HACIA UNA PEDAGOGIA DEL SIGLO XX

Los autores Fernand Oury y Aída Vásquez afirman el carácter inútil nocivo del profesor tradicional.

El niño, el estudiante y el adulto en el periodo preparatorio, es una relación no-directiva esto quiere decir que ya no son objetos del profesor, sino que son considerados como sujetos capaces de despertar a la investigación, las afirmaciones de Rogers acerca del carácter inútil y nocivo del profesor clásico, acerca de su función, que es la de facilitador de comunicaciones, y la de la importancia que atribuye a los intercambios de adquisiciones , provocan la sorpresa escandalizada de los educadores satisfechos de sí mismos , de sus métodos y de sus resultados.

Los pedagogos Descartes y Rousseau no se dejan seducir por el optimismo y la generosidad de la teoría rogeriana de la personalidad, que aparece en la forma de tres sentimientos íntimamente ligados, a saber “un sentimiento positivo” de otros hacia nosotros y de nuestros propios sentimientos positivos haca algún otro. Rogers escribe “el núcleo íntimo de la personalidad es de carácter positivo”. Esta teoría se basa en el hecho de que el individuo es capaz de dirigirse así mismo… esta capacidad de dirección se llama glowth (incrementos o logros)

Le Bond “fue la necesidad de los alumnos de entregarse a un trabajo serio” el maestro aprende a escuchar, a callarse y los niños hablan, trabajan. El maestro abandona su papel de, magister para ocupar en clase su verdadero lugar que es el de adulto responsable de sus actos.

La pedagogía institucional es un conjunto de técnicas, de organizaciones, de métodos de trabajo y de instituciones internas nacidas de la práctica de clases activas, que coloca a los niños y a los adultos en situaciones nuevas y variadas que recurren de cada uno entrega personal iniciativa, acción y continuidad.

Puede definirse desde dos puntos de vista:

Estático: como suma de medios empleados para asegurar as actividades y los intercambios de toda suerte, en clase y fuera de esta.

Dinámico: como una corriente transformadora del trabajo dentro de las instituciones.

Las metas que persigue son:

• Realizar un trabajo no aburrido con los alumnos

• Aportar una formación sistemática, que trabaje sobre la personalidad y la vida social, en vez de limitarse al plano intelectual.

• Preparar a los alumnos para el análisis del sistema social en el que viven.

Su aplicación significaría rescatar la ideología, la utopía y la fe en una educación formadora y recuperadora de la libertad. Las escuelas y las aulas necesitan de alguna manera aprender de nuevo lo que significa para el ser humano, lo que sencillamente

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