La Medicina A La Defensiva: Desafío más Allá De La Ciencia.

Resumen:

Si de todas las historias de agresiones, reclamos, querellas por parte de los pacientes hacia los médicos y demás personal asistencial se hiciese un recuento enfrentaríamos una de las conductas predominantes en los servicios de salud, independientemente de su carácter de justas o injustas. Tan complejo se ha vuelto el ejercicio médico que actualmente el profesional de la Salud y más específicamente el médico tiene que actuar de manera defensiva, temiendo siempre una demanda o lo que es mas grave agresiones verbales y hasta físicas por parte del paciente inconforme. Como profesional en el área de la medicina es casi imprescindible incluir en los gastos personales el pago de pólizas, seguros, afiliaciones a cooperativas para cuidar su patrimonio que de por si es bajo teniendo en cuenta que en los últimos 10 años los cambios en los “honorarios” médicos no han recibido ajuste alguno. En este ensayo se pretende dar una opinión general acerca de esta situación incómoda para quienes ejercemos la practica médica y nos convertimos no solo en blanco de criticas por el accionar medico si no en un factible objetivo de lucro por una buena parte de nuestros pacientes que pareciese no buscan la ayuda médica para aliviar o mitigar sus dolencias si no como un objeto de abuso y excesiva exigencia, situación a la que probablemente hace 2 décadas no se enfrentaba el médico quien comparativamente con las demás profesiones es quien pasa la mayor parte de su vida estudiando.

Palabras clave:

Demandas médicas, agresión a personal médico, honorarios médicos

Abstract:

If all the stories of attacks, claims, complaints from patients to physicians and other health care personnel did a recount would face is the predominant behavior health services, regardless of their character just or unjust. Has become so complex medical practice that currently the health professional and more specifically the doctor has to act defensively, always fearing a lawsuit or what is more serious verbal and physical up by the unhappy patient. As a professional in the area of medicine is almost essential expenses include payment of policyholders, insurance affiliations cooperatives to manage your assets which in itself are low considering that in the last 10 years changes in the "fees" doctors have not received any adjustment. This paper aims to give an overall opinion about the current limitations for those who exercise the medical practice and became not only the target of criticism for the actions doctor if not a feasible goal of profit by a good portion of our patients seem do not seek medical help to relieve or mitigate their ailments if not as an object of abuse and excessive demand, a situation that probably 2 decades ago did not face the doctor who comparatively with other professions is the one who spends most of his life studied.

Keywords:

Medical claims, assaulting medical staff, medical fees.

Introducción:

Cuando elegimos estudiar Medicina por convicción, un anhelo personal o simplemente la manera de vivir nunca creemos que al ingresar a la fuerza laboral del país nos vamos a estrellar contra un nefasto sistema de salud que involucionó en los últimos años y que en lugar de fortalecer para el médico un papel protagónico lo viene maltratando, dejándolo como la base del sistema pero también como el actor más pisoteado por las empresas, mercaderes de la salud y ahora también por usuarios o clientes del sistema que creen que adquirir un derecho a la salud significa que el profesional debe estar presto para complacer todas sus deseos aun yendo estos en contra de la indicación médica el adecuado juicio clínico o la conducta adecuada en cada caso particular, teniendo en muchas ocasiones que ceder a solicitar exámenes indicados por el paciente o lo que es más grave a conductas sugeridas por los mimos.

El estado se convirtió en artífice de esta situación cuando al tratar de defender al usuario del sistema ha excedido la influencia en el criterio y la independencia del médico para su accionar, este ya no puede optar por ofrecer el tratamiento más indicado para cualquier paciente por temor o por incurrir en gastos excesivos y que según los dirigentes y cabezas del sistema “desangran a la salud”, nos enfrentamos a un negocio, el de la salud que ha causado que el médico que antes recibía honorarios por su labor se convierta en un empleado más supeditado a un pago no siempre justo y a jornadas laborales extenuantes sin la adecuada remuneración por las mismas. Esta situación lleva al médico a que aparte de tener que estudiar y actualizarse de manera constante para ejercer de manera adecuada su profesión tenga que actuar de manera condicionada, muchas veces con restricciones explicitas en la solicitud de ayudas diagnósticas, interconsultas, insumos, medicamentos, y que su labor se vea truncada por la manera en que funciona el sistema de

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