La segunda Estrella a la Derecha

Ensayo “Segunda Estrella a la Derecha”

En lo personal, me sorprendió lo impactante que me resultó este libro. Al principio, para ser honesto, creí que se trataría del típico libro adolescente que, aunque tocan atinadamente temas sobre esa etapa, termina girando en torno a situaciones más triviales de la adolescencia. Para mi sorpresa, desde el comienzo de la historia me pareció muy honesta la forma como se le da lugar a la voz interna de Leslie, sobre todo en lo que respecta a la relación con su mamá. En varias ocasiones, me identifiqué con ciertos pensamientos que tenía cuando era adolescente respecto a lo angustiante que se puede llegar a ver el comenzar a crecer y a marcar una separación cada vez más clara con las personas con quienes se ha formado tu vida.

Creo que con la situación de Leslie se ilustra muy claramente lo problemático que puede llegar a ser el lograr marcar un límite con nuestros proveedores de “amor”, ya que es en esa edad en donde ponemos en cuestionamiento de una forma más crítica lo que conlleva recibir ese cariño y afecto. Durante la infancia vivimos bajo la idea de que hay alguien que constantemente nos protegerá de lo angustiante que puede llegar a ser la vida sin esperar nada a cambio. Experimentamos lo reconfortante que es tener un vínculo con alguien que puede lidiar con las cosas. Eventualmente, se presenta también la necesidad de actuar por nosotros mismos, de saber que también somos capaces de hacer un impacto ante las circunstancias que nos rodean, pero bajo la seguridad de la mirada de quien nos cuida. Y es justamente en la adolescencia en donde se tiene que poner en práctica esta capacidad de poder imaginarnos como seres completamente autónomos de nuestros padres y vernos más cerca de lo que implica ser un adulto como ellos. En el caso de Leslie, es notable la ambivalencia que vive en cuanto a esto. Por un lado, se ve a si misma cada vez más autónoma en su sentir y su pensar, con mayor libertad de disfrutar y con un deseo cada vez más propio, pero por el otro lado, siente una gran culpa por ello, como si al permitir separarse imaginariamente de su mamá la dejara en deuda con ella y, como lo veo, tiene pagar esa deuda con el alimento que no ingiera.

Así mismo, a lo largo de la historia se puede ver una utilidad que tiene para Leslie la anorexia: aunque sabe que está acercándose a la muerte y sufre de la situación, sigue siendo algo que ella controla. Aunque sepa que el privarse de comida o purgarse de ella es algo riesgo, es ella quien toma la decisión de comer o no. La imagen que Leslie tiene de su madre es de alguien muy demandante y le cuesta trabajo encontrar justificaciones propias por las que busca esa separación con ella, por lo tanto, Leslie debe de ser sumamente estricta con ella misma en cuanto lo que permite que ingrese a ella, tomando en cuenta la simbología de los alimentos con el cuidado y el cariño.

De igual manera, me parece que un tema fundamental que se toca en la vida de Leslie es la manera en como se forma el deseo en ella respecto a su madre. Desde que estamos en estado de gestación, el próximamente humano empieza a ser depositario de distintos deseos, esperanzas, ambiciones e ideales de las personas a su alrededor, especialmente los de su madre. El proceso de instauración de un lenguaje social y simbólico en el niño generalmente se da gracias a la madre o cuidador primario, pero dentro de este cúmulo de información se transmiten mensajes que expresan lo que la madre espera de su bebé. Estos mensajes forman parte de lo que constituye la imagen de uno mismo y, a menos de que identifiquemos y nombremos esos deseos otorgados, generalmente los sentiremos como una carga de culpa. En el caso de Leslie, ella se vivía dentro de su familia como la encargada de satisfacer el constante deseo de felicidad de sus padres y de darle soporte a su imagen de familia; Leslie sentía que debía de

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