LA PRACTICA ESCOLAR DESDE LA PERSPECTIVA DE LA IGUALDAD DE GÉNERO

LA PRACTICA ESCOLAR DESDE LA PERSPECTIVA DE LA IGUALDAD DE GÉNERO

INTRODUCCIÓN

La práctica escolar desde la perspectiva de la igualdad de género. La escuela en conjunto con la familia son las instituciones más importantes en donde se genera la socialización del individuo y se promueven las relaciones sociales entre los seres humanos que en ellas conviven y al mismo tiempos e van construyendo las vías a través de las cuales se trasmiten estereotipos de género, los cuales se convierten en elementos determinantes en su vida diaria los cuales se van superando de acuerdo las experiencias educativa que experimenten durante su paso por la escuela.

Es una necesidad que se incorpore la perspectiva de género en los centros educativos con mayor impulso siendo que algunas regiones o comunidades de nuestro país que por factores económico de costumbre o tradiciones en su contexto y la ubicación geográfica son las limitantes para que las mujeres logren tener una educación de calidad, en la ciudad de Oaxaca que tiene una riqueza cultural, hay personas analfabetas y lamentablemente el 75% de la población son mujeres, y de casi 50000 personas más que tienen su educación básica incompleta el 57 por ciento son mujeres.

Por lo tanto la perspectiva de género supone una posición política frente a la opresión de género. La educación con perspectiva de género implica la formación de la nueva personalidad, del individuo nuevo, sobre la base de la equidad entre los sexos, buscando alternativas que le permitan acceder de manera igualitaria a los servicios que brinda el sistema educativo, sin discriminación, ni exclusión.

El aumento de las oportunidades educativas para los jóvenes en México A la educación se le ha conferido un lugar preponderante en las sociedades modernas, especialmente porque se le asocia con la posibilidad de cambio social.

La escuela como agente de cambio y de socialización, en conjunto con la familia tiene la misión social de educar en una cultura sana convivencia y en la igualdad de géneros trasmitiendo valores y patrones entre los niños y niñas que promuevan la equidad de género, los docentes deberán evitar los juegos el trato, el lenguaje y otras prácticas que refuercen los estereotipos de género en el aula , la escuela y por ende en la familia.

Hombres y mujeres somos diferentes, física y biológicamente pero no por ello superiores o inferiores; socialmente tenemos las mismas obligaciones como los mismos derechos así como gozar de las garantías individuales y por ende de la educación, respetar esas diferencias y las opiniones divergentes y enriquecernos de ellas significa ser abiertos a la diversidad.

Siendo que en la actualidad el Plan Nacional de Educación, sustenta en su principio pedagógico favorecerla inclusión para atender a la diversidad.” La educación es un derecho fundamental y una estrategia para ampliar las oportunidades, instrumentar las relaciones interculturales, reducir las desigualdades entre grupos sociales, cerrar brechas e impulsar la equidad:

Es pertinente por que valora, protege y desarrolla las culturas y sus visiones y conocimientos del mismo que se incluyen en el desarrollo curricular.

Inclusiva por que se ocupa de reducir al máximo la desigualdad de acceso a las oportunidades y evitar los distintos tipos de discriminación a los que están expuestos niños, niñas y adolescentes.”

Por lo tanto aplicar este enfoque significa identificar:

• Las necesidades específicas de hombres y mujeres

• Las brechas existentes entre hombres y mujeres en cuanto al acceso y control de los recursos y posibilidades de desarrollo en general

• Las posibilidades para apoyar el desarrollo de las mujres en el plano social económico y político del país.

La escuela tiene el papel fundamental de la formación integral de la personalidad del individuo, tiene que ser un espacio en donde la educación en igualdad de género y debe ser se corrija cualquier tipo de desigualdad de género principalmente el docente debe tener presente que las prácticas educativas se transforman desde el lenguaje que utilizamos al dirigirnos a los alumnos y alumnas porque omitimos estas palabras y generalizamos alumnos, al formarlos la fila de niños , fila de niñas, o los juegos o actividades lúdicas aún se da la separación por sexos por lo que desde ahí se debe tener cuidado. Es tarea de la escuela promover saberes desprovistos de estereotipos de género, una educación no sexista en sus educandos, y lograr el crecimiento personal de los individuos despojados de todo tipo de prejuicios.

A pesar de todo esto que vivimos a diario en la escuela no se ha erradicado del todo la desigualdad de género y es triste ver que aun con todo lo que sustentante la Reforma Educativa y lo que los cambios sociales exigen se cae en prácticas tanto familiares como en la escuela donde por lengua o espacios geográficos las mujeres y niñas son limitadas en los espacios educativos y aun los niños expresan que no pueden o no deben hacer tal cual o cual cosa porque son niñas, también las tradiciones de algunos pueblos en el sur del país donde a las niñas las casan muy jóvenes y no estudian esto es triste que aun pase pero es cierto la misma familia limita a las mujeres a estudiar.

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