TRABAJO SOBRE EL ENTRENAMIENTO EN HABILIDADES SOCIALES Y ASERTIVIDAD

TRABAJO SOBRE EL ENTRENAMIENTO EN HABILIDADES SOCIALES Y ASERTIVIDAD

ENTRENAMIENTO EN HABILIDADES SOCIALES (EHS)

Las habilidades sociales son aquel conjunto de conductas (comprendido también los pensamientos y emociones) que facilitan las relaciones interpersonales, permiten tener una sensación de bienestar, además de le permiten al sujeto lograr lo que desea y conseguir que los otros no impidan conseguir lo que se propone. Obteniendo de ese modo un máximo de beneficios y un mínimo de consecuencias negativas en el futuro, es decir que logre resolver situaciones de manera efectiva para el sujeto y el contexto en el que vive. Para Caballo (1986) las habilidades sociales son el conjunto de conductas de un individuo que expresa sentimientos, actitudes, etc. de un modo adecuado a la situación y puede a su vez respetar la conducta de los otros y logra resolver problemas mientras minimiza los problemas a futuro. Esta técnica se aplica a sujetos que tengan dificultades en esta área.

 Ahora bien el entrenamiento en estas habilidades sociales es aquella técnica que permite desarrollar repertorios flexibles y variados de estas conductas en lugar de patrones rígidos y uniformes. Ésta se basa en la premisa de que las habilidades sociales pueden ser aprendidas y que a su vez pueden mejorarse. De modo que el procedimiento de este entrenamiento consiste en observar las conductas adecuadas, practicarlas, corregirlas, perfeccionarlas, recibir reforzamiento y practicar en diferentes ambientes para adquirir estas habilidades.

Antes de aplicar ésta técnica se debe dar a conocer al sujeto el procedimiento que ha de seguirse y hay que prepararle para su participación. En ese sentido se busca que el paciente comprenda los principios básicos de este entrenamiento, que manifieste estar de acuerdo con lo que se le plantea y que desea adquirir esas nuevas formas de comportamiento para así lograr su participación activa.

El entrenamiento en habilidades sociales está integrado por diversas técnicas. Las cuales son:

• Instrucciones:

Inicia con la explicación que le permita guiar al sujeto en el empleo de respuestas específicas o patrones, centrando la atención sobre las conductas que se desea identificar, aquellas que debe ejecutar, aquellas que van a estar en evaluación y otras que deberá practicar. Las instrucciones deben incluir explicaciones claras y ejemplos, de preferencia realizados por el mismo paciente, y deben justificar la importancia del aprendizaje de estas conductas.

• Modelado:

Su objetivo es hacer demostraciones de las conductas que se desea que se aprendan. Esta parte del procedimiento lo importante es la exhibición por parte de un modelo frente a la persona que va a aprender esa conducta. Esta observación puede tener tres efectos: la adquisición de conductas nuevas, la inhibición o desinhibición de conductas existentes y la facilitación de determinadas conductas.

Para considerar un modelo se debe tomar en cuenta que la persona debe tener características similares al paciente tanto como ideográficas como respecto a las conductas exhibidas. El modelo debe mostrarse amistoso y agradable y que su actuación este acompañada por consecuencias positivas.

Otro aspecto a considerar es que la presentación del modelo puede ser real (es decir físicamente presente) o puede ser simbólico (imaginario como grabaciones).  Lo importante del modelo es que muestre una conducta de forma clara y precisa, que se presenten de la forma más sencilla a la más compleja

La percepción por parte del observador puede ser una observación del comportamiento presente en ese momento o mediante la imaginación de esa situación que se le está describiendo.  Para esto es necesario predisponer al sujeto para la observación y presentar la conducta modelo como una posibilidad y no como la única respuesta posible. Una vez finalizada la observación es necesario repetir la exhibición de la conducta, con el fin de favorecer condiciones de sobreaprendizaje.

• Ensayo conductual

Su objetivo es lograr que reproduzca y practique las conductas ya aprendidas hasta que pueda lograr un nivel de ejecución adecuado.  Así mismo existen dos modalidades; el ensayo conductual realizada con otros (real) y el ensayo en el que debe imaginarse las conductas (encubierto).

El sujeto debe tener un papel activo, centrar el ensayo sobre un objetivo / conducta especifico, planificar de forma progresiva de menor a mayor las situaciones a las que deba enfrentarse de modo que pueda pasar de representaciones estructuradas (mucho control por el entrenador) a representaciones no estructuradas permitiéndole aprendiendo finalmente respuestas improvisadas.  

• Retroalimentación

Su objetivo es perfeccionar las conductas exhibidas por el sujeto mediante la información que se le proporciona en relación a las acciones que el paciente dio antes.

La retroalimentación puede ser visual, por medio de grabaciones. Esto facilita la observación de acciones no verbales y verbales. También puede hacerse de forma verbal mediante comentarios de carácter técnico con el fin de describir, explicar y justificar las conductas observadas.  El propio sujeto puede realizar comentarios sobre sus propias respuestas.  

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