Caso Ejecutiva

I. INTRODUCCION

II. RELATO DEL CASO

Caso de Ejecutiva Bancaria Luz Angélica Ojeda Campos

“LA GRAN ESTAFA”

A partir de 1990, Luz Angélica Ojeda, ejecutiva bancaria del Banco de Chile, comienza a ganarse la confianza del matrimonio compuesto por Carlos Spiess (91) y la Sra. Berta Castillo (88). El matrimonio Spiess-Castillo vivía muy austeramente y casi recluido en una antigua casona patronal del fundo “Primavera”. Se trataba de un predio de difícil acceso y 2.400 hectáreas de extensión ubicados a 15 km. del oriente de Villarrica.

En el sector, el comidillo obligado era que don Carlos había “regalado” sus fundos ubicados a las orillas del exclusivo lago Huilipilún. El rumor callejero de su sorpresivo altruismo contrastaba con la fama de avaro, desconfiado y ermitaño. Ante esto, uno de sus camperos encargado de cuidar el ganado y explotar su bosque le comento a Spiess las habladurías del pueblo por lo que el anciano comenzó a sospechar. Ató cabos y recordó la seguidilla de escritos firmados por él y su mujer en el último tiempo en notarias de Temuco, Villarrica y Pucón.

Al principio, no quería creerlo “Si lo único que he firmado fue la corrección de mi apellido en un testamento reciproco” comento a uno de sus seis sobrinos, Oscar Spiess.

El anciano recordaba que hace cinco meses (diciembre 2003) había hecho una diligencia en la notaria de Pucón para, “supuestamente”, actualizar un antiguo testamento donde no figuraba uno de sus apellidos. En este documento el matrimonio se heredaba recíprocamente sus bienes en caso de muerte de uno de ellos.

Finalmente, el nonagenario agricultor encomendó a su abogado solicitar la copia del testamento supuestamente corregido. Para sorpresa de todos, lo que encontró fue un contrato de donación donde él y su cónyuge “donan, ceden y transfieren a doña Luis Angélica Ojeda Campos, quien adquiere y acepta para sí, el dominio y posesión de los inmuebles objeto de este contrato”, es decir, regalaban sus diez fundo avaluados en 12 millones de dólares.

Estos hechos acontecen tras 14 años en que Luz Angélica Ojeda se gana la confianza del matrimonio. La funcionaria bancaria aseguro, que a medida que de que ambos ancianos evidenciaban enfermedades, específicamente Alzheimer diagnosticado a Berta en el año 2002 ella comenzaba a acompañarlos en trámites personales, médicos, restoranes, supermercados e incluso en paseos de fines de semana.

“Lo hacía por humanidad, no por interés ni aprovechamiento alguno”, dijo la acusada en la audiencia ante el juez. “Estaban solos y desvalidos. Descuide mi propio matrimonio y a mi madre por ellos”.

Distinta es la versión del abogado de Spiess, Alfonso Podlech, quien sostiene que Luz Angélica, en complicidad con su marido, Rolando Zambrano, y el asesor jurídico externo del banco, Patricio Pinilla, “habrían planeado la apropiación de la fortuna cuando se dieron cuenta que la enfermedad de Berta Castillo avanzaba y ella se volvía incapaz de administrar sus bienes”. Podlech asegura que esto se inicia la mañana del 13 de septiembre del 2002 cuando se diagnostica el Alzheimer de la anciana.

Ante el deterioro de Berta, Spiess tiene completa confianza de Ojeda, la funcionaria comienza a tener cada vez mas injerencia en el manejo de sus cuentas, al punto que el agricultor solo firma cheques en blanco y que ella después los usa para pagar los sueldos de los trabajadores, las visitar y controles médicos, compras de la casa, materiales e insumos del campo e incluso cancelar al contado las frecuentes salidas.

En el intertanto, la ejecutiva bancaria descubre que ambos ancianos mantienen ahorros por unos 500 mil dólares en cuentas del Banco Credit Suisse y en la sucursal del Banco de Chile, en Nueva York. Es por esto que aconseja al matrimonio que cierren las cuentas y remitan las remesas a la sucursal de Villarrica, a su nombre.

Ojeda, aseguro ante el juez que no obtuvo ningún mandato de manera maliciosa “Yo le dije: Don Carlos, acepto estos mandatos sola, única y exclusivamente porque los quiero como herramientas para defenderlo cuando ustedes ya no estén en condiciones de hacerlo y comience a aparecer toda su familia”.

El matrimonio Zambrano- Ojeda comenzó a hacer ostentación de su súbita fortuna ya que empezaron a obtener bienes y realizar gastos

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