La RIEB

Introducción

La Reforma Integral de la Educación Básica (RIEB) es una iniciativa de transformación del sistema educativo mexicano para garantizar una educación de calidad para todos los estudiantes. Concede gran importancia al desarrollo profesional de los docentes. Al reconocer que los docentes son actores clave en la mejora educativa, la reforma busca mejorar sus habilidades pedagógicas, actualizar sus conocimientos y fomentar una cultura de aprendizaje continuo. Los programas de desarrollo profesional están diseñados para proporcionar a los docentes estrategias y herramientas de enseñanza acordes con el nuevo plan de estudios basado en competencias.

Desarrollo

La RIEB tiene como objetivo capacitar a los docentes para que creen experiencias de aprendizaje significativas para sus estudiantes. Otro de los objetivos centrales de La RIEB es redefinir el currículo. La reforma busca alejarse del enfoque tradicional basado en contenidos y acercarse a un currículo más basado en competencias. Este cambio pretende dejar de transmitir de manera pasiva los conocimientos y alejarse de una cultura de memorización para enfocarse en el aprendizaje activo, el desarrollo de proyectos, la resolución de problemas, el pensamiento crítico y la aplicación práctica de lo aprendido. Al priorizar estas habilidades y competencias, la reforma apunta a preparar mejor a los estudiantes para las demandas de una sociedad global que cambia rápidamente.

Además de la reforma curricular y el desarrollo docente, La RIEB enfatiza la importancia de la evaluación. La reforma exige un sistema de evaluación integral que vaya más allá de las pruebas estandarizadas para evaluar no sólo lo que los estudiantes saben sino también sus habilidades, destrezas y actitudes. El objetivo es proporcionar una visión global del progreso de los estudiantes e identificar áreas de mejora.

La modificación de los planes y programas de estudio ha implicado que, como docente, tenga que adaptarme y conocer nuevos contenidos y enfoques pedagógicos. También he tenido que hacer ajustes significativos en mis prácticas de enseñanza para poder implementar los nuevos currículos, y esto ha requerido de un esfuerzo adicional y la adquisición de nuevas habilidades a través de capacitaciones.

La RIEB ha impulsado la formación continua de los docentes, incentivando mi participación en cursos de actualización y capacitación. Esto ha creado oportunidades para mi desarrollo profesional y también ha generado la necesidad de invertir tiempo y recursos.

La RIEB también ha provocado el aumento de mi carga laboral ya que el implementar nuevos currículos y enfoques pedagógicos ha implicado más trabajo y tiempo para la planificación de clases y la elaboración de materiales educativos.

Como mencionó Rios Reyes (2023), otra repercusión de la RIEB en mi desempeño docente ha sido el cambio en la forma de evaluar a los estudiantes. La evaluación ahora se centra en competencias y habilidades, en lugar de recitar conocimientos memorizados o la solución de un conjunto de preguntas y/o ejercicios que el estudiante resolvía y no tenía sentido alguno para ellos. Esto ha implicado que yo deba desarrollar nuevas estrategias de evaluación y replantear la forma en que enseño, y para poder evaluar de manera más integral y realista las capacidades de mis alumnos ahora les asigno la realización de proyectos como el desarrollo de algún software para automatizar alguna actividad, la elaboración de un producto en base a lo aprendido como simuladores de negocios o una investigación para exponer sus hallazgos en una plenaria.

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