Las mejores técnicas para hablar en publico CAP. 1-8

PROLOGO

 El libro Las mejores técnicas para hablar en público de Carlos brassel entra con una muy reflexiva historia, la historia se basa en el siglo IV a.C. cuando el tirano Dionisio I gobernaba en Siracusa, un cortesano llamado Damocles lo criticaba continuamente, seguidamente el tirano Dionisio invita a gobernar por un día a él cortesano Damocles, el con mucho gusto acepta. Cuando llega la noche Damocles fue recibido con un gran banquete y se sentó en la silla de honor, llegando ahí se dio cuenta que la gente no le quitaba la vista, el miro hacia arriba y para su sorpresa una espada colgaba arriba de su cabeza en un fino hilo, la primera reacción de Damocles fue mover la silla, para su mala suerte esta estaba anclada, Damocles obviamente no se quiso sentar ahí por lo que Dionisio I le responde, Gobernar significa algunos privilegios pero también representa obligaciones y peligros, es ahí donde nos quedamos pensando que es cierto. Dionisio sabía que a Damocles no le iba a gustar del todo gobernar por que no solo son los lujos que se ven por el exterior si no la gran responsabilidad que Dionisio llevaba consigo. En una encuesta realizada por el London Times dice que el temor más grande del ser humano es hablar en público y es cierto, todas las personas tenemos ese temas por esa razón estamos empezando a leer este libro ya que las personas que saben cómo expresar con éxito la gente los ve con admiración, reconocimiento, liderazgo, además su autoestima sube, un ascenso es más probable y mejora la relación con los demás, la fórmula para tener una buena presentación es el conocimiento y la aplicación de la técnica y eso el claros brassel dice que es fácil de conseguir. Este libro es la trama de la novela de Juan El Bautista al quien supuestamente aprendió en palestina gracias a un maestro griego de retórica, pero no vallamos a creer que por que esto sucedió en el siglo I el libro no está actualizado, el ultimo capitulo es sobre la tecnología, danones tipos de cono proyectar buenas diapositivas sin estar saturadas de texto. Carlos Brassel lleva 20 años como capacitador en esto, escuchando y evaluando en su trayectoria a más de cuarenta y cinco mil discursos, por eso nos comparte su experiencia con este libro en 15 capítulos.

CAPITULO 1

El encuentro

Este primer capítulo nos da a conocer como Lidias y Juan se conocieron. El sirviente ansiando Lidias le grita cuidado al para que se diera cuenta que una víbora había erguido su cabeza en señal de reto, lastimosamente fue muy tarde ya que el caballo se alzó en dos pata e hizo que el anciano Lidias callera de este, la víbora por su instinto de ataque se fue contra el anciano cuando de pronto la flecha penetro en el centro de la cabeza de esta y se desplomo muestra, el sirviente se había alejado por el temor pero para este momento ya se había acercado a Lidias para sacudir sus vestiduras y ayudarlo. El joven arquero el cual había estado a 10 pasos de ahí le pregunto a Lidias si se había hecho daño por lo que le contesto que no preguntándole su nombre, Juan bar Zacarías dijo este, por su parte el anciano también se presentó como el rector Lidias, agradeciéndole de nuevo por ese tiro perfecto, Lidias le pregunta a Juan que si es griego, este responde de Atenas los dos van para Jerusalén así que en señal de gratitud Lidias invita a juan a ir juntos en el viaje, Juan le comenta a Lidias que él sabe que rector es una profesión muy antigua referente a la oratoria, a lo cual Lidias comenta que los griegos han conferido importancia al pensamiento de la palabra. Lidias le comenta a Juan que el poeta nace y el orador se hace, así que cualquiera puede ser orador con el empeño suficiente, con constancia y dedicación, le comenta que la oratoria es dirigirse a un grupo, pero que él tiene que saber que el mayor temor de los seres humanos es hacer el ridículo.

Para esto juan le pregunta que se puede hacen con los nervios, y Lidas le responde que son compañeros inseparables del orador, le comenta que los nervios son manifestación de vitalidad. Juan no sabe si tiene la capacidad para ser un orador a lo que Lidias responde, No es capacidad solo se necesita el deseo. Si el deseo de Juan es aprender el arte de la oratoria tiene que dar el primer paso, juan desea comunicarse adecuadamente ante los grupos, a lo que Lidias le dijo que el podía enseñarlo, Juan desea aprender oratoria porque es hijo de un importante rabí maestro de la ley de llave y él quiere ayudar a transmitir la palabra de nuestro señor. Lidias le dice esta frase Cuando la causa es noble, los medios para alcanzarla florecen, pero se tiene que tener compromiso serio, honesto, y disciplina, exige asistencia puntual y permanente a una reunión semanal durante 12 semanas, a juan le gustó mucho la idea de que lidias sea su maestro y él sabe que no quiere propagar la mentira, después de esto juan ya se consideraba discípulo de Lidias.

Lección

 Con el conocimiento de la oratoria se logra autoconfianza y se canalizan positivamente las tensiones.

CAPITULO 2

Presentación y posición

 En el capítulo 2 Juan se presentó puntual con el anciano Lidias, su primera lección fue que los antiguos maestros griegos enseñaban caminando, porque la marcha había retardado su sector, de buena manera Juan disfruta la caminata. Lidias le deja muy en claro a juan que estas enseñanzas no son gratis, se pagaran con aplicación y constancia, le deja muy en claro que la cosecha de tu viña depende de lo que sembraste en ella y del sudor con el que la regaste, las oportunidades solo tocan una vez a nuestra puerta, son los cumplimientos y no las promesas los que acreditan a un hombre, lidias deja en claro que confía en juan, para empezar con las lecciones. 1 Concentrar la atención del auditorio en las palabras. 2 La presentación y la postura Tiene que quedar en claro que debes de tener elegancia y sencillez, depende mucho de a quien le vas a dar la plática, la ropa juega un papel muy importante, provoca el primer juicio de las personas hacia ti. Tu peinado, un buen corte de barba o rasurado, dependiendo si usas, siempre es bueno tener un espejo de cobre y contemplar tu imagen momentos antes de presentarte, 3 Hablar de pie Si tienes la oportunidad de elegir, escoge hablar de pie por que una persona de pie entre sentados muestra superioridad, manifiesta respeto. 4 Temblor de piernas Planta firme tus pies en el suelo, estando de pie, empuja ligeramente tus rodillas hacia atrás, trata de mantener el peso del cuerpo en los dos pies no solo en uno, eso muestra desvene, no deben de estar las piernas muy separadas ni muy juntas, 5 Extremidades superiores Ellas son el segundo elemento más valioso después de la voz, pero eso lo veremos en otro capítulo. La postura debe de ser de militar, con los brazos y las manos sueltos, caídos en forma desmayada a los lados del cuerpo. La posición del orador es muy importante iniciando con una postura firma, ya que demuestra autoridad y gana respeto.

Este mundo es de audaces dice Lidias a Juan, las ocasiones las fabricamos nosotros, empieza a practicar con los que conoces, Juan sabe que puede practicar en la fiesta de 80 primaveras de su padre, Lidias le da un truco para poder hacerlo, le dice que uno de sus primos lo debe de presentar, primero que nada, preguntar si alguien más quería hablar, todos dirán que no y en ese momento él le sedera la palabra a juan. Y así la atención será captada por todos hacia juan. En el momento que lo dejan hablar todas las miradas tomaron su atención, Juan estaba en el segundo escalón que estaba en la fuente, atreviéndose a dirigir la palabra a mayor altura que el sumo sacerdote, añas dirigió la palabra a Zacarías, diciéndole que su hijo tenía anhelos de predicador y decidió darle un aplauso. Lección Tener un buen atuendo, buen peinado, claramente acorde al evento con elegancia y sencillez teniendo una posición firme dejando los brazos sueltos a los lados del cuerpo con las manos abiertas, cargando el peso del cuerpo en ambos pies, empujando las rodillas hacia atrás, mostrando seguridad.

CAPITULO 3

El saludo

El capítulo 3 redacta como Lidias le explica a Juan lo que había hecho mal en su presentación, este le dice que tuvo mal el saludo que es uno de las 4 partes que se componen de el saludo, el principio, el desarrollo del tema y un final. Lidias le explica a Juan porque su saludo no fue el adecuado, primero debe iniciarse invariablemente agradeciendo la presentación, segundo nos dirigimos a la persona quien preside el evento o la de más alta jerarquía, primero diciendo su nombre y luego el puesto que ocupa, estamos alabando al de mayor importancia del evento, el que nos permitió la palabra, además, porque el sonido de nuestro nombre en la boca de otra persona es el sonido más grato para nuestros oídos, en las festividades se colocan en la mesa los principales cuyo centro se ubica quien preside, a su derecha el segundo más importante y a su izquierda el tercero así de derecha a izquierda se van ubicando por jerarquía. Solo se debe de presentar al principal y después hacer un saludo general a los demás. Si hay gente en el presídium sobresalientes de la comunidad, si se trata de dos o tres se les saluda en orden jerárquico, teniendo mucho cuidado en la adecuada pronunciación en especial si son personas del extranjero, ya parte final del saludo es el dirigirse al público presente, utilizando un saludo apropiado dependiendo del público al cual nos dirigimos, si es muy general podría ser Damas y Caballeros o distinguidos integrantes de la asociación... y el nombre de esta, si existe familiaridad seria, estimados compañeros, Si tu saludo es débil, estas otorgando una mano flácida, sin ganas, en cambio si tu saludo es entusiasta efusivo y de agrado, otorgas un saludo con mano rígida, debes de poner fuerza en tu voz al saludar y al agradecer a quien te presento, a lo largo de estas enseñanzas aprenderemos a convertir los nervios en tus aliados, todos sabemos que al llegar a la tribuna enfrentamos el momento de mayor tensión, el nerviosismo es energía generada por nuestro cuerpo. Para esto el orador dispone de la voz a través de ella desahogamos esa energía interna, el salido con énfasis que nos permite manifestar efecto por el público sirve también como camino de salida a la tensión nerviosa. El saludo debe de ser en voz alta, con fuerza, que manifieste que se sabe lo que se hace y que tiene uno confianza en sí mismo, para los que todavía estén hablando mientras nos presentan si nosotros tenemos una voz firme al momento de agradecer nuestra voz captara la atención de ellos.

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