ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Psicolinguistica


Enviado por   •  12 de Agosto de 2011  •  2.397 Palabras (10 Páginas)  •  4.925 Visitas

Página 1 de 10

INTRODUCCIÓN

El presente escrito tiene como objetivo demostrar el dominio de ciertos conceptos psicolingüísticos y reflexionar sobre la influencia que han tenido en el ámbito educacional, principalmente en la Educación Especial.

La psicolingüística ha realizado diversos aportes hacia la Educación Diferencial, especialmente en el sentido de cómo ha influido en el estudio del lenguaje en los niños/as y en las etapas esperadas en la evolución del mismo. Estos estudios han otorgado diversos aportes para el conocimiento y comprensión de los trastornos del lenguaje, uno de los ámbitos más amplios que actualmente atiende la educación especial en Chile.

Estos aportes han surgido en base a diversos paradigmas (estructural, generativo y discursivo) por los que ha transitado la lingüística y cada uno de ellos ha influenciado y otorgado conocimientos para la atención de niños y niñas con trastornos del lenguaje.

Uno de los grandes aportes lo ha realizado la Teoría de la Modularidad, otorgando gran cantidad de respuestas posibles frente a las diversas interrogantes planteadas en torno al estudio del lenguaje.

Es así como la lingüística ha ido evolucionando y actualmente se vive un paradigma discursivo, y con él se hacen presentes una serie de estudios referidos al contexto en el que se desarrolla y se hace efectivo el lenguaje, considerando aspectos que con el anterior paradigma eran colocados en segundo plano y agregando niveles al estudio del lenguaje.

Frente a lo mencionado surge la siguiente interrogante: ¿Cuáles serían las ventajas y/o desventajas que aporta la psicolingüística desde la Teoría de la Modularidad en la evaluación e intervención del Trastorno Específico del Lenguaje en el actual paradigma discursivo?

Para intentar dar respuesta a esta interrogante, a lo largo de la presente reflexión se abordarán cuatro conceptos, que serán una base para el desarrollo de la misma: Paradigma Formal, Teoría de Modularidad, Trastorno Específico del lenguaje y Paradigma Discursivo.

DESARROLLO

Como se ha mencionado en el apartado introductorio, la lingüística ha evolucionado en base a diversos paradigmas. Todos han aportado grandes conocimiento para el abordaje de los trastornos del lenguaje.

El primer Paradigma Formal , considera el lenguaje como sistema, siendo éste el principal objeto de estudio, deducido a partir de la actividad o “corpus” que proporciona los datos (habla y/o actuación). Dentro de este paradigma se desprende el estructuralismo y el generativismo.

El estructuralismo caracteriza la lengua como un sistema social, el cual era deducido a partir de la conducta del emisor, explicitando el concepto de signo lingüístico y estableciendo niveles para el estudio de la lengua, tales como la fonología, la morfología, la sintaxis y la semántica estructuralista. El estudio de la lengua era posible gracias al habla (Saussure) considerada como “la realización de la lengua, el uso individual, la conducta manifiesta…” (Bermeosolo, 2001: 20)

En el generativismo, surge el nacimiento de las ciencias cognitivas, que estudian el lenguaje de las personas como seres cognitivos, sin dejar de lado la conducta verbal de los mismos, pero incluyendo la mente de los sujetos y el conocimiento innato de la lengua (sintaxis) que poseen. Frente a esto surge el término competencia (Chomsky), referido a la “capacidad para comprender e interpretar cualquier oración gramatical de la lengua…y su capacidad para utilizar las estructuras de la misma para producir una infinita variedad de locuciones nuevas” (Bermeosolo, 2001: 21). El lenguaje es considerado como capacidad innata y como conocimiento, involucrando de esta manera la mente de las personas para llevar a cabo el lenguaje oral.

Por una parte, el paradigma estructural permite estudiar el lenguaje por niveles o componentes en donde la fonología, la morfosintaxis y léxico obtienen un papel fundamental y son considerados aspectos formales del lenguaje. Cada uno de estos componentes es sumamente relevante a la hora de diagnosticar y/o evaluar la presencia de un Trastorno Específico del Lenguaje. Por otra parte, el paradigma generativista centra su atención en los procesos mentales que ocurren en cada una de las personas al momento de llevar a cabo el lenguaje.

En el generativismo se otorga gran relevancia a la Teoría Modular , referida principalmente a que los procesos mentales son de dominio específico. Este concepto de modularidad no se limita a funciones perceptivas o de producción, sino que además abarcan procesos centrales y generales (Fodor, 1983). Frente a esta teoría se puede establecer que el lenguaje es una facultad cognitiva específica, que puede localizarse en una zona específica del cerebro humano. Sin embargo, se ha considerado la idea de un funcionamiento interactivo de los módulos y en paralelo, realizándose una organización modular del sistema cognitivo (Isuani, 2003)

Esta concepción modular coincide con el modelo de organización Psicolingüística de Osgood, donde la información ingresa por el aparato auditivo (Input), para ser decodificada perceptualmente y luego conceptualmente. El proceso contrario sería (desde el punto de vista del hablante), codificar la información conceptual y luego psicomotriz para finalmente emitir una respuesta verbal mediante el Output. Además de la presencia de estos “módulos” ocurrirían procesos centrales, concentrados en niveles, uno referido a la automatización de la información y otro a la elaboración superior y conceptual de la misma.

Si bien existen diferencias entre estructuralismo y generativismo, ambos son parte de un mismo paradigma. Estas corrientes han otorgado grandes conocimientos y han sentado las bases para el estudio de los Trastornos del Lenguaje, específicamente del Trastorno Específico del Lenguaje (TEL) tanto en su delimitación conceptual y etiológica, como en su evaluación e intervención.

Uno de los conceptos que define el TEL lo describe como una anormal adquisición, comprensión o expresión del lenguaje, explicitando que el problema puede implicar todos, uno o algunos de los componentes fonológico, morfológico, semántico, sintáctico o pragmático del sistema lingüístico. Además, de explicitar la presencia de dificultades en el procesamiento del lenguaje o de abstracción de la información significativa para almacenamiento y recuperación por la memoria a corto plazo (ASHA , 1980)

A partir de esta definición de TEL se pueden establecer subcategorías que pueden explicarse claramente desde el punto de vista estructural del lenguaje. Por ejemplo: un Trastorno Fonológico tendría sólo alterado el componente fonológico

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (15.9 Kb)  
Leer 9 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com