero al pedir que sacarán el ejercicio del libro empezaron a decir que no le habían entendido, en mi mente me decía, no es cierto, si es lo mismo que vimos ayer, empezamos a leerlo y a contestarlo, para mi sorpresa si había un error en el problema, que en el momento no pude verlo, pero en mi planeación lo contesté y no vi el error, así que me bloquee, no supe que hacer, me avergoncé porque ni yo sabía contestarlo y lo único que dije era que lo iba a analizar en la tarde y que mañana lo veríamos, eso no lo hace un buen maestro, mi seguridad se había ido.

Continúe con el problema que el plan marcaba, ahí los alumnos no supieron que hacer, pasaban los minutos y no hacían nada, tuve que hacer la actividad guiada y contestarlo juntos. Vi en sus caras que si me había dado a entender, pero la clase se había acabado, se tenía que ver un nuevo concepto según lo planeado, cosa que no hice, mañana será otro día, me dije.

Tercer día

Entré

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