Sistema Electoral

UNIDAD 4.

Sistemas electorales.

Los sistemas electorales son instrumentos que consisten en procedimientos tendientes a tomar decisiones en grupos sociales; sin embargo, no son las únicas vías para llegar a una determinación, pues existen otros procedimientos siempre que sean aceptados, entre los cuales cabe mencionar el uso de la fuerza, el azar, la costumbre y la rotación.

La denominación de sistemas electorales se dirige a la designación de personas a cargos públicos, para lo cual tampoco los sistemas electorales son la única manera, sino que existe el golpe de Estado, la revolución o el sistema hereditario.

El signo distintivo de la elección es que varias personas participan en su determinación. La elección puede ser directa o indirecta: la primera es el sufragio personal individual, el cual se entiende como el de una cabeza, igual a un voto; y la segunda es por medio de representantes.

Para la elección de representantes populares existen dos grandes sistemas electorales que representan dos criterios técnicos distintos: el sistema mayoritario y el de representación proporcional.

4.1 Sistema mayoritario.

La elección conforme al principio de mayoría es la forma de participación política más estrechamente vinculada con la historia del desarrollo de los sistemas políticos y electorales democráticos. El ideal igualitario y el abandono de la unanimidad medieval condujo a aceptar la decisión de la mayoría por la minoría, como la disciplina necesaria para ofrecer un frente común hacia el exterior y lograr la unidad requerida para operar un gobierno funcional en el interior. El reconocimiento de igualdad y el derecho de participación comenzó a expandirse paulatinamente después de la Revolución Francesa y con ello se extendió al principio de respeto a la voluntad de la mayoría. John Locke enuncio la necesidad de la voluntad mayoritaria para hacer posible la transformación de una multitud en una comunidad; el mismo autor insistió en atemperar el poder de la mayoría, mediante la tolerancia y el reconocimiento de la minoría, respecto sus opiniones, intereses y asociaciones.

El sistema mayoritario que conforma a partir de tomar en cuenta que debe ser electo el candidato que obtiene el mayor número de votos en un distrito; además, dicho sistema admite dos variantes principales: el sistema mayoritario uninominal y el sistema mayoritario de lista.

En el sistema mayoritario uninominal, el territorio se divide en las demarcaciones territoriales como puestos de elección, abarca la contienda electoral y los electores votan por los candidatos que proponen los partidos para cada distrito.

Para el sistema mayoritario de lista, el territorio se divide en porciones territoriales más amplias que la del distrital, denominadas circunscripciones, con las que el elector vota según las listas de candidatos propuestos por los partidos participantes. Según el sistema mayoritario para la lista, la plataforma política del partido ocupa un rol más importante que las personalidades de los candidatos.

Atendiendo al desarrollo del sistema mayoritario, este se distingue entre uno o dos turnos. El primero se otorga el cargo al candidato que obtiene el mayor número de votos independientemente si se obtuvo la mayoría absoluta. A su vez en las elecciones a dos turnos, los candidatos en el primer turno deben obtener la mayoría absoluta para ser electores, es decir, la mitad más uno; en caso de que no sea así, deberán participar para el segundo turno los candidatos primero y segundo eliminándose los otros que hayan obtenido menos votos en el primer turno.

El sistema de elección por mayoría puede ser directo o indirecto. El primero consiste en un procedimiento mediante el cual los ciudadanos son los lectores de forma inmediata, sin que existan intermediarios entre los electores y los elegibles o elegidos . La elección indirecta consiste en que los electores delegan su derecho electoral a otros, quienes lo ejercen en nombre de los ciudadanos (colegios electorales).

El sistema de mayoría tiene las ventajas que se mencionan a continuación:

a) sencillez y claridad, puesto que es más accesible de captar por el electorado: por ello, permite un mayor y mejor conocimiento de las alternativas que se ofrecen al lector.

b) favorece mayor identidad y comunicación entre le representante y el representado, especialmente en escrutinio uninominal y en circunscripciones pequeñas.

c) impide que la elección sea determinada en gran medida por los diligentes de los partidos, quienes deciden que candidatos aparecerán en las listas de las circunscripciones plurinominales.

d) tiende a definir e integrar una mayoría, lo cual implica que haya mayor eficacia en la manifestación de una voluntad política unificada y efectiva.

e) permite que haya mayor estabilidad en el gobierno, ya que la mayoría, se ve amenazada por minorías obstructoras o por coaliciones inestables, que pueden conducir a una persona parálisis política.

El sistema de mayoría tiene los inconvenientes que siguen:

a) impide la representación adecuada de todas las corrientes relevantes que se manifiestan en una nación.

b) limita la canalización de elección de fuerzas políticas relevantes a través de instancias institucionales.

4.2 Sistemas de representación proporcional.

El sistema de representación proporcional obedece a la necesidad de dar una representación más adecuada a todas las corrientes políticas relevantes que se manifiestan en la sociedad, así como para garantizar de manera más efectiva el derecho de participación política de la minoría y para evitar los efectos de la distorsión de la voluntad popular.

La primera concepción explicita más aceptada de representación proporcional se debe a Víctor Considerant (1808-1893), quien afirmara que una asamblea solo podrá representar fielmente al electorado si en su seno se encuentran representadas, en forma proporcional, todas las corrientes políticas relevantes que se producen en el mismo electorado.

En cuanto al sistema de representación proporcional solo puede empleado para la integración de cuerpo colegiados como las cámaras legislativas. Este sistema tiene como objeto fundamental atribuir a cada partido el número de cargos de elección popular que resulte proporcional o los votos obtenidos en la contienda electoral; así las curules o escaños se reparten entre las listas de candidatos que participan en el proceso electoral en proporción al número de votos obtenidos por cada uno de ellas.

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