Sueldo Minimo En Chile

Introducción

Chile es un país de elevadas desigualdades, las que en una parte importante se determinan en el mercado del trabajo. Además, los ingresos de la mayoría de los hogares se definen en ese mer¬cado por lo que sus condiciones de vida están íntimamente li¬gadas a su funcionamiento. Por ello es obvio que las políticas públicas no pueden perder de vista el mercado del trabajo al momento de concentrar esfuerzos para elevar el bienestar de los hogares nacionales, considerando además los bajos niveles de sindicalización y de utilización de la negociación colectiva por parte de los trabajadores y trabajadoras en el país. Una de las políticas que tiene un foco en dicho mercado es el salario míni¬mo. Este instrumento aspira tanto a corregir eventuales distorsio¬nes en el mercado del trabajo como a elevar las condiciones de vida de los trabajadores menos calificados. Hay acuerdo que en el primer ámbito de aplicación del salario mínimo este no sólo no genera desempleo sino que puede aumentar el empleo y los ingresos de los trabajadores poco calificados. Ello ocurriría, por ejemplo, en presencia de poder monopsónico de los emplea¬dores. En el segundo ámbito, una vez corregidas eventuales dis¬torsiones, hay también acuerdo que, en diversas circunstancias, las alzas del salario mínimo pueden generar desempleo y, por lo tanto, un resultado ambiguo sobre las condiciones de vida de los hogares, sobre todo en aquellos cuyos integrantes son más afectados en sus oportunidades de trabajo por dichas alzas. En estas circunstancias la definición de este salario supone llevar adelante un análisis cuidadoso de la realidad del empleo, de los salarios y de la economía para evitar exacerbar esa tensión.

1. Argumentos para relacionar el aumento del sueldo mínimo con una mayor tasa de desempleo

Uno de los debates más apasionados en los círculos económicos es el del salario mínimo obligatorio. Sus críticos inevitablemente señalan las leyes de la oferta y la demanda y afirman que tan pronto como se aumente el precio del trabajo por encima del equilibrio, se obtiene una escasez de capital humano contratable, lo cual daña a la economía en general al incrementar el desempleo, e individualmente a los obreros al privarlos de trabajos. Arguyen que un trabajo mal pagado es mejor que no tener ninguno, y que, frecuentemente, un trabajo de calidad inferior es un peldaño en el camino a uno mejor pagado en el futuro.

Por otro lado, los que abogan por el sueldo mínimo obligatorio señalan su aspecto humanitario: sin un mínimo en la paga, muchos obreros no serían capaces de adquirir las cosas de primera necesidad con la miseria que recibirían. Los defensores del salario mínimo creen que cuanto mejor estén pagados los trabajadores, tanto mejor estará la economía en general. Ellos, por supuesto, están conscientes de que como hay solo una cantidad limitada de bienes y servicios disponibles en cualquier economía, se necesita algo de redistribución de las riquezas para financiar el salario mínimo.

Cada año en estas fechas comienza el proceso de negociación del salario mínimo, situación que tensiona los ánimos entre los involucrados. Actualmente el salario mino periodo 2011-2012 que es votado en el parlamento corresponde a $182.000.

Desde los gremios de trabajadores encabezado por la C.U.T.

Las autoridades de Gobierno, la Ministra del Trabajo Evelyn Matthey y el Ministro de Economía Pablo Longueira, han expresado que dicho monto es imposible de lograr para un país como Chile. La hipótesis que plantean se argumenta en que un aumento del salario mínimo distinto al que arroje la fórmula: "inflación esperada más productividad", pone en riesgo el empleo y a la economía en general. Según este escenario hipotético, el salario mínimo 2012, debiera ser: $193.000 (3 puntos por inflación y 2 por productividad).

Según las estadísticas del trabajo indican que del total de empleados que estaban en el mercado formal en 2010 un poco más de cinco millones, 745 mil ganaban el mínimo o menos, según la Encuesta de Ingresos del INE. Esto equivale a un 15%, más del doble que en 2001. Ese año, Chile tenía un total de 3,8 millones de trabajadores en el mercado formal, y de ellos, un 7%; es decir, 278 mil ganaban el mínimo o menos.

Datos extraídos de la encuesta de empleo del INE explican que el aumento del empleo con ingresos mínimos se debe al sistema de externalizacion de la mano de obra, en la práctica esta modalidad contractual suele pagar sueldos mínimos y en consecuencia ocurre una alta rotación.

De los 498 mil trabajos formales que se crearon durante los últimos 25 meses, el 72% corresponde a este tipo de empleo. En el caso de las mujeres, la proporción sube a un 94%.

Según datos de la Superintendencia de Pensiones en 2011 las personas que ganaron el mínimo fueron 907.449.

Con estos argumentos mi hipótesis es que el salario mínimo debe ser directamente proporcional al PIB anual mas tasa de inflación.

Como este escenario no ha ocurrido se explica la actual situación en que trabajadores que ganan el mínimo o menos pasan de 7% a 15% en diez años. En mi argumentación considero la incorporación al mercado del trabajo de gente que estaba inactiva o en la informalidad y una situación contractual donde mercado de los medios de producción crea trabajos improductivos y sin derecho a negociación colectiva.

Situación actual del mercado del trabajo.

La propuesta gubernamental para el salario mínimo año 2012 es aumentar el salario mínimo desde los actuales $182 mil mensuales a $193 mil es decir un aumento de $11.000 mensuales, en contraposición representantes del partido Renovación Nacional plantean subirlo a $200 mil, es decir un aumento de $18.000, por otra parte los trabajadores sindicalizados y representados por la Central Unitaria de Trabajadores proponen $250.000=, es decir solicitan un aumento de $68.000=

Escenario laboral para contra argumentar que el aumento del sueldo mínimo no aumenta la tasa de desempleo.

• Las medianas y pequeñas empresas que están en el mercado laboral de externalizacion de servicios son las que están absorbiendo esta masa laboral de ingresos mínimos.

• En las medianas y pequeñas empresas los procesos productivos son intensivos en mano de obra explicada

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