NOVELAS EJEMPLARES - RINCONETE Y CORTADILLO

NOVELAS EJEMPLARES

RINCONETE Y CORTADILLO

Un día de verano, por el camino que va de Castilla a Andalucía, dos muchachos de aproximadamente unos 15 años llamados Pedro del Rincón y Diego Cortado, se encuentran. Ambos que visten harapos, se sientan uno frente al otro y dicen su nombre y su profesión, uno tramposo y el otro cortabolsas. Deciden establecer una amistad entre ellos, la cual se inicia desbancando con un juego de naipes a un arriero. Luego son acogidos por unos caminantes que se dirigen a Sevilla y, siendo fiel a su costumbre, Cortado roba la valija de un francés que viaja en el grupo. La venta de los elementos que lleva en la valija les permitirá comprar los instrumentos necesarios de su primer oficio, las esportillas. Después de un paseo rápido por la ciudad de Sevilla, dan comienzo a su oficio y Cortado roba la bolsa a un sacristán. Mientras todo eso sucede, un muchacho llamado Ganchuelo lo ve todo y decide advertir a los dos muchachos de que, para robar en Sevilla, se tenía que pasar por la aduana del señor Monipodio y para ello, Ganchuelo les acompaña hasta allí. Los dos muchachos son presentados ante Monipodio, el cual los examina y acoge en la cofradía, asignándoles los nombres de Rinconete y Cortadillo y librándoles del noviciado reglamentario. Mientras se celebra la inauguración de dos nuevas incorporaciones, un aguacil llega para pedir la bolsa robada al sacristán, a lo que Cortadillo la entrega, por lo que Monipodio le pone el apodo de “el Bueno”. Los dos chicos participan en una cena ofrecida por las mujeres de sus encubridores, Gananciosa y Escalanta; una cena que es interrumpida por la llegada de la ramera Cariharta, una prostituta que expresa sus quejas ante los malos tratos que recibe de su amado Repolido. Monipodio le promete justicia a la chica y Gananciosa y Escalanta se afligen al ver las pruebas de afecto recibidas por Repolido. Éste se presenta y, ofendido por la actitud irónica de los demás rufianes, se dispone a provocar una pelea, pero ahí está Monipodio para imponer la paz entre sus hombres. Finalmente, ellos se dan las manos como amigos y Cariharta aceptará las excusas de su chulo. Después de esto, Monipodio comienza a designar las tareas de los afiliados. Manda leer a Rinconete unas “Memorias de las cuchilladas que se han de dar esta semana” y un “Memorial de agravios comunes”. Distribuye después las necesarias herramientas y luego de dar su bendición a todos, los deja convocados para el domingo siguiente.

TEMA DE LA OBRA:

Las aventuras de dos pícaros típicos de la época de Cervantes.

PERSONAJES:

o Pedro del Rincón (Rinconete): Chico de unos 15 años vestido con montera verde y alpargatas muy gastadas. Es un maestro jugando a las cartas (así se gana la vida). Nació en Fuenfrida, fue desterrado y decidió buscarse la vida por sí mismo.

o Diego Cortado (Cortadillo): también de 15 años, viste sombrero bajo y ancho. Lleva cuchillo y tijeras y se dedica a cortar bolsas y robar lo que hay dentro. Nació cerca de Salamanca (Su padre era sastre y le enseñó el oficio). Decidió irse a conocer mundo.

o Monipodio: hombre de unos 45 años, jefe de la mafia Sevillana. Suministra el trabajo a su gente y los oculta.

o Cariharta: prostituta herida por la paliza de Repolido. /Gananciosa: prostituta que consuela a Cariharta

o Chiquiznaque y Maniferro: bandidos de la cofradía de Monipodio (el segundo debe su nombre a la mano de hierro que tiene).

EL LICENCIADO VIDRIERA

Dos caballeros estudiantes que paseaban por las riberas del rio Tormes encontraron debajo de un árbol a un niño de unos once años llamado Tomás. El chico iba pretendía encontrar en Salamanca un amo a quien servir a cambio de que le diese estudios y los dos estudiantes aceptaron esa propuesta. Pocos días después de estar con ellos se hizo famoso por su buen ingenio, su fidelidad, su buen servir y su notable habilidad, cosa que hizo que se convirtiera en un compañero más. Pasados ocho años los dos caballeros terminaron sus estudios y decidieron volver a su patria, Málaga: pero Tomás solicitó permiso a sus amos para poder volver a Salamanca. Una vez concedido el permiso y puesto en camino, se encuentra con un capitán de infantería de Su Majestad el cual alaba con hipérboles la vida de los soldados y le convence para acompañarlo en su viaje por Flandes y Italia. Cuando éste vuelve de su viaje por Italia, en Salamanca se gradúa en leyes donde despierta amor a una dama que, despechada al no ser correspondida por Tomás debido a su obsesión con los estudios, recurre al poder de una morisca, la cual utiliza un hechizo que produce que el estudiante sufra grandes ataques y una grave enfermedad, la cual hace que crea que es de vidrio y que no deje que nadie se acerque a él, pero pide que la gente le hiciera preguntas, que él podría responderlas todas fácilmente. Se hacía llamar Licenciado Vidriera y pasaba sus días paseando por las calles y burlándose de todo lo que le rodeaba. (las noches de invierno dormí en un pajar y las noches de verano al aire libre). Después de dos años, un religioso consigue curarlo y cambia su nombre a el Licenciado Rueda quien, ahora que ésta en su sano juicio, ya no es escuchado por nadie y por ese motivo decide volverse a Flandes donde muere como soldado.

TEMA DE LA OBRA:

Las transformaciones que sufre un personaje que hasta estando loco es admirado.

PERSONAJES:

o Tomás Rodaja: muchacho que sueña con estudiar y ser famoso para poder honrar a su familia.

o Amos de Tomás Rodaja: dos caballeros estudiantes que recogen al niño al que ofrecen estudios a cambio de su servicio.

o Capitán Valdivia: Soldado que convence a Tomás para visitar Italia y con el que finalmente vuelve el muchacho después de su etapa de locura.

o Dama: enamorada de Tomás que, al ser rechazada por el, intenta conquistarlo con un hechizo que le acaba provocando una enfermedad.

LA ILUSTRE FREGONA:

En burgos vivían dos caballeros: Don Diego de Carriazo, quien tuvo un hijo que lo llamó con su mismo nombre; y Don Juan de Avendaño, el cual llamó a su hijo don Tomás de Avendaño. Cuando Carriazo tuvo 13 años decidió irse de casa de sus padres con intenciones picarescas y al cabo de un tiempo se graduó de maestro en las almadrabas de Zahara. Un verano consiguió setecientos reales ganando a los naipes y los utilizó para vestirse y volver a Burgos a ver a su madre. Su familia le recibió muy feliz y se hizo muy amigo de don Juan de Avendaño. Carriazo le contó a Avendaño todo lo que había vivido a la vez que se lo ocultaba a sus padres. Juntos decidieron irse allí a pasar un verano poniendo de excusa a sus padres que se iban a Salamanca a estudiar. Les dieron documentos de lo que tenían que hacer, les pusieron un ayo a su servicio y se pusieron en marcha. En el camino le robaron al mayordomo y le pidieron permiso para ir a la fuente de Argolas, una vez allí le dijeron que volviera a la ciudad y le dieron una carta de disculpa para que se la entregara a sus padres. Se vistieron como mozos y se fueron dirección a Toledo. A la entrada de Illescas vieron a dos muchachos de mulas andaluces que estaban hablando de una fregona hermosa que vivía en la posada del Sevillano y que el hijo del Corregidor estaba enamorado de ella, la cual descripción despertó la curiosidad a Avendaño. Para apaciguar la intriga de éste, ambos se dirigieron a la posada del Sevillano, donde estuvieron esperando a que esa famosa fregona se mostrara. Avendaño utilizó la excusa de preguntar por unos caballeros y se fue hacia el patio para ver si lograba verla cuando entonces, de pronto, salió de una sala una hermosa muchacha de unos 15 años, vestida como labradora y con una vela. Los muchachos se quedaron esa noche en la posada y Avendaño le explicó a Carriazo la enorme belleza de esa dama. Argüello, otra sirvienta, les preparó las camas. Carriazo le recordó a Avendaño que a la mañana siguiente tenían que madrugar para salir hacia Orgaz y éste le respondió que no quería irse de la posada porque quería conocer a Constanza y al final, logró convencer a Carriazo para quedarse. Al día siguiente Avendaño escuchó un soneto del hijo del Corregidor que iba dirigido a Constanza y eso despertó en él celos.

Avendaño, que se hizo llamar Tomás Pedro, empezó a trabajar para los huéspedes separando la paja y Carriazo, que se hizo llamar Lope Asturiano, empezó a trabajar como aguador. Recién estrenado el oficio, éste tuvo una pelea con otro aguador por que le había derramado el agua. A causa de esto, Lope acabó en la cárcel, pero gracias al dinero que entregó el Sevillano consiguió salir pronto. Al salir, el Asturiano fue a comprar un asno y, finalmente, acabó perdiendo el suyo jugando a las cartas, pero luego, al reclamar la cola del asno, dejo al otro aguador sin un solo maravedí.

Tomás cada día estaba más enamorado de Constanza, a la que llamaban ilustre por su destreza para limpiar plata. Al poco tiempo, Tomás le entrego una carta a Constanza donde le expresaba su amor y ésta la rompió diciéndole que no

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