Sistemas De Salud

Sistemas de salud

LOS SISTEMAS DE SALUD

LATINOAMERICANOS EN TRANSICIÓN:

UNA VISIÓN PARA EL FUTURO

INTRODUCCIÓN

La salud se encuentra inextricablemente enlazada con las amplias transformaciones sociales de nuestros tiempos. Más allá de su interés intrínseco, el campo de la salud presenta un punto de observación desde el cual se pueden examinar los procesos económicos, políticos, culturales, demográficos, científicos y tecnológicos que marcan cada época. El campo de la salud, determinado por sí por el sistema social, refleja aspectos esenciales de cada sociedad en particular.

En concordancia con las radicales transformaciones sociales de las últimas décadas, la salud en América Latina ha estado sujeta a cambios intensivos y extensivos. Los múltiples cambios que se vislumbran en el horizonte, especialmente aquellos impulsados por las fuerzas demográficas, habrán sido determinados por eventos ocurridos en el pasado reciente y sólo podrían ser modificados por desastres naturales, guerras o desintegración social.

En este resumen se examinan algunos cambios sociales y epidemiológicos fundamentales en América Latina y su incidencia en los sistemas de salud, particularmente sus implicaciones para el tipo de transformación planeada, con sentido y positiva, que cae bajo la rúbrica de “reforma”.

La enorme heterogeneridad entre los países de la región y al interior de cada uno de ellos dificulta las generalizaciones. De hecho, el presente análisis enfatiza la necesidad de desarrollar políticas que tomen en cuenta las variadas condiciones que coexisten en la región.

Entre las distintas maneras de abordar el estudio del futuro, son tres las que sobresalen por su particular importancia. La primera es la simple proyección cuantitativa de las tendencias, la cual a menudo supone que las relaciones observadas en el presente perdurarán en el futuro. Otro enfoque apoya la construcción formal de escenarios alternativos, frecuentemente ateniéndose a opiniones de expertos. El tercer enfoque, que es el utilizado en el presente trabajo, se basa en el desarrollo de una visión explícita de un modelo preferido para el futuro.

Se inicia destacando diversos aspectos de cambio que traspasan a todos los sectores y que se cuentan entre los principales retos enfrentados por la población y las instituciones de atención a la salud de América Latina. Concluimos que el cambio en el campo de la salud no es un resultado mecánico de mayores fuerzas sociales, pero que las reformas innovadoras pueden moldear el futuro hacia una mejor salud.

RETOS A LA SALUD: LA DOBLE CARGA

Durante la última década la mayoría de los países de América Latina, al igual que en el resto del mundo, se han dedicado a una búsqueda común para encontrar nuevas y mejores formas de reglamentar, financiar y prestar servicios de atención a la salud. Una gran parte del ímpetu del movimiento de reforma se ha originado por la comprensión de que los sistemas de salud deben renovarse si desean marchar con la ola de transformaciones que ha arrasado con la demografía, la economía, la política, la cultura y la tecnología.

CONTEXTO CAMBIANTE DE LA REFORMA

Hoy en día la mayor parte de los países de América Latina enfrentan múltiples oportunidades originadas por los avances de la reforma económica y la democratización. Al mismo tiempo sin embargo, estas sociedades tienen que contender con retos complejos, los cuales en gran medida se derivan de las rápidas transformaciones de la posguerra. Durante el último medio siglo muchos países latinoamericanos han experimentado cambios que los países desarrollados sufrieron durante periodos de tiempo más prolongados. Esta modernización rápida ha ocurrido a diferentes pasos y velocidades entre los diversos segmentos de la sociedad, lo que con frecuencia ha dado por resultado una creciente desigualdad.

Estos cambios están avivando la campaña en pro de la reforma del sistema de salud. Ofrecer documentación empírica detallada respecto a todos estos cambios está más allá del ámbito del presente trabajo. Durante las recientes décadas la mayoría de los países latinoamericanos ha experimentado una alineación de fuerzas que actualmente ejercen presiones sin precedente sobre los sistemas de salud y continuación haciéndolo durante el futuro previsible. Las siguientes se cuentan entre las más importantes:

Urbanización. La migración masiva y algunas veces desordenada hacia los centros urbanos ha tenido serias implicaciones ambientales. En 1950, el 25 por ciento de la población vivía en zonas urbanas; para 1970, la proporción era de 58 por ciento y para 1990 de 71 porciento. Esta urbanización conduce a una reorganización y aun aumento de la demanda de atención a la salud por medio de dos mecanismos. La urbanización, al igual que la migración internacional, influye de manera significativa en la diseminación de las enfermedades.

La condición de la mujer. Durante el presente siglo la situación de las mujeres en las economías y sociedades latinoamericanas ha experimentado un cambio profundo. Durante el periodo de 1970 1990 la actividad económica de las mujeres aumentó 151 por ciento en comparación con un incremento de sólo 68 por ciento en el caso de los varones. Esta transformación ha tenido un impacto enorme tanto en las instituciones como en las estructuras sociales, siendo más notable en aquellas relacionadas con la familia. Las nuevas condiciones afectan la posibilidad de que la familia se mantenga sana, establecen alteraciones en los patrones de uso de los servicios de salud y generan nuevas demandas relacionadas con las cambiantes necesidades de salud de la mujer.

Cambios educativos. En las décadas recientes, la asistencia escolar a nivel primaria, secundaria e incluso superior ha aumentado de manera significativa. Esto ha dado por resultado un crecimiento del nivel de educación terminada en América Latina en general, concentrándose los avances básicamente en las áreas urbanas. Esta drástica acumulación de capital educacional ha facilitado un avance en los conocimientos y hábitos de salud y a la vez ha originado una población mejor calificada para exigir servicios de salud y para interactuar con los prestadores de los mismo. Ha generado un creciente grupo de individuos educados, capaces de cursar una educación superior y de trabajar dentro del sector salud.

Cambios económicos. Se puede considerar que el desarrollo económico es el resultado de una serie de procesos de transformación estructural a largo plazo que acompañan al crecimiento. Estos pueden caracterizarse en términos de los elementos del crecimiento económico moderno que incluyen fenómenos tales como la industrialización, la urbanización y la transformación agrícola. La profunda transformación estructural de las economías latinoamericanas ha colocado los cimientos para el crecimiento potencial de los ingresos, lo cual que a su vez impulsará aún más la demanda de cuidados médicos. La transformación estructural se refleja también en los cambios que incluyen la transición demográfica, la expansión educativa y la urbanización, con sus correspondientes implicaciones para el sistema de salud.

Cambios políticos. En muchos países el alza de los niveles de educación y las cambiantes estructuras y procesos políticos han dado como resultado un incremento de las oportunidades de participación social. En el área de la salud el aumento de la participación social puede palparse en un reconocimiento más difundido de que la atención a la salud es un derecho, en una mayor demanda de servicios de mejor calidad y en una mayor libertad para elegir a los prestadores.

Cambios tecnológicos. Entre otros adelantos en el campo de las comunicaciones, la llamada “súper-carretera” de la información está revolucionando las interacciones entre las naciones al interior de ellas, dado por resultado la globalización del conocimiento, la comprensión y los valores. Se puede esperar que los avances recientes en campos como la biotecnología, la informática y las telecomunicaciones incrementen la capacidad de los servicios de salud para poder identificar y afrontar los problemas de este campo. Los avances tecnológicos también contribuyen al incremento de los gastos en atención a la salud.

RETOS PARA LA POBLACIÓN Y LAS INSTITUCIONES

La combinación de un cambio rápido y desigual ha enfrentado a muchos países latinoamericanos a nuevos problemas, característicos de sociedades más desarrolladas, sin antes haber resuelto totalmente los antiguos problemas, típicos de sociedades más pobres. Por ello, el pasado y el futuro chocan en un presente complejo. Debido a la desigualdad cada serie de retos afecta a los diversos grupos sociales y áreas geográficas de manera diferente.

En el campo de la salud esta dualidad es generalizada. Cada análisis sistemático de una situación de salud debe enfocar dos elementos clave: poblaciones e instituciones.

RETOS A LA POBLACIÓN

Los retos que se le presentan a la población reflejan la dinámica demográfica y epidemiológica de la región. La evidencia empírica muestra que América Latina sufre aún de un retraso epidemiológico representado por enfermedades infecciosas comunes, desnutrición y problemas de salud reproductiva.

La región ha pasado por la etapa de crecimiento demográfico lento en la que las mujeres tenían media docena de hijos para poder garantizar su reemplazo por parte de la siguiente generación. En cuarenta años la fertilidad ha disminuido hasta 3.1 y sólo el 28 por ciento de cada generación de nacimientos no alcanza la edad de quince años. Esta disminución

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