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El rol de los recursos didácticos en el proceso de enseñanza-aprendizaje

VielmaSosa16 de Abril de 2014

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UNIVERSIDAD NACIONAL ABIERTA

VICERRECTORADO ACADEMICO

UNIDAD EVALUACION ACADEMICO

ÁREA EDUCACIÓN

CARRERA LICENCIATURA EDUCACIÓN INTEGRAL

UNIDAD DE APOYO: SANTA BÁRBARA DEL ZULIA

TRABAJO PRÁCTICO: OBJETIVO A EVALUAR Nº 10: “diseñar, para un grado de la primera o segunda etapas de la Educación Básica, actividades didácticas que fomenten la competencia comunicativa de los niños y jóvenes”

ASIGNATURA: Enseñanza de la Lengua

CÓDIGO DE LA ASIGNATURA: 491

CARRERA: 440

Fecha de Entrega: 11-12-2010

NOMBRE DEL ESTUDIANTE: Andreina Vielma Sosa

Cedula de identidad: 15.920.656

UNIDAD DE APOYO: Santa Bárbara del Zulia

Firma del Estudiante: ____________________________

E-mail: www.osmarandreina@hotmail.com

Número de teléfono móvil: 0426-873.17.84.

LAPSO 2010-2.

ÍNDICE DE ACTIVIDADES DIDACTICAS

Contenido

PÁG.

Motivación inicial.

10

Expresión oral.

11

Comprensión de la lectura.

12

Atención al vocabulario y la ortografía.

13

Producción escrita

14

Aspecto gramatical tratado

17

ANEXOS

18

INTRODUCCIÓN

Los recursos didácticos sirven de apoyo para aumentar la efectividad del trabajo del profesor, sin llegar a sustituir su función educativa y humana, así como racionalizar la carga de trabajo de los estudiantes y el tiempo necesario para su formación científica, y para elevar la motivación hacia la enseñanza y el aprendizaje. Los medios reducen el tiempo dedicado al aprendizaje porque objetivan la enseñanza y activan las funciones intelectuales para la adquisición del conocimiento, además, garantizan la asimilación de lo esencial .Es importante destacar que los medios de enseñanza se encuentran estrechamente vinculados a los métodos para posibilitar el logro de los objetivos planteados.

Estas estrategias van dirigidas hacia el aprendizaje cognoscitivo, al aprendizaje afectivo, desarrollar la creatividad, permitir el enriquecimiento de la imaginación, propiciar el goce por lo estético y lo lúdico, fortalecer la integración social del niño y el enriquecimiento lingüístico y gramatical los cuales deben estar presentes en toda enseñanza.

MARCO TEÓRICO

La comunicación es una actividad social que exige intercambio de información entre individuos de un mismo grupo o grupos distintos. En todo proceso comunicacional deben haber por lo menos tres elementos: fuente o emisor, mensaje y destinatario o receptor.

En todo proceso comunicacional intervienen ciertas variables que lo caracterizan y determinan condicionando sus efectos y sus resultados. Como por ejemplo:

• Para que haya comunicación debe existir una información que se quiera transmitir; esta información es necesaria formularla como mensaje, es decir conceptualizarla y hacerla coherente.

• No se puede transmitir un mensaje si éste no ha sido ordenado en función de: la relación existente entre emisor y receptor, es decir, que es necesario que tanto el emisor como el receptor dominen el mismo lenguaje; las condiciones socioculturales a las cuales pertenece el emisor y receptor; la afectividad del emisor.

• Si no hay objetivos o fines para que se de la comunicación, ésta no tiene sentido, es decir, la comunicación debe intentar un cambio en el comportamiento de una persona (intencionalidad.

Basándose en lo antes expuesto es que se puede decir que el proceso de enseñanza – aprendizaje es un proceso comunicacional, es decir, en él existe un emisor (docente, un mensaje (información codificada en el mismo lenguaje del estudiante y un receptor (alumno o educando) y este proceso no tiene sentido si no existe la intención del cambio de conducta que se espera (intencionalidad).

En todo proceso de enseñanza aprendizaje, para que la comunicación sea eficaz se necesita de la actividad del receptor que reacciona contestando, preguntando o actuando mental o físicamente. Hay una respuesta del emisor al receptor o fuente que completa el proceso de enseñanza – aprendizaje. Esta respuesta es la que se denomina retroalimentación.

Existe otro elemento adicional que se da en el proceso de enseñanza – aprendizaje que es el ruido, entendiéndose por este a toda perturbación que infiere o causa distorsión en la transmisión del mensaje, este puede ser ocasionado no solamente por el uso de vocablos no comprensibles para el receptor, sino también por el cansancio, distracción, disconformidad física, entre otros.

En el proceso de enseñanza - aprendizaje se pueden distinguir dos tipos de comunicación: la comunicación unidireccional y la comunicación bidireccional.

La comunicación unidireccional es aquella en donde la fuente y el destinatario permanecen siempre como tales, los mensajes circulan en una sola dirección, es el caso cuando se utiliza la clase expositiva, un programa de televisión, el periódico, el radio, un libro. En este caso podemos decir que la retroalimentación se da en la actuación mental o física, como por ejemplo mover la cabeza, anotar una idea, entre otras.

La comunicación bidireccional es aquella en la que el emisor y el receptor intercambian alternativamente sus papeles, la respuesta tiene tanta importancia cualitativa como la emisión, hay una participación más o menos equivalente entre el emisor y el receptor. Es aquella que se produce cuando se utiliza, el torbellino de ideas, Phillips 66, estudios individualizados que requieran interactuar con el material. En este tipo de comunicación la retroalimentación viene dada por respuestas, preguntas, observaciones, comentarios.

La comunicación es un acto muy complejo donde participante manera consciente e inconsciente manifestaciones diversas. No sólo se dice o se interpretan cosas con las palabras que pronunciamos u oímos, es decir, mediante la lengua que hablamos y escribimos, sino que el silencio que guardamos en un determinado momento o el tono de voz o entonación que usemos puede aportar significados más allá de la palabra.

Se hará énfasis en lo que es la comunicación oral y escrita ligada a esto al aspecto gramatical (la oración, el párrafo y los elementos que la conforman).

Cuando empleamos la lectura en voz alta se habla de aquella comunicación oral. En la enseñanza – aprendizaje encontramos muchas y variadas lecturas siendo un medio para lograr algo: para saber más, para ser mejores personas para conseguir un cierto placer, para la realización de una tarea o acción.

La lengua oral no sólo ha sido fundamental para satisfacer necesidades que tenemos los seres humanos de comunicarnos con los demás en todas las actividades de la cotidianidad, sino que también permite expresar nuestro mundo interior, los sentimientos y emociones, y para ello se utilizan las palabras con un valor estético, artístico y lúdico.

Cuando se produce un texto se hace en función de un oyente o de un lector, es decir, de un destinatario específico. Nos interesa su comprensión. ¿Cómo lograrla? Indudablemente, tenemos que construir un texto en el que se apliquen los principios que aseguran un significado claro del tema que se desarrolla y un manejo preciso de los recursos lingüísticos relacionados con lo que se denomina la coherencia y la cohesión.

Uno de los objetivos más valorados y perseguidos dentro de la educación, a través de las épocas, es el de enseñar a los alumnos a que se vuelvan aprendices autónomos, independientes y autorregulados, capaces de aprender a aprender.

Aprender a aprender implica la capacidad de reflexionar en la forma en que se aprende y actuar en consecuencia, autorregulando el propio proceso de aprendizaje mediante el uso de actividades flexibles y apropiadas que se transfieren y adaptan a nuevas situaciones.

Estas actividades deben ir dirigidas a la preparación y motivación al estudiante en relación a qué y cómo va a aprender, apoyando los contenidos curriculares durante todo el proceso de enseñanza y que permitan al alumno formar una visión sintética, integradora e incluso crítica del material con el que ha trabajado incluso donde valore su propio aprendizaje.

Las estrategias para cultivar la expresión oral correcta y la comunicación escrita, deben ser creaciones espontáneas y motivantes para los alumnos si se desarrollan en una atmósfera rica en estímulos, que conduzcan al educando a intercambiar ideas u opiniones., ellas deben estar propuestas al diálogo entre los alumnos, a la prestación de atención a sus ideas, a través de ellas es posible desarrollar una buena expresión en los educandos.

Como sabemos, el alumno necesita orientación para aprender y practicar los elementos de la expresión oral correcta. En este sentido, los docentes debemos estructurar situaciones naturales, animarlos a que éstos hablen y a escuchar creando conversaciones entre ellos, los niños deben representar roles, escenificar juegos, interpretar

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