La identidad política en crisis, ideologías en decadencia y ciudadanía disruptiva como consecuencia

Artículo: “La identidad política en crisis, ideologías en decadencia y ciudadanía disruptiva como consecuencia.”

• Objetivo. -  Identificar conductas que realizan los principales partidos políticos de México que son contrarias a sus ideologías, revisando sentencias emitidas por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. (pri-pan-morena).
• Señalar como es que estas inconsistencias ideológicas son terreno fértil para la construcción de una ciudadanía disruptiva.

Metodología: Desde el punto de vista de la etnografía.

Introducción:

México ha entrado en un crisis de valores fundamentales e ideológicos en la sociedad y se estancó de manera particular en la cultura del ciudadano mexicano, al grado de pensar que existen ciertas cosas que simplemente son imposibles de resolver sin una ventaja. Esto se ve reflejado en los partidos políticos, pues al prostituir su ideología con el fin de obtener el poder, crean una identidad politica que cada vez esta más cerca del colapso, y esto ocasiona la construcción de una ciudadania disruptiva^[1], o en pocas palabaras, una nueva identidad política.

El contexto de esta investigación surge el 1 de julio de 2018, en donde Andrés Manuel López Obrador (AMLO) fue el ganador de la elección presidencial de México, con un 53.19% de la votación. Contendió contra Ricardo Anaya del Partido Acción Nacional (PAN), José Antonio Meade del Partido Revolucionario Institucional (PRI), y Jaime Rodríguez Calderón, un candidato independiente. La coalición política de AMLO, dominada Movimiento Regeneración Nacional (Morena), partido que fundó en 2014, se convirtió en el grupo más numeroso en el Congreso, lo cual sienta las bases para que el nuevo presidente implemente su agenda legislativa. (Revista Expansión, pág. en línea).

La falta de consistecias ideológicas de los partidos políticos generan muchas vertientes que pueden llegar a ser sujeto de estudio, como la violencia en contiendas electorales, limitantes al derecho de libertad de expresión de los partidos políticos, pero para el presente artículo será la vertiente de la ciudadanía disruptiva.

Desarrollo:

1. La ideología de los partidos políticos en decadencia.

Los partidos polítcos en México siempre han tenido un rol muy importante en el desarrollo de la sociedad mexicana misma, pues en sus comienzos, se fundamentaban en ideales revolucionarios. A continuacion se analizarán los orígenes de las ideologías políticas de los grupo de poder con mayor influencia en México.

Pero antes es necesario mencionar que para el presente trabajo de investigación se considera como ideología a: “el fundamento de las representaciones sociales compartidas por un grupo social.” (Abercrombie, Colina y Tornero, 1980) ^[2] 

Para poder entrar en el tema se requiere, como requsito sine qua non, entender que el término puede ser aplicable en cualquier rama de la ciencia (social o exacta) ya que, como se explica supra líneas, es la sociedad la que calificará su uso dependiendo el campo semantico en concreto.

Dejando en claro que las ideologías son un cúmulo de ideas que predominan en un áerea determinada, en este caso, el áera de la política, lo que trae como resultado la ideología política.

En cambio, hablar de identidad política hace referencia en cómo se ve reflejado ese partido politico en la sociedad. Es decir: si sus acciones, estrategias de campaña y el destino de los gastos ordinarios para actividades permanentes, estan destinados hacía una ideología (por ejemplo) de izquierda, es entonces, ese partido identificidado como “de izquierda”. El conflicto surge justamente cuando partidos con identidad “izquierda” promueve una agenda de “derecha”, sus militantes cada vez se sentirán menos identificados con ese partido que traicinó lo más sagrado que tiene, su esencia, su ideología.

El primero de ellos, Partido Nacional Revolucionario (PNR), hoy Partido Revolucionario Institucional (PRI). Proveniente de una ideología centralista, que fue fundado en 1928 por Plutarco Elías Calles, uno de los líderes más importantes de la Revolución Mexicana. El Cual en un principio fue un partido con connotación socialista, ya que incluía ayudas al campo según la división de la tierra, “la tierra es del quien la cosecha” (lema de la Revolución Mexicana), pero fue cambiando gradualmente. Pasó por diversos cambios hasta que finalmente se acopló al centro, liderado por Lázaro Cárdenas del Río y su renovación se debió a que el partido dejó de ser único por la aparición de los nuevos partidos de oposición.

La misma historia fue poniendo en tela de juicio al PRI, ya que con la llegada de nuevas generaciones ajenas a la revolución, el partido se debatía entre la vida y la muerte, existiendo más presión por parte de la oposición lo cual los obligaba a tomar medidas alejadas a su ideología, aunque siguió trabajando por ampliar el acceso de la población a la vida política e impulsó el reconocimiento del derecho político-electoral de votar a las mujeres ^[3]. Al final, renunció a sus ideales de izquierda y se colocó en el centro, tratando así de mantener su hegemonía política, pero estaba imposiblemente abrumado por la institucionalización de la revolución.

 Es por ello que en 1946, surgió el Partido Revolucionario Institucional que conocemos ahora, que si bien se ha venido desarrollando a lo largo de la historia política mexicana como un partido hegemónico, el hartazgo político que ha generado gracias a diversos problemas causados por la corrupción y la violencia, los ha obligado a traicionar su ideología de nueva cuenta.

La ideología central la define la Universidad Naconal Autónoma de México (2016) como las aspiraciones, principios, fundamentos, extensión y métodos del conocimiento de un ente individual con el objetivo de la obtención del uso del poder, mediante el servicio a la comunidad y buscando el bien común.  (Portal académico UNAM, 2016, fecha de cosulta agosto 2021)

Pero ¿de dónde proviene?, de acuerdo al Portal académico UNAM (2017), menciona que proviene del latín centra, “un solo lugar” y lismo, “persona”, por lo tanto “Es un sistema que concentra el poder y las funciones político administrativas en un órgano central: el Estado como autoridad suprema, el cual provee exclusivamente el ejercicio y administración de los derechos públicos y colectivos del país”

Ahora bien, en retrospectiva, podemos analizar que el PRI que se dice es acreedor de la ideología centralista, ha transformado tal carácter convirtiéndolo en un federalismo oscuro, ya que si bien el federalismo es un acuerdo de unión entre varias entidades territoriales llamadas estados o provincias que delegan parte de su autonomía en un organismo o autoridad general: el Estado. Los estados conservan su soberanía, leyes y autoridades propias, pero se oscurece al momento en que esos estados o provincias son subordinados del Estado central, encargado de imponer reglas que van en contra de su soberanía.

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