Curriculum Oculto

LA ESCUELA Y LA POLÍTICA DEL CURRÍCULUM OCULTO

La elaboración de estudios de diferentes corrientes, centrados en el currículum oculto y su impacto en la elaboración de un esquema amplio de influencias en el proceso de escolarización han tenido como resultado la necesidad imperiosa de una crítica a los trabajos realizados en torno a esta herramienta teórica. En este ensayo se expresan las necesidades de generar un nuevo marco de referencias y conceptos para redefinir los elementos y su participación en la elaboración del currículum oculto y su participación en la escuela.

Si lo que queremos es expresar un marco realista de la situación actual de la pedagogía, es necesario que nos dirijamos en un comienzo a otras esferas de la producción social, los principales grupos de dominación, a través de sus redes, primordialmente la rama de la industria, han trabajado incesantemente en la construcción de un cuidadoso tejido programático que instrumentalice sin fisuras la elaboración de una dirección pedagógica, que obstaculice el pensamiento divergente y reproduzca las relaciones de producción en base a una ideología. “La reproducción de la fuerza de trabajo hace, pues aparecer, como su condición sine qua non, no solamente la reproducción de su cualificación sino también la reproducción de su sometimiento a la ideología dominante” (Althusser, Textos fundamentales).

Sin lugar a dudas, son varios los elementos que podemos rescatar desde los autores marxistas en la construcción de una teoría critica para la educación, pero es importante para nuestro nuevo marco teórico práctico, desarrollar una teoría que reconozca la interacción

Dialéctica entre los actores sociales, el poder político por un lado, y por otro el conocimiento junto a las prácticas culturales en la escuela. Es en este punto donde el autor nos introduce en una reflexión de las diferentes corrientes de pensamiento que han teorizado en torno a los componentes del currículum oculto, y a su evolución en el proceso de cuestionar la uniformidad aparente en el discurso oficial de su contribución a la sociedad. Pese a que las líneas de interpretación han ido desde versiones tradicionales, llegando hasta las radicales, existió un consenso en presentar a la escuela como una estructura que no sólo cumplía con el rol de traspasar conocimiento, dentro de las distinciones teóricas de este trabajo, el mayor énfasis de estudio, lo recalcara en la ideología en las escuelas, que viene a integrar la cultura informal y los modos de conocimiento entre otros puntos, lo que podemos extraer de estos puntos es la comprensión de aspectos esenciales respecto a, primero, construcción de la escuela como espacio político fuertemente influenciado por un discurso valórico y de una proyección conductual dominante, segundo el análisis de este no puede estar exento de una mirada hacia otras instituciones, pues lo que estudiamos en este trabajo se centrara en la faceta no académica del currículum.

Desde el enfoque que nos relata el autor, las diferentes direcciones que se han preocupado por estudiar el currículum oculto no han podido ofrecernos las herramientas adecuadas para su análisis. “Mi supuesto guía es que todos estos enfoques a ser analizados inevitablemente fallan al no ofrecer elementos teóricos esenciales para una pedagogía crítica comprensiva” (La escuela y la política del currículum oculto, pág. 74).

Para no extender innecesariamente este informe, resumiré las principales premisas de los postulados y las razones de por qué han de ser incompletos. En el enfoque tradicional, el paradigma reflejado es el de una escuela funcional a la sociedad existente, abordando principalmente problemáticas de consenso y estabilidad de las estructuras que pretenden transmitir el conocimiento, aceptando de antemano los valores y normas de la sociedad dominante. “De manera consecuente los estudiantes son definidos en términos conductuales reduccionistas y el aprendizaje se reduce a la trasmisión

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