CURSO BÁSICO DE CONDUCCIÓN POLÍTICA. Filosofía, Doctrina, Conducción Y Proyecto Nacional. De DOCTRINA PERONISTA
Daro927 de Mayo de 2014
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CURSO BÁSICO DE CONDUCCIÓN POLÍTICA. Filosofía, Doctrina, Conducción y Proyecto Nacional.
de DOCTRINA PERONISTA (apuntes de sociología, organización y economía), el sábado, 04 de septiembre de 2010 a las 3:57
PRIMERA ENTREGA:
DE DOCTRINAS Y POLITICAS DE ESTADO.
Se ha generalizado la idea de que en la VIDA POLITICA NACIONAL no debiera tener utilidad, vigencia o admisión, los dogmas, las ideologías y doctrinas, en cuanto pueda significar una especie de freno o barrera inevitable para orientar las "decisiones políticas" que se adoptan en el área del GOBIERNO del ESTADO (nacional, provincial o comunal) que hagan, en esencia, a la POLITICA (cuestiones vinculadas a la economía, legislación, cultura; lo social, educacional, justicia, deportes, etc.).
Parecería que el PRAGMATISMO fundamentaría los modos de acción que se pongan en vigencia en la VIDA POLITICA. Es el único criterio válido para juzgar la decisión política, exenta de toda doctrina científica, moral o religiosa, en la que se debiera fundar en sus efectos prácticos.
Entonces ¿Qué papel pueden y/o deben jugar, en la época que vivimos, las DOCTRINAS POLITICAS en la VIDA POLITICA NACIONAL?
Primero, es importante tener en claro el concepto sobre qué significa o implica una Doctrina Política: "las Doctrinas en la Política constituyen un conjunto de normas y principios que se consideran fundamentales para lograr un bien común y que se fundan en las ideologías existentes y en las costumbres, tradiciones e idiosincrasia del pueblo; juzgan los hechos e indican los caminos a seguir para asegurar la felicidad de los ciudadanos o el poder del Estado". Y al respecto enseñaba el General Perón, "Las Doctrinas son, generalmente, exposiciones sintéticas de grandes líneas de orientación y representan, en sí y en su propia síntesis, solamente el enunciado de innumerables problemas; pero la solución de esos problemas, realizada por el examen analítico de los mismos, no puede formar cuerpo en esa Doctrina sin que constituya toda una teoría en la doctrina misma, así como también de ese análisis surgen las formas de ejecución de esa doctrina y esa teoría".
Podemos aceptar entonces que las doctrinas nos dan ideas básicas fundamentales, propone grandes objetivos, para permitir un eficiente Gobierno del Estado hacia el "bien común".
Y segundo, es oportuno recordar también lo que decíael General Perón: "La Doctrina no es una regla fija para nadie. Es en cambio, una gran orientación con principios; con principios que se cumplen siempre de distinta manera...No se está atado a nada fijo, pero si se tiene la orientación espiritual para resolver en todas las ocasiones dentro de una misma dirección..."Las Doctrinas Políticas no pueden ser eternas, aunque sean eternos los principios que las sustentan...deben ser actualizadas".
IMPORTANCIA DE LA DOCTRINA Y DEL ADOCTRINAMIENTO.
El Justicialismo vive una etapa en que, entre otras cosas, debe REVIVIR, debe reconcientizarse, debe reactivarse, con respecto a cuanto implica la DOCTRINA JUSTICIALISTA y el ADOCTRINAMIENTO. Grande e intensa fue la acción que al respecto realizó el General Perón y, sin ningún temor a error, podemos afirmar que gracias esa acción el Justicialismo es actualmente, a pesar de todo, esa gran Fuerza Política Nacional.
Es por ello oportuno, es necesario, que revivamos algunas de los conceptos que nos legara el General y que nos deben servir de guía, especialmente en esta etapa de la vida política del Justicialismo: "Lo primero que hay que darle a un organismo es su espíritu…Por esa razón, al hacer los planeamientos básicos para la organización definitiva de nuestro partido hemos comenzado por fijar claramente los Principios y la Doctrina, porque ellos representan el alma del movimiento" (Perón, Discurso ante el Congreso Constituyente del Partido Peronista). "Lo importante en las doctrinas es inculcarlas, vale decir, que no es suficiente conocer la Doctrina; lo fundamental es sentirla y lo más importante, amar-la. Es decir, no solamente tener conocimiento. Tampoco es suficiente tener el sentimiento, sino es menester tener una mística que es la verdadera fuerza motriz que impulsa a la realización y al sacrificio para esa realización. Las Doctrinas, sin esas condiciones en quienes las practican no tienen ningún valor". (Conducción Política, pág. 8).
"Nuestra Doctrina puede ser desvirtuada, puede ser destruida y en consecuencia, nuestro Movimiento puede ser disociado y puede ser destruido por mala interpretación de la Doctrina y por la falta de "unidad de Doctrina" que practiquemos los peronistas". (Conducción Política, pág. 10).
"El hombre muere, solo sus ideas pueden quedar. Los peronistas no harían nada con un viejo o con un muerto; con la Doctrina lo harían todo e impulsarían la evolución del país, adecuando la Doctrina al momento Histórico Nacional...La Doctrina ha de estar por sobre los hombres porque los hombres mueren y la Doctrina no”. (Discurso del 25 de Julio de 1949).
Hablando de la necesidad e importancia del ADOCTRINAMIENTO el General Perón nos decía; ampliando conceptos antes vertidos: "Dar esa "unidad de Doctrina” es la base para formar las nuevas agrupaciones, vale decir, para formar agrupaciones conscientes e inteligentes dentro de una orientación unitaria. Eso es lo que la Doctrina persigue, vale decir, encaminar los valores morales de los hombres y su acción intelectual y material en una dirección única. (Conducción Política, pág. 48). "El Adoctrinamiento es la base de toda conducción, porque para saber cómo hay que ir, es necesario, conocer adónde vamos, y, para eso, tenemos que seguir un ideal.." . "...De ahí que los capitalistas hayan dicho a menudo, que el Justicialismo es más peligroso que el comunismo, para ellos sí, porque ellos no saben lo que quieren. Nosotros, en cambio, sabemos adónde vamos y si tuviésemos el mundo en nuestras manos lo haríamos justicialista... sin someterlo a nuestro imperio". (Conducción Política, pág. 212).
Los cuadros peronistas deben ser cubiertos no solamente con hombres que trabajen para nuestro Movimiento, sino que también deben ser predicadores de nuestra Doctrina. Todos los movimientos de acción colectiva si necesitan de realizadores, necesitan también de predicadores..."."...El predicador es el hombre que persuade para que todos hagamos simultáneamente lo que tenemos que hacer". (Conducción Política pág. 10)
Poco podemos agregar a estos elocuentes conceptos ratificados por la realidad de la vida del Justicialismo y si es conveniente, que tengamos presente que la Doctrina, si bien podemos concretarla en realizaciones a través de leyes, decretos y otras directivas ejecutivas, estas siempre pueden ser violadas o eludidas, pero, con seguridad que en la medida que esta sea inculcada, sentida, aceptada sin reservas y con mística, será aplicada, transformada en hechos concretos, respetada y cumplida por cuantos la compartan, ignorando las actitudes evasivas y opositoras. La hora nos impone la obligación de capacitamos para dotar al Justicialismo de "Predicadores" necesarios para llegar a las generaciones que no han vivido a Perón, para que conozcan nuestra verdad y comprueben que interpretamos fielmente los intereses, necesidades, deseos, tradiciones y sentimientos de la inmensa mayoría del pueblo argentino a través de nuestra Doctrina Nacional, humanista, social, popular y profunda-mente cristiana....NO SIGAMOS DERROCHANDO LA HERENCIA QUE NOS LEGARA NUESTRO GRAN CONDUCTOR.
SEGUNDA ENTREGA.
1. CONSIDERACIONES GENERALES.
1.1- La DOCTRINA JUSTICIALISTA representa el alma del Justicialismo por cuanto la misma, en la medida que sea inculcada, conocida, interpretada y fundamentalmente sentida y amada, generada la "MÍSTICA", es decir una verdadera fuerza motriz, imparable, que impulsará a la realización y al sacrificio de cuanto implica el contenido de esa Doctrina, en las distintas áreas del que hacer nacional, provincial y comunal, en post del gran objetivo: la felicidad del pueblo y la grandeza nacional.
1.2- La DOCTRINA JUSTICIALISTA la constituyen un conjunto de principios y definiciones fundamentales que deben orientar y fundamentar indispensablemente todas las medidas (Leyes, decretos, reglamentaciones, directivas, etc.) que se adoptan en los distintos sectores o áreas de los poderes del Estado (nacional, provincial y comunal) y en conducción del Movimiento y el Partido Justicialista.
1.3- El conocimiento y la interpretación de esos principios y definiciones en forma amplia y precisa es una responsabilidad irrenunciable e imperdonable de cuantos asuman responsabilidades en los organismos de conducción partidaria y en los órganos del Estado, por cuanto así se asegura una "unidad de acción" sobre la base de una "unidad de concepción".
1.4- El conocimiento e interpretación de esos principios y definiciones fundamentales o básicos, es una responsabilidad irrenunciable e imperdonable de cuantos forman el Movimiento y el Partido Justicialista, a los efectos de ajustar su conducta a los mismos y además poder desarrollar con eficacia la tarea de "predicadores de la Doctrina" que les implica esa militancia, de manera de poder llevar a toda la ciudadanía el conocimiento de esa Doctrina, a fin de
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