LIDER COMO ALTERNATIVA DE CAMBIO
masy153028 de Septiembre de 2013
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EL LIDER COMO ALTERNATIVA DE CAMBIO
EN PERSPECTIVA ORGANIZACIONAL
Pedro R. Rueda T
Resumen: El presente ensayo tiene por finalidad reflexionar acerca del liderazgo, en perspectiva organizacional, empresarial, política, social y educativa, con el fin de extenderlo a la consideración de la historia de nuestro país, tomando en cuenta los aportes que el Comportamiento Organizacional como disciplina humanista ha hecho posibles.
El abordaje temático hace énfasis en la praxis educativa y en lo histórico-socio-cultural de la Identidad Nacional; cuya justificación se halla determinada por los caracteres filosóficos, antropológico y axiológicos.
Palabras claves: Liderazgo - Organizacional - Comportamiento - Teoría de los rasgos – Teorías de la contingencia
JUSTIFICACION ORGANIZACIONAL.
El ser humano por naturaleza está llamado a hacerse y a construirse con los demás, su carácter sociable y su capacidad racional y espiritual lo legitiman moral y éticamente a estar pendiente de sí mismo y de sus semejantes ya que su razón existencial se justifica en el devenir persona con otras personas y en el hacerse responsable y señor de su conducta; elevándose a condiciones de finitud a infinitud cósmica, compleja y hasta misteriosa que debe resolver o por lo me nos intentarlo desde su lugar privilegiado dentro del universo filantrópico de su especie.
Esto sin olvidar que la naturaleza ontológica de lo humano se “explica” y tiene fundamento con lo humano y desde lo humano en sintonía dialógica de comprensión, aceptación y entendimiento solidario con todo cuanto le rodea y le es pertinente.
Desde esta premisa, es evidente que las habilidades interpersonales cada vez más adquieren - relevancia y significación, en el conocimiento del comportamiento humano, mucho más allá de los aportes psicológicos y sociológicos como limitados saberes frente al objeto (humano—persona, grupo, sociedad, .,.), infinito e ilimitado en su constitución como entidad que traspasa el paradigma de lo racional.
En el presente ensayo se le dará privilegio semántico a la expresión Comportamiento Organizacional (C.O), tomada del autor Robbins Stephen (1.995), cuyo texto se intitula con esa misma expresión, haciéndose obligante su referencia a todo lo largo del presente contenido.
Este autor define el C.O, como «campo de estudio que investiga el impacto de los individuos, grupos, estructuras (e instituciones...) (1), sobre el comportamiento dentro de las organizaciones (públicas y privadas), con el propósito de aplicar los
conocimientos adquiridos en la eficacia de una organización» (p. 10), que en definitiva viene a ser la mejora de cada uno de sus miembros y por ende de la sociedad.
Debe quedar claro que el comportamiento organizacional es hoy una disciplina abierta que por su objeto de estudio y fundamentación teórica-práctica es un saber hermenéutico. Esto significa que el liderazgo razón de nuestro análisis se asumirá como parte dinámica y estructural de los grupos humanos, que hacen vida en sociedad en forma organizada o tendientes a organizarse. Es así como el C.O, en su fundamentación antropológica, aplica los conocimientos obtenidos acerca de las personas-individuos-grupos, multidisciplinariamente, y el efecto de las estructuras sobre el comportamiento a fin de que las organizaciones puedan trabajar con mayor eficacia en la prosecución de mejoras con énfasis en lo común o colectivo.
Siguiendo al autor ya citado, sea firma que el C.O, «se ocupa del estudio de lo que la gente hace en una organización y la forma en que ese comportamiento afecta el desempeño de la misma» (p. 10).
Debe advertirse que existe un acuerdo cada vez mayor, entre los entendidos de esta disciplina sobre sus componentes o tópicos que constituye el área que es el tema del C.O. Aún cuando todavía existe un debate pertinente a la importancia relativa de cada uno, parece que hay un acuerdo general en que el C.O, incluye tópicos centrales de motivación, comportamiento y poder del líder, comunicación interpersonal, estructura y proceso de grupo, aprendizaje, (educación, ética y cultura), desarrollo y percepción de actitudes, procesos de cambio, conflictos, diseños de trabajo y tensión en la administración y supervisión de las áreas a trabajar entre otras, sin perder de vista el sentido axiológico (Teoría de los Valores), de las acciones presentes, en cada una de ellas.
El trabajo aquí asumido en una primera fase desarrollará en líneas generales lo pertinente al comportamiento y razón del líder y su entorno, circunscrito en el ámbito organizacional haciéndose al final una propuesta en la misma línea de ensayo- investigativo acerca del liderazgo y sus tipos en el ámbito nacional con sus diversas implicaciones de orden histórico-social, ontológico, axiológico y psicológico (...), circunscrito en la cultura e identidad del venezolano.
Es por ello que una reflexión o intento de investigación que no tome en cuenta el entorno donde ella se realiza no deja de ser más que una huida de la realidad y una distorsión del compromiso ético que se tiene consigo mismo y por ende con lo humano.
EL ESTUDIO DEL OTRO.
Sin ser psicólogos, ni psicoanalistas ni filósofos profesionales (...), cada ser humano es un estudioso o investigador del comportamiento propio, ajeno y colectivo. Desde la antigüedad y desde los primeros años de vida, la persona se ha ocupado en sentido intencional a observar las acciones de los otros y ha intentado interpretar lo que ve y oye. ¿Ha pensado Ud. ampliamente en esto?, ¿Ud., ha estado «estudiando» a las personas durante casi toda su vida? Seguramente Ud., lo observa lo que otros observan y hacen, y, trata de explicarse, en sentido lógico y irracional del por qué se han comprometido con esa determinada conducta... Pues bien, ¿qué motivaciones o razones lo han hecho posible?, ¿acaso se es feliz o infeliz al actuar así?
Recuérdese que el ser humano por su dignidad es lo más apreciable y sagrado en el seno del cosmos y señor de la tierra, por lo que su naturaleza ontológica invita al
respeto y a la valorización de sus condiciones y facultades de las cuales formamos parte, sin que por ello no dejen de advertirse, corregirse y superarse conductas que atentan contra la misma integridad física-espiritual y moral de la especie humana. Desde esta perspectiva es factible que Ud. haya desarrollado algunas generalizaciones encontradas como útiles para explicar y predecir lo que hace y hará la gente semejante a Ud., desde su mundanal existencia. Pero vale la pregunta: ¿Cómo llegó a estas generalizaciones...?
Indudablemente lo hizo mediante las acciones de observar, intuir, preguntar, escuchar, leer e interpretar; es decir, su conocimiento viene directamente de su experiencia personal; como singularidad en cuestión consigo misma, con el ambiente, desde la personal herencia histórica, o por vía indirecta, es decir por experiencias de otros que también son tan “válidas” como las propias.
¿Hasta qué punto son correctas y válidas las generalizaciones que se hacen...?. Algunas pueden representar evaluaciones muy complejas del comporta miento y destino de lo humano pero también pueden ser muy eficaces para explicar y predecir el comportamiento de otros. Sin embargo, son muchísimos los humanos que tienen un alto número de creencias que frecuentemente no logran dar razón del por qué las personas hacen lo que hacen, viven como viven y comunican lo que sienten.
Debe advertirse que los enfoques informales o de sentido común que pretenden constituirse en «leyes o conocimientos ciertos» sobre la personalidad de los otros son generalmente inadecuados y ganan más espacio y adictos que los enfoques rigurosamente vivenciales, padecidos, reflexivos y sistemáticos; por lo menos en el contexto Latinoamericano y más específicamente en Venezuela.
Hay evidencias que una concepción (o enfoque) sistémica(co), revela hechos y relaciones importantes y que proporciona una base que permite predicciones más seguras de lo humano. Por tal motivo, realizar un estudio serio del liderazgo desde nuestro contexto no es nada fácil, más aún cuando la identidad nacional y lo que queda de la cultura «criolla» con sabor a pueblo no está del todo definida.
Según Rueda (1.997),
“Las diversas antropología culturales concuerdan que la identidad es una de las preocupaciones más sentida del ser humano (hombre persona), de la(s) cultura(s), como el resto de instituciones que en ella se agrupan” (p.68). Continúa afirmando el autor: “Como nuestra razón investigativa se orienta en función del venezolano, con el fin de develar parte de sus raíces ontológicas, históricas-culturales y educativas, cabe preguntarse: ¿Cuáles son las características pertinentes capaces de definir al hombre venezolano? Históricamente, ¿cómo se ha gestado y se ha hecho posible ese ser que vive en cada uno de nosotros como identidad personal? ¿Acaso existe alguna fra se capaz de expresarlo con riqueza conceptual? ¿Se conoce como aproximación científica a las diferentes etnias que han dado como resultado lo que hoy somos?”(p.69).
Con palabras de Rafael Carías (1.983),
“ ...son las características más definidas del venezolano? Y ¿qué raíces profundas en el pasado sostienen estas propiedades? Una antropología cultural del venezolano debe tomar en cuenta los factores dominantes que
subyacen en su modo de ser y componen lo distintivo que lo tipifica y diferencia de otros representantes de áreas culturales afines”(p.2).
No sé si será arriesgado el afirmar, como dice el
...