¿Qué puede hacer la educación para prevenir la violencia?

¿QUÉ PUEDE HACER LA EDUCACIÓN PARA PREVENIR LA VIOLENCIA? (Análisis del video).

Rafael Bisquerra menciona que en el siglo XX la educación, se había centrado, exclusivamente, en el desarrollo cognitivo y que esta educación había dado pasos muy grandes, pero en temas emocionales, no les habían enseñado prácticamente nada.

Rafael Bisquerra estudio la carrera de psicología, de pedagogía y cuenta con un doctorado en ciencias de la educación,  y menciona que nunca le explicaron lo que era una emoción.  

Rafael Bisquerra menciona que las emociones son importantes porque en ellas hay lo mejor y lo peor de nuestra vida. Ya que en las emociones están las alegrías, el amor, la compasión, la solidaridad, el equilibrio, la armonía, la paz interior, el sosiego en definitiva la felicidad .Pero en las emociones está también el miedo, la ansiedad, la angustia, el estrés, la depresión, la tristeza, la rabia, la ira, la furia, la cólera, la indignación  la predisposición a la violencia etc.

Rafael Bisquerra comenta que los grandes problemas de la humanidad, en gran medida, tienen un fondo emocional, además un objetivo principales de la educación emocional es la prevención de la violencia, porque una parte muy importante de la violencia que hay en el mundo, que es una gran lacra de la humanidad, se origina en la ira que no somos capaces de regular de forma apropiada. Datos publicados en una investigación sobre restos arqueológicos de hace 10000 año,  donde descubrieron un cementerio, observaron que más del 70% de los cráneos de este cementerio habían sufrido impactos,  lo suficientemente fuertes como para causar lesiones en el cerebro que podrían provocar la muerte. La conclusión es que, como mínimo, de este cementerio, que se puede considerar en gran medida representativo de cada 10 personas, como mínimo 7 morían de muerte violenta hace 10000 años.

Rafael Bisquerra nos da un salto en la historia y pasamos al siglo XV, en este siglo  los datos nos indican que aproximadamente, de cada 10 personas 1 moriría de muerte violenta. Era un paso fantástico, pero si ahora pensásemos que de los 10 que podamos estar más cerca, uno va a morir de muerte violenta nos parecería horroroso, afortunadamente ahora en España el índice es de 0,6 por 100000 algo realmente espectacular, que se ha producido sobre todo en los últimos 70 años, después de la segunda guerra mundial, con los movimientos pacifistas, con la no violencia, la comunicación no violenta y en definitiva con la educación.

Las investigaciones científicas, en los últimos años, han aportado evidencias de cómo una educación emocional, que se pone en práctica con los requisitos necesarios que las investigaciones han puesto de manifiesto, tiene efectos en desarrollar las competencias sociales y emocionales, desarrollar climas emocionales favorables a la convivencia, al aprendizaje, al bienestar, disminuir los índices de ansiedad, estrés, comportamiento de riesgo, violencia, con educación, se pueden lograr efectos importantes, pero todavía nos queda muchísimo por avanzar, pero los datos nos indican que, si nos lo proponemos y lo hacemos bien en el siglo XXI podríamos reducir la violencia casi al mínimo.

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