Catastrofe Silenciosa

Como muchos de nosotros nos hemos dado cuenta la oferta y demanda en cuanto al empleo en México ha sido un problema al cual la educación hasta ahora no ha podido dar fin, de hecho existe desde hace por lo menos 2 décadas la idea de que la falta de correspondencia entre lo educativo y lo laboral ha sido causa de la devaluación de la educación forma; se suponía que la educación debería de haber formado tanto técnicos como profesionistas, sin embargo no es así los puestos de trabajo no están supeditados solo al conocimiento o las habilidades de las personas, en ellos influyen muchos otros factores.

Por lo tanto en el Sistema Educativo Nacional de nuestro país existen cinco principales desafíos:

1. El de la equidad, en torno a preparar a los maestros que atienden a los alumnos de los medios más desfavorecidos.

2. El de la calidad, donde se pretende mejorar el proceso de aprendizaje, desde la formación normalista hasta los mecanismos de actualización y promoción de los maestros. Pues la educación abarca necesariamente la formación de valores.

3. El del financiamiento, pues es imperativo que los docentes recuperen el nivel de remuneración de hace casi 3 décadas, pues aunque se aumentaran los recursos para la educación en el PIB, lo más importante es establecer metas específicas antes de asignar los fondos.

4. El de la productividad, el empleo y la revolución científico-tecnológica, ya que la educación tendrá que adaptarse a los requerimientos que plantean los procesos productivos de hoy en día, tan tecnificados y computarizados.

5. El de la participación social, pues es necesario que los docentes sean capaces de articularse con la sociedad civil, de manera que se formen grupos con participación orgánica entre sectores.

Para que todo esto suceda, los autores, entre ellos Guevara Niebla expusieron algunas propuestas, cabe señalar que el texto fue escrito en 1992 y hasta ahora al parecer estas propuestas han llegado a cristalizarse, aunque no de manera utópica como lo manejan en este texto.

La primer propuesta que se señala es la integración de una comisión no gubernamental, formada por personalidades y especialistas ajenos a los interese del sector, quienes tendrán a su cargo la tarea de hacer un diagnóstico exhaustivo sobre la realidad educativa del país; al parecer esto se está formalizando a través del INEE (Instituto nacional de evaluación a la educación) y las leyes secundarias, las cuales distan mucho del horizonte de valores docentes del que trata la lectura.

Se pretende que esta comisión tenga como fin la pluralidad y el debate, la conciencia de la necesidad del cambio y que sea un trabajo independiente de los órganos de gobierno, nada más lejos de la realidad, financiado por el gobierno, los particulares y el sector social, tal vez sea por esta situación, el ideal se vendió al gobierno.

Guevara Niebla entre otros autores describe los hechos del estado de la educación desde la perspectiva de la investigación cuantitativa y desde la interpretación cualitativa. Y aun cuando se trata de una aproximación general deja ver lo que los maestros de esta generación estamos haciendo de manera efectiva, y lo que el gobierno y el sistema están dejando en nuestras manos, como mera responsabilidad aislada de todo el contexto en general de nuestro país.

Para empezar la educación formal ha tenido un crecimiento acelerado en cuanto a cobertura, matrícula y oferta, sin embargo en cuanto a calidad se refiere, este rubro deja mucho que desear. Por tanto la educación ha llegado a ser una empresa para los particulares, pero también un proyecto en desarrollo a partir de la Segunda Guerra Mundial.

La función de la escuela en el México moderno de finales del S.XX estaba pensada en la formación de recursos humano que llenaran las filas de la planta productiva, de manera que se creara una atmosfera de cultura y urbanización en nuestro país. La educación de los 90´s reflejo los rasgos centralistas y corporativos del sistema político- empresarial en turno. Desde 1945 los servicios educativos se ampliaron y diversificaron.

En cuanto al deterioro progresivo de la calidad académica encontramos indicadores cuantitativos en todos los niveles, mismos que se reflejan en los bajísimos niveles de aprovechamiento en exámenes de admisión y estandarizados que no se han tomado como medidas formales de medición nivel mundial o nacional.

En resumen para la educación primaria, quienes tienen que presentar examen de admisión a la secundaria se encontró que en estado de Jalisco, de una muestra de 42,367 estudiantes los promedios de eficiencia en comprensión fueron los siguientes (escala del 1 a 10): 8.34 de lectura, 6.84 ortografía, 5.41 literatura, 5.37 ciencias sociales, 5.33 lingüística, 4.96 ciencia naturales y 4.15 matemáticas en 1988.

Otra prueba aplicada en 1983 de una muestra de 880 alumnos de sexto grado en Aguascalientes, dio los siguientes porcentajes de reprobación: matemáticas

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