Los Glucidos

Los glúcidos son sustancias compuestas de carbono, hidrógeno y oxígeno, de ahí que también sean llamados carbohidratos o hidratos de carbono. Constituyen las reservas energéticas de las células vegetales (almidón) y animales (glucógeno), aunque éstos últimos poseen menos glúcidos. Los vegetales poseen la capacidad de sintetizar gran variedad de glúcidos gracias a la fotosíntesis; los animales los ingieren y, combinándolos con el oxígeno, los descomponen en C0/2 y agua para obtener energía (el proceso, inverso de la fotosíntesis, es la respiración).

Los glúcidos se dividen en tres clases: monosacáridos (solubles en agua, que pueden cristalizarse, como la glucosa y la fructosa), los disacáridos (lactosa, sacarosa, etc.) y los polisacáridos (no cristalizan y no pasan a través de las membranas, como el almidón o la celulosa).

Los glúcidos más importantes son los azúcares, almidón, mucílagos, celulosa, pectina e inulina. (http://www.aula21.net/Nutriweb/glucidos.htm)

Azúcares

Los azúcares son glúcidos simples, dulces y solubles en agua. Los más sencillos de todos (monosacáridos) son la glucosa, como el azúcar de la uva; y la fructosa, presente en el néctar de las flores, la miel, y en frutas maduras junto con la propia glucosa. Otro azúcar menos simple (disacárido) es la sacarosa, muy utilizada para endulzar bebidas y alimentos, de hecho la inmensa mayoría de los azúcares industriales contienen hasta un 98% de sacarosa.


El agracejo es una planta con alto contenido en azúcares

La glucosa y sacarosa sintetizados químicamente de las frutas (por ejemplo el azúcar refinado de mesa), tienen que ser ingeridos por los diabéticos bajo control médico, no obstante, si se consumen directamente los frutos que las contienen son mejor tolerados por el organismo, ya que éste recibe simultáneamente otras sustancias que contiene el alimento, tales como fibra, vitaminas, ácidos orgánicos, etc. Por su parte, la fructosa no supone ningún inconveniente en la alimentación de los diabéticos, ya que no precisa insulina (de la que ellos carecen) para su asimilación.

Algunas plantas medicinales ricas en azúcares son: agracejo, arándano, cereza, frambuesa, grosella, higo, manzana, mora y uva. Medicinalmente, los azúcares tienen un efecto tonificante sobre el organismo, y la glucosa es una importante fuente de energía para las células.

Almidón

El almidón es un glúcido complejo (polisacárido) y el más representativo de todos los glúcidos que producen los vegetales, de hecho constituye la principal reserva carbohidratada de las plantas superiores. El almidón es insoluble en frío en el agua; en caliente se hincha y se convierte en el denominado engrudo. Se utiliza en la industria alimentaria, colas para pegar, acabados de tejidos, aprestos, cosméticos, etc.

Algunas plantas con alto contenido en almidón son: avena, maíz y yuca. Medicinalmente el almidón es emoliente y energético. La acción emoliente aporta una acción suavizante y antiinflamatoria sobre la piel y mucosas. La acción energética se produce durante los procesos digestivos; las enzimas de la digestión rompen el almidón y liberan glucosa, que como ya se dijo en el apartado de azúcares, es una fuente de energía muy importante para las células.

Mucílagos

Los mucílagos son unos derivados de glúcidos gelatinosos con una gran capacidad para retener los líquidos, por ello al hidratarse aumentan de volumen.

Se trata de mezclas amorfas de polisacáridos, que se tornan muy viscosos en agua; con agua fría hinchan y forman geles. Por el contrario, en agua caliente se disuelven formando soluciones coloidales, que igualmente se gelifican al enfriar. Las plantas retienen el agua gracias a estas sustancias.

Medicinalmente tienen una gran importancia, ya que protegen los conductos digestivos y las mucosas ante cualquier agente irritante, sea químico o mecánico, ejemplo de los ácidos digestivos, o los movimientos peristálticos con el bolo alimenticio.

La acción terapéutica de los mucílagos es emoliente, laxante suave, antiinflamatoria y antitúsica; es por tanto útil en las afecciones inflamatorias del aparato digestivo, de la piel (útil contra el dolor en contusiones) y del aparato respiratorio. Además, es muy útil en tratamientos contra la obesidad, ya que la capacidad de los mucílagos para aumentar de volumen produce una sensación de saciedad. Algunas plantas medicinales con alto contenido en mucílagos son: alholva, borraja, lino, llantén, malva, malvavisco, pensamiento, salicaria y tusílago.

Las plantas ricas en mucílagos se emplean en infusiones y decocciones; también como emulsificantes, como los carragenatos extraídos de algas marinas.

Celulosa

La celulosa es un glúcido complejo (polisacárido) formado por largas cadenas de glucosa unidos entre sí por enlaces de glucósidos, y que forman parte de las paredes celulares de los vegetales. Estas paredes no se destruyen al morir el vegetal, y junto con la lignina (que es parte de los tejidos de sostén) constituyen los tallos leñosos de las plantas, o sea, los troncos de los árboles y arbustos. Es el glúcido más abundante en los vegetales.

La celulosa es una sustancia sólida, blanca, amorfa e insoluble en agua éter o alcohol. Es una importante materia prima en la industria del papel; también se utiliza para fabricar la nitrocelulosa (algodón pólvora), el acetato de celulosa (para la frabricación de plásticos como el celofán, celuloides, películas fotográficas...), la seda de rayón (para confeccionar tejidos), etc.

La celulosa no puede ser asimilada por el organismo humano, sí por los rumiantes, pero medicinalmente desarrolla funciones mecánicas muy importantes; cuando es ingerida facilita la progresión intestinal de las heces, evitando así el estreñimiento.

Pectina

La pectina es un glúcido complejo (polisacárido) que forma parte de la pared celular de los vegetales. En la industria alimentaria se utiliza para la fabricación de variados productos que precisan gelatinas. Al mezclar la pectina con azúcares se obtiene una solución estabilizante y gelificante, útil en la elaboración de mermeladas, patés, flanes, etc.


Los frutos del endrino (las endrinas) presentan un alto contenido en pectina

La pectina no puede ser asimilada por el organismo humano, pero medicinalmente tiene gran importancia como emoliente y lubrificante del aparato digestivo (al igual que los mucílagos

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