RAZONES DE LA DESMOTIVACION DEL PROFESORADO

dLic. En educación preescolar

Materia: el sujeto y su formación como docente

Lic. Edgar

Alumna: Jessica mejía Pérez

Grado:1° grupo: “A”

Ciclo escolar 2013-2014

Reporte de lectura detedescoj.c y Emilio t.f.(2002) nuevos tiempos y nuevos docentes conferencian regional. El desempeño de los maestros en américa latina y caribe

Introducción

Con demasiada frecuencia se escuchan conversaciones entre el profesorado que ponen de manifiesto sentimientos de desconcierto e insatisfacción sobre el trabajo en los centros y, lo que es peor, muestran cierta incredulidad ante la posibilidad de que las cosas puedan mejorar. La sensación de estar derrotados paraliza a un se actor importante del personal docente y su deseo es intentar abandonar las aulas cuanto antes. Las instituciones educativas que se precisan en las nuevas sociedades democráticas, regidas por la solidaridad y la justicia social deben ser repensadas. En un mundo abierto donde las verdades hay que construirlas de manera consensuada y razonada, en el que hay que admitir la discrepancia, donde las tecnologías de la información y las comunicaciones no imponen a nadie horarios ni períodos de vacaciones, la vieja escuela se siente como nunca fuera de lugar y sus profesionales es fácil que se perciban como incomprendidos.

RAZONES DE LA DESMOTIVACION DEL PROFESORADO

Icomprension de las finalidades de los sistemas educativos

La parte importante de una poblacion ens la comprension la cual es el sentido de los sistemas educativos de los centros escolares icluso una gran mayoria de los profesores experimenta un notable desconcierto acerca de las finalidades de las etapas educativas de las que se estan trabajando.

Las transformaciones que se estan construyendo contribuyen a caracterizar a las sociedades como inestables se dice que vivimos en una sociedad de riesgo global.

La transmodernidad es un proyecto de racionalidad ampliada donde la razon del otro tiene lugar de una comunidad de comunicación en la que todos los humanos pueden participar como iguales.

Una crisis en la razon de ser en las instituciones debido a la falta de concesos acerca de los fines que prioritariamente deben orientar al trabajo.

por medio de temas de reflexión propios, intenta hallar explicaciones al panorama de queja y desmotivación que existe en torno a la profesión y al quehacer docente,y supone las razones por las que existe este descontento. Como por ejemplo, habla de la compleja situación de inestabilidad mundial y las múltiples crisis sociales que se están dando en conjunto en varios ámbitos de la vida. El modelo tecnológico actual, la globalización y el neoliberalismo son, a su juicio, responsables de esta desmotivación, tema que se va desarrollando a partir del tercer capítulo. De esta manera, sienta algunas bases que nos ayuden a comprender esta crisis, que a su juicio es generalizada, a través de una análisis profundo de las situaciones que aquejan al profesorado recalcand,o algunos puntos importantes como la deficiente formación inicial de los profesores, problema que, señala el autor, conlleva a múltiples factores negativos y desvirtúa la labor docente al punto de que el mismo profesorado sólo desee escapar y dejar el trabajo de aula lo antes posible.

En el tercer capítulo, el autor aborda distintos temas, los cuales ordena bajo dieciséis puntos en los que expone a, modo de juicio y criterio propios, las causas de esta desmotivación docente, para finalmente buscar solución a esta crisis. Para esto, Torres propone un modelo de organización más flexible y abierto, en el que toda la comunidad escolar sea partícipe y al mismo tiempo, sean aprendices y formadores colaborativamente, con el fin de alcanzar una instrucción relevante y acorde con los nuevos tiempos; ytambién tratar de recuperar un optimismo que es completamente relevante para poder hablar de calidad de educación un término que aunque cuestionado por el autor, de existir, sería una motivación para que tanto los profesores como los alumnos consideren la verdadera importancia de la educación, y que puedan concebir de mejor forma, la vida en el aula.

Personalmente, me parece rescatable el hecho de que el autor haya sido capaz de presentar su obra en un lenguaje claro y accesible sin perder la importancia del tema tratado, y demostrándonos a lo largo de su publicación, el notorio conocimiento que manejaba sobre el tema. Sus fuertes críticas hacia la desvalorización de los profesores así como también a la deficiente preparación inicial que poseen es, sin duda para mí, un tema importante de tratar antes de querer hacer cualquier intento por cambiar el sistema educativo. Debemos tener en cuenta que no podernos construir sobre una base inestable, que en este caso sería la preparación inicial. Debemos arreglar primero este problema que acarrea una seguidilla de crisis en materia educativa para poder mejorar. No existirían temores de posibles fallas de los docentes, ni menos serían subestimadas sus capacidades investigativas ni de toma de decisiones, si hubiese certeza de una formación inicial de calidad que conlleve al necesario desafío de la educación permanente y que promueva la organización, eldebate y la investigación continua, para que podamos centrarnos finalmente en la educación como un aprendizaje significativo, y no la simple preocupación por cumplir estándares que solo transforman y desvirtúan la hermosa tarea de enseñar, transformando la educación en objeto de mercado como propone implícitamente el neoliberalismo; lo que finalmente sólo lleva a culpar injustamente al profesorado por la “mala calidad” de la educación, sin darnos cuenta que es el profesorado quien es víctima del mercantilismo al exigírsele y entregársele cantidad más que calidad lo que finalmente se convierte en un círculo vicioso.

Por otra parte a modo de reflexión pienso que el autor pudo ser un poco más consecuente con sus críticas: El libro fue escrito como una reflexión absolutamente personal, y si habla de “la desmotivación del profesorado” y defiende con tanto ademán la democracia, creo que debió demostrar sus dichos a través de la recopilación de la información de parte de los verdaderos protagonistas de aquel descontento, lo cual no ocurrió, y a ratos me pareció, más bien, una desmotivación propia, no generalizada.

Por

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