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Trabajo Col 2


Enviado por   •  18 de Noviembre de 2014  •  1.799 Palabras (8 Páginas)  •  197 Visitas

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LA CIENCIA

1. El conocimiento científico.- Aristóteles conserva el mismo concepto de ciencia que los presocráticos y que su maestro, o sea un conocimiento fijo, estable y cierto. Pero la transformación que hace sufrir al concepto platónico de la realidad repercute profundamente en su concepto de la ciencia. Suprime el mundo trascendente de las Ideas de Platón y solamente admite la existencia de sustancias particulares e individuas, distribuidas jerárquicamente en tres grandes planos: I.º, terrestres; 2.º, celestes, y 3.º, divina, que es única, ocupando ella sola el lugar de las Ideas platónicas. Suprime también las nociones de participación y de imitación. Cada sustancia tiene su propio ser, debido tan sólo a las cuatro causas que intervienen en su generación, y que no es ni participación ni imitación de ninguna otra realidad trascendente.

Aristóteles distingue dos órdenes de conocimiento: el sensitivo y el intelectivo. El primero es la fuente de todos nuestros conocimientos y se caracteriza por su particularidad. Es verdadero, pero no científico, porque está sujeto al movimiento y a la mutación de las cosas y porque no distingue lo sustancial de lo accidental. Tampoco constituye ciencia el conocimiento que solamente llega hasta la opinión, porque carece de necesidad, aun cuando pueda ser base de juicios verdaderos. El conocimiento científico requiere fijeza, estabilidad y necesidad de los objetos en los cuales se basa su certeza. Sólo puede llegar a constituir ciencia el conocimiento intelectivo, capaz de producir conceptos universales con los caracteres de fijeza, estabilidad y necesidad.

2. Propiedades del conocimiento científico.- 1.º Es un conocimiento de las esencias de las cosas. La ciencia debe responder a la pregunta ¿qué es? y expresar en sus definiciones las esencias de las cosas. 2.º Es un conocimiento de las cosas por sus causas. No basta saber que una cosa es, sino que hay que saber también qué es y por qué es. 3.º Es un conocimiento necesario. El juicio necesario, propio de la ciencia, consiste en saber que una cosa es así y no puede ser de otra manera. 4.º Es un conocimiento universal. Pero la palabra <universal> no debe entenderse en el sentido abstracto, ni como contrapuesto a particular y concreto, sino como equivalente a fijo, inmutable y necesario.

La ciencia es, pues, un conocimiento universal, es decir, fijo, estable, necesario y cierto de las cosas, que llega hasta sus esencias, las expresa en definiciones y las explica por sus causas.

Ahora bien, ¿cómo se logra un conocimiento semejante? Los presocráticos y Platón habían buscado la necesidad y estabilidad del conocimiento científico en la realidad ontológica de sus objetos. Por esto Heráclito y Platón habían negado la posibilidad de la ciencia respecto de las realidades móviles y contingentes del mundo físico. Estas realidades constituirían objetos de creencia, de opinión o, a lo sumo, de conjetura. En Platón la ciencia solamente se daba respecto de las realidades eternas, necesarias e inmutables del mundo de las Ideas.

Si la necesidad del conocimiento científico dependiera de la de sus objetos materiales, en ese caso sólo podría darse ciencia de objetos ontológicos eternos, necesarios e inmutables. En la Ontología aristotélica, después de suprimir el mundo de las Ideas separadas de Platón, quedan todavía dos planos de seres eternos e inmutables, que son las sustancias celestes y Dios, si bien el conocimiento de Dios entraña problemas que Aristóteles no se planteó, al menos expresamente. Para él la cuestión se refiere principalmente al conocimiento científico de las sustancias sensibles, materiales y mudables del mundo físico. ¿Cómo puede darse un conocimiento científico, es decir, necesario, universal y cierto, versando sobre objetos esencialmente contingentes, inestables y mudables? En algunos pasajes, de contenido indudablemente platónico, parece rechazar esta posibilidad: «Tampoco es posible ni definición ni demostración para las sustancias sensibles particulares, porque tienen una materia de tal naturaleza, que puede ser y no ser, por lo cual todas son corruptibles. Luego si la demostración es de lo necesario, y la definición está dirigida a la ciencia.... es evidente que no habrá de ellas ni definición ni demostración.

No obstante, Aristóteles hace entrar también dentro del campo de la ciencia a las sustancias materiales del mundo sensible, mediante la distinción entre orden lógico y orden ontológico. Las sustancias materiales no son necesarias ontológicamente, pues pueden ser y no ser, y están sujetas al movimiento, a la mutación, a la generación y a la corrupción, Pero, aunque en sí mismas no sean ontológicamente necesarias, sin embargo cabe hallar una necesidad lógica, no absoluta, pero sí suficiente, para poderlas elevar a objetos de ciencia mediante la actividad abstractiva de nuestro entendimiento.

Así, pues, Aristóteles no busca la razón de la necesidad y de la universalidad de las cosas en un mundo de Ideas separadas, como Platón, sino dentro de las cosas mismas. Y siendo éstas contingentes y mudables, tampoco aspira a una necesidad ontológica absoluta, por razón de los objetos en sí mismos, sino a la necesidad lógica, relativa, pero suficiente, basada en nuestro modo de conocerlos, y que es la única posible tratándose de cosas que no son necesarias ontológicamente. Por esto reconoce y proclama insistentemente que no puede exigirse el mismo grado de necesidad, de certeza y exactitud en todas las materias científicas. Por ejemplo, la Física y la Etica no pueden aspirar a la misma certeza que las Matemática.

3. Formación del concepto universal.- La teoría aristotélica del conocimiento se caracteriza por la estrecha colaboración que establece entre la

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