Seminario practico

Ensayo Final

        A medida que vamos recorriendo nuestro camino de vida, en cada brazo hay un rol que asumir como individuo que somos, he aquí nuestra vida estudiantil.  Cada día estamos propensos a conocer y enfrentarnos nuevos retos y cosas nuevas, y así aportar en el conocimiento de otros.  No obstante, a medida que vamos enriqueciéndonos en ocasiones pueden surgir varianzas de ocasiones en nuestro intelecto personal y profesional.  Es por eso que es de suma importancia detenernos a reflexionar sobre nuestra labor diaria.

        Al comienzo de este nuevo semestre, mis ansias por comenzar aprender nuevas cosas y experimentar algo que no había hecho eran muchas.  Cada día para mí es un reto por cumplir.  Y más aun cuando la preparación estriba en lo que me ha apasionado desde adolescente, ayudar al prójimo.  Es por tal motivo por el cual decido emprender una carrera universitaria y esta lo fue la Psicología.  La Psicología para mi es poder entrar al mundo individual de cada individuo, entenderlo y trabajar en conjunto para la solución de problemas.  La Psicología es parte de mi pasión, es la esperanza de ser alguien más que trabaja por un cambio, que no ve diferencias de colores ni posiciones sociales, que solo tiene un punto que es el bienestar del individuo propio.

        La vida ha puesto delante de mí, situaciones y personas que han atribuido en mi crecimiento profesional grandemente.  Y este semestre no fue la excepción.  Tuve como ejemplo a personas grandes, grandes del saber que han sabido dirigir y encaminar mis pasos y conocimientos que me han llevado a reflexionar mi punto de vista profesional.  Y profesionalmente me visualizo grande, al prepararme para ser una persona de bien, para estar rodeada de niños, adolescentes y adultos y  poderlos evaluar, y darle los mejores servicios para que puedan desarrollarse efectivamente.  Y me refiero a ellos porque no es solo una población por la cual quiero trabajar y brindar mis conocimientos sino a todos en particular.  Mis planes son seguir mi maestría en clínica, pero a su vez una certificación en sexualidad.  Porque lamentablemente estamos pasando por una época en donde aun existe un tabú su lo que es la sexualidad y tenemos una gran población de adolescentes con problemas de identidad sexual bastante alto.  Es por tal motivo deseo brindarle mis servicios en algún momento a esos jóvenes que lo necesitan y así poder ellos recibir la atención necesaria, la que se merecen.  Entonces, mi norte es ser ese pilar que los guie.  Mi meta es ver muchos rostros felices y menos miradas de frustración y tristeza.

        En cuanto al curso se refiere, desde el primer día de clases, vi entendimiento y vi identificación.  Y claro está, la práctica es para mí el punto clave o más bien, lo más importante en Psicología.  Podemos aprender sobre la relación entre el individuo, podemos conocer sobre las teorías y comportamientos anormales, pero si no sabemos cómo debe ser la relación entre cliente y terapista, no podemos ser psicólogos.  Puesto que la magia esta en esa interacción que tenemos con nuestros clientes, esas ganas de conocer más de ellos y poderlos ayudar personalmente de la forma más profesional y competitiva posible.  Y eso fue lo que aprendí en este curso.  Las dinámicas, los recursos, el tú a tú con el estudiantado, el presenciar cada caso y escuchar cada historia y presenciar sus comportamientos, me hizo aterrizar y encontrar la realidad que vivimos.

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