Importancia Del Diagnostico

Teresa Rossell (1988) considera el diagnostico como un elemento característico de los profesionales que tienen la capacidad de determinar el tipo de intervención más adecuado para modificar las situaciones en las que intervienen. Siempre se basa en la recogida de datos.

Para G. Hamilton (1974) el diagnostico será el estudio del medio ambiente del sujeto, de su situación cultural, social, pautas de adaptación, patologías asociadas, actitudes, en relación al problema específico y a la solicitud expresada.

Partiremos de estas definiciones para llegar a determinar la importancia del diagnóstico en el abordaje de la realidad en el contexto social.

Podríamos decir entonces que el principio fundamental del diagnóstico social es el conocer para actuar, que tiene una diferencia marcada con el conocer por conocer, nos permite saber qué pasa con un grupo de individuos o comunidad, conocer su realidad para abordar la solución de sus problemas.

La importancia de realizar un diagnóstico está fundamentada en el hecho de que es necesario conocer en profundidad una situación para actuar con eficacia en su solución, priorizando los problemas según su gravedad y la factibilidad de resolverlos. En este sentido, todo diagnóstico social se convierte en uno de los primeros pasos para la planeación de una solución, buscando a través de él, el conocimiento real y concreto de una situación que se quiere mejorar.

Este proceso no se puede dar de manera aislada sin involucrar a los actores sociales afectados, debe apuntar al direccionamiento de la manifestación y voluntad colectiva para planificar acciones que permitan atacar los problemas territoriales emergentes.

Un buen diagnóstico nos debe proporcionar información precisa sobre la comunidad o área de estudio dejando claro cuáles son los principales problemas que afectan a sus habitantes, qué relación tienen esos problemas con otros expuestos en otros niveles, cuáles son las causas aparentes de esos problemas, qué efecto tienen en la comunidad y en la sociedad en general, además de recoger las posibles soluciones expuestas por parte de los afectados, entes gubernamentales e instituciones relacionadas con este tipo de situación, así mismo debe explorar la capacidad técnica, económica, y humana que existe en la comunidad para asumir la solución de sus problemas.

Para realizar un buen diagnóstico en la comunidad es necesario trabajar de manera sistemática siguiendo una serie de pasos y aplicando los métodos idóneos para la recolección de datos, considerando que cada comunidad tiene sus características particulares. Se recomienda concebir el diagnostico comunitario en dos fases una inicial de exploración y otra más profunda.

La exploración inicial servirá como base para realizar un diagnóstico más detallado, se apoya fundamentalmente en información existente proveniente de las organizaciones comunitarias, además se debe complementar con los distintos saberes de los habitantes del área en estudio. En esta etapa inicial buscamos conocer como mínimo las características de la comunidad, las formas en que se organizan, las actividades económicas de la zona, políticas públicas y otros aspectos de interés.

En una segunda fase se busca profundizar en el diagnóstico para determinar los principales problemas que aquejan a la comunidad haciendo énfasis en las causas que los provocan y las consecuencias de los mismos, en esta parte del diagnóstico es importante mantener la atención y motivación de los interesados

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