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PROBLEMATICA DE LA MUJER EN LA SOCIEDAD

LHUNNA253 de Febrero de 2013

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INTRODUCCIÓN

El fin de esta monografía, es poder descubrir todos los problemas que debe afrontar la mujer en los distintos pasajes de su vida.

Los problemas de la mujer se han hecho tan complejos e involucran aspectos tan delicados conectados a la vida misma de los pueblos y naciones, y desenvolvimiento, que implican a su vez una serie variadísima de facetas para tratar y una labor tan amplia y complicada a desarrollar.

Las mujeres se movilizan y aportan sugerencias y proposiciones porque es entre todos, incluyendo a los hombres arribarán a una convivencia más armónica.

Por eso trataremos en esta monografía de demostrar todos los problemas que afronta la mujer desde los inicios de la historia hasta la actualidad.

HIPÓTESIS

"La problemática de la mujer argentina bajo el Punto de vista social y afectivo determinó su Lucha a través de los años para conseguir Destacarse entre los hombres y dentro de la Sociedad."

ÁMBITO FAMILIAR Y AFECTIVO

• ROL DE LA MUJER EN LA ANTIGÜEDAD

• MATRIARCADO: Su Evolución

• EL MUNDO ANTES DEL PATRIARCADO

Al no conocerse el rol del hombre en la antigüedad, su intervención en la sociedad y en el mundo entero era muy distinta a la que tiene ahora.

En primer lugar, no existía la palabra "padre", puesto que éste sirve para designar una función hasta entonces desconocida. Al no existir el padre, no existía el plano horizontal constituido por el matrimonio, sino sólo el plano vertical entre madres e hijos. Es decir que no existía la familia, en el sentido que hoy se le da.

La madre era el único centro posible de la vida social; a ella pertenecían con derecho exclusivo los hijos que al parecer ella sola engendraba, ejerciendo sobre ellos la más completa "matria potestad". "Siendo la única fecunda, ya que el hombre es, según esa concepción y dicho sea con respecto, un animal infecundo" .

La Humanidad era en aquella época tan diferente que su mismo nombre se traduciría por el de "Feminidad". Esto es el reflejo de una cultura cuya mentalidad luego perpetúa, nos manifiesta el profundo cambio operado.

• GRANDEZA Y DECADENCIA DEL MATRIARCADO

El matriarcado primitivo tuvo su última y gran aparición en la revolución neolítica, y que trajo consigo la agricultura, el sedentarismo y la posibilidad de aumentar la población.

En los ritos agrarios la fecundidad de la mujer estaba ligada a la de la tierra, constituyendo ésta un monopolio femenino, tanto material como espiritual. Pero este florecimiento agrícola del matriarcado, traía como consecuencia su propia destrucción, al fomentarse la agricultura, el sedentarismo y las matemáticas, descubriendo el hombre su papel dentro de la sociedad. Y con este conocimiento los hombres, tomaron conciencia de su valor, se sublevaron contra el sistema matriarcal y le infligieron "la gran derrota histórica del sexo femenino, de la que todavía sufre las consecuencias el patriarcado".

I.

a.

1. LA MUJER SOLTERA. PRESION MATRIMONIAL DE LA SOCIEDAD EN LA FORMACIÓN DE LA JOVEN MUJER

b. SUS ETAFAS DE DESARROLLO

Unida a la iniciación domestica de la adolescencia se desarrolla una preparación paralela para el matrimonio, que le es presentado como la única meta posible de realización y la única forma de alcanzar la felicidad mediante el bienestar, la seguridad, el respeto individual y social.

La sociedad establece que la mujer sólo realice a través de su futuro marido, ya que ella misma no puede aspirar a una realización exitosa y por lo tanto, no puede llegar a obtener una independencia económica verdadera. Debido a esto su futuro depende de la elección del cónyuge que haga. Es natural, entonces, que se sienta tentada por esa facilidad tanto más cuando los oficios femeninos son muchos más ingratos y mal remunerados, todo lo cual hace del matrimonio una carrera más ventajosa que muchas otras.

La mujer soltera no podía realizarse en su condición de madre, ya que el estado de madre soltera se consideraba una vergüenza social, tanto para ella como para su familia y su futuro hijo.

Anteriormente la mujer soltera era un ser nulo, enclaustrada y dependiente del hogar paterno. No tenia vida propia, cuidaba hijos ajenos, tejía o cosía para ellos. No tenía derechos y a lo más que podía aspirar era realizar obras de beneficencia si quería ser útil a los demás y dar un sentido más elevado a su vida.

En la actualidad la mujer soltera dejó de ser el trasto inútil, que iba de un hogar a otro, se ha convertido en un ser dinámico e independiente. En el aspecto activo, se abren numerosas posibilidades para la mujer soltera. La joven actual debe desechar el fantasma de la soltería, conque se amenazaba a nuestras abuelas, hoy en la actualidad la mujer soltera ha dejado de ser la tradicional solterona amargada y frustrada para convertirse en un ser libre, trabaja, estudia, etc, porque su tiempo le pertenece enteramente. Hoy, las diversas circunstancias han invertido los papeles y es la mujer casada quien no tiene vida propia, se convierte en un ser anulado, presionada por la propaganda, cercada por la sociedad, por sus tareas domésticas y la maternidad exclusivista, termina por aceptar la personalidad limitada de mujer - hembra e identificarse con la imagen de la "feminidad" asignada para su sexo, acepta ser pasiva y dependiente, renunciando a todo intento de trascendencia.

En cambio el varón soltero no se realiza como padre en algunos casos pero no cumple una funcióndinámica que lo hace útil a la sociedad y le permite desarrollar su personalidad sin mutilaciones, además cuenta con la aprobación social de su libertad social y sexual. Es muy importante recalcar este factor, ya que es uno de los que ejercen más influencia para que la mujer le cueste alcanzar niveles más altos en su evolución dinámica.

La transformación que experimenta la joven emancipada y dinámica en la persona sometida en que se convierte al casarse y tener hijos, nos permite seguir el proceso por el cual la mujer se hace pasiva y advertir como carece de defensa ante la colosal maquinaria de la sociedad y la educación formativa.

La joven actual no ha tomado conciencia del problema femenino, está confusa y no advierte con claridad el futuro que le espera; sólo vive su presente, se siente libre y todo a sus alrededor contribuye a ello. Pero su libertad y su igualdad son como pompas de jabón brillantes, pero efímeras, que se desvanecerán al hacerse adulta y asumir las responsabilidades de su vida.

Los jóvenes engañan fácilmente y creen poseer ilimitadamente la irresponsabilidad y promesas propias de la juventud. Se los consienten, se creen importantes, pero cuando se convierten en adultos y debe concretar esas promesas, cuando se pesa y se mide el valor verdadero de cada individuo, los caminos se bifurcan para los sexos y mientras el muchacho puede o no concretar esas esperanzas, la joven pasa a ser nada en sentido de la realización individual, absorbiéndose por su papel de madre – esposa.

Todo lo que fue gracia pasa a ser desgracia, todo lo que se le aplaudió es ahora reproche, debe cambiar de gustos, de personalidad; su inteligencia y su preparación que antes se le alababan, molestan; su libertad escandaliza; su alegría es inadecuada; su iniciativa nula; etc. Debe convertirse en sombra y eco del hombre que es su marido. Esta metamorfosis es penosa para ella y le exige sacrificios y renunciamientos.

El resultado de esta transformación es la mujer doméstica, femenina, sometida y anulada. Ello termina por aniquilar a la mujer sumisa y conflictuada a la rebelde, de allí la frustración, el resentimiento en que viven infinidad de mujeres demasiado sometidas para rebelarse y asumir actitudes de liberación y que, en muchos casos, toma formas un tanto grotescas porque al tener cerrados otros caminos se produce en ellas un vuelco a la frivolidad con sus lamentables consecuencias y, en la mayoría, la pasividad y el acatamiento a las nuevas normas con el total renunciamiento de todo intento de personalidad individual. Pero para la joven esto no se presenta con su clara realidad lacerante. Nadie sabe decirle con objetividad que elige y que rechaza al casarse. Por lo tanto la joven renuncia a su autonomía y se somete. Acepta junto con el matrimonio y los hijos, la rutina, la servidumbre domestica, la dependencia, la falta de libertad. Salvo que pueda ser lo bastante fuerte que al casarse exija no perder sus derechos y libertades que ha mantenido durante su soltería.

Por lo tanto, es necesario solucionar las tremendas barbaridades que se cometen con las mujeres para evitar su desequilibrio nervioso y su desubicación social, porque la mujer no sabe con certeza cual es el papel que le corresponde. Hay que evitar que maravillosos seres humanos dotados de condiciones y provistos de un mensaje callen y mueran como tales, por asumir el rol domestico, que junto con la maternidad exclusivista, les impone la sociedad.

Por obra de su formación y de la presión social la joven rebelde termina por aceptar como algo inevitable su destino femenino. "La joven entierra su infancia y al individuo autónomo que ha sido y entra sumisa en la existencia adulta".

Por regla general, cuando ello ocurre y se acepta ese destino femenino adulto "nace la mujer femenina" y muere el ser humano que había en ella porque muere toda posibilidad de trascendencia. "Todas vosotras moría a los 15 años". La joven que ambiciosa y soñadora termina por comprender que las puertas de la realización individual están cerradas para ella.

Observo que

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