El Favor incumplido de Filoctetes
jairoloolInforme21 de Mayo de 2025
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FICHA DE APLICACIÓN – 07 | ||
Programa de Estudios/Programa | Formación Humanística | Ciclo: 2025-1 |
Experiencia Curricular: | Filosofía y Ética | |
Contenido temático: | Ética y moral | |
Apellidos y nombres de integrantes de equipo: |
Indicaciones:
En equipo de trabajo, completa el cuadro de decisión moral tomando como referente los contenidos propuestos en el siguiente caso. ¿Cuál sería la posición del grupo?
TÍTULO DEL CASO | El Favor incumplido de Filoctetes |
De acuerdo con el caso revisado: ¿Cuál sería el dilema moral? | |
Aquiles y Patroclo, compañeros inseparables desde la infancia, se encontraban en la playa de Troya, contemplando la flota aquea varada. Aquiles, consumido por la ira tras la afrenta de Agamenón, se había retirado de la batalla, negando su valiosa ayuda a sus compatriotas. Patroclo, aunque compartía la lealtad de Aquiles hacia su amigo, sentía una profunda angustia al ver el sufrimiento de los aqueos, acorralados por los troyanos. Un día, Néstor, el anciano y sabio consejero, se acercó a Patroclo con una propuesta desesperada. Filoctetes, un arquero excepcional abandonado en la isla de Lemnos años atrás debido a una herida purulenta, poseía el arco de Heracles, un arma cuyas flechas eran infalibles. Un oráculo había profetizado que Troya no caería sin la ayuda de Filoctetes y su arco. Néstor, consciente de la estrecha relación entre Patroclo y Aquiles, le pidió un favor delicado. "Patroclo, tu palabra tiene peso ante Aquiles," comenzó Néstor con voz grave. "Sabes del sufrimiento de nuestros hombres. Aquiles, en su cólera, nos niega su fuerza. Pero quizás... quizás si le hablaras de Filoctetes, de la profecía, podrías convencerlo de que envíe una delegación a Lemnos. Diles que yo mismo iré, pero necesito su permiso, su influencia para que los demás capitanes lo acepten. Es un acto de compasión hacia nuestros guerreros, un camino para la victoria." Patroclo escuchó con el corazón apesadumbrado. Sabía de la obstinación de Aquiles, de su orgullo herido. Pedirle que intercediera por el bien común, cuando se sentía tan agraviado, era una tarea ardua. Sin embargo, la imagen de los aqueos luchando con desesperación, las noticias de las crecientes bajas, pesaban sobre su conciencia. Se acercó a Aquiles con cautela, exponiéndole la petición de Néstor. Le habló del oráculo, del valor del arco de Heracles, del posible alivio que la llegada de Filoctetes significaría para sus compañeros. Aquiles lo escuchó en silencio, con el rostro sombrío. "Patroclo," respondió finalmente Aquiles con voz fría, "sabes de mi afrenta. ¿Cómo puedo pedir a Agamenón y a los demás que envíen una delegación por alguien a quien abandonaron? Mi orgullo no me permite rebajarme a ese punto. Que sufran las consecuencias de su desprecio. Yo no moveré un dedo." Patroclo insistió con suavidad, apelando a la compasión de Aquiles, a su sentido de la justicia, aunque estuviera nublado por la ira. Le recordó los lazos que los unían a muchos de esos guerreros, la causa común por la que habían llegado a Troya. Aquiles permaneció inflexible. "Mi decisión está tomada," zanjó con firmeza. "No interferiré. Si tanto les preocupa ese arquero, que vayan ellos. Yo no daré mi permiso." Patroclo se sintió atrapado. Por un lado, su lealtad hacia Aquiles era profunda, casi sagrada. No quería contrariar a su amigo, avivar su ira. Por otro lado, la petición de Néstor resonaba con su propio sentido del deber y la piedad hacia los aqueos. Negarles la posible ayuda de Filoctetes, solo por la obstinación de Aquiles, le parecía un acto de egoísmo. Finalmente, con el corazón dividido, Patroclo regresó a Néstor con la amarga noticia del rechazo de Aquiles. Sintió un peso en el alma, la sensación de haber fallado a sus compañeros por no haber podido persuadir a su amigo. Aunque comprendía la herida de Aquiles, lamentaba su inflexibilidad y la posible pérdida de una oportunidad para aliviar el sufrimiento de los aqueos y acelerar la caída de Troya. La decisión de Aquiles, nacida de la ira, había impuesto a Patroclo un doloroso dilema moral entre la lealtad y la compasión. | |
Posturas / Opiniones | |
"Entiendo perfectamente la postura de Aquiles. La afrenta de Agamenón fue grave y pública. ¿Por qué debería rebajarse a pedir favores en nombre de aquellos que lo humillaron? Patroclo, aunque bienintencionado, quizás debió ser más comprensivo con el orgullo herido de su amigo. La lealtad a un compañero como Aquiles debe estar por encima de las peticiones de otros." "Creo que Aquiles actuó con egoísmo. Sí, fue agraviado, pero la causa en Troya era mayor que sus rencillas personales. Patroclo hizo bien en intentarlo. A veces, el orgullo debe dejarse de lado por el bien común. La negativa de Aquiles no solo afectó a los aqueos, sino que también puso en peligro una posible solución a la guerra. Su ira tuvo consecuencias para todos." "Néstor hizo bien en intentarlo a través de Patroclo, dada su cercanía a Aquiles. Sin embargo, era ingenuo esperar que Aquiles, en su estado, accediera fácilmente. Patroclo se encontró en una situación difícil, dividido entre su lealtad y su deber hacia los demás. Quizás no había mucho más que pudiera hacer. La obstinación de Aquiles era un obstáculo demasiado grande." "Siento mucha admiración por la actitud de Patroclo. A pesar de su profunda lealtad hacia Aquiles, su corazón se conmovió ante el sufrimiento de los aqueos. Intentó interceder, mostrando una gran empatía y un sentido del deber que Aquiles parecía haber perdido en su ira. Su dilema refleja la lucha interna entre la lealtad personal y la responsabilidad hacia una comunidad." "La inflexibilidad de Aquiles es su gran defecto. Su ira lo ciega ante las necesidades de sus compañeros y la posibilidad de una victoria más rápida. Patroclo intentó apelar a su lado más humano, pero la venganza parecía consumirlo por completo. Su negativa a ayudar, incluso indirectamente, demuestra una falta de madurez y una priorización de su ego por encima del bienestar de los demás." "Este caso muestra el poder destructivo de la ira. La justa indignación de Aquiles se convirtió en una obstinación que perjudicó a sus propios aliados. Patroclo, actuando desde la razón y la compasión, se vio impotente ante esa fuerza. Es una advertencia sobre cómo las emociones negativas pueden nublar el juicio y llevarnos a tomar decisiones que lamentamos." | |
Argumentos y contraargumentos | |
Argumentos a favor de la postura de Aquiles:
Contraargumentos a la postura de Aquiles:
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Conclusiones | |
El caso ilustra el conflicto entre la ira personal y la responsabilidad colectiva. La justificada indignación de Aquiles ante la afrenta de Agamenón lo lleva a una obstinación perjudicial para el bando aqueo. Patroclo, movido por la compasión y el sentido del deber, se enfrenta a la inflexibilidad de su amigo, exponiendo la tensión entre la lealtad personal y el bien común. La negativa de Aquiles subraya los efectos destructivos de la ira y la importancia de anteponer las necesidades del grupo al orgullo individual, especialmente en situaciones de crisis. Finalmente, el caso plantea interrogantes sobre el liderazgo, la responsabilidad y las consecuencias de las decisiones impulsadas por el resentimiento. | |
Referencias bibliográficas: | |
Homero, Ilíada: Principalmente para comprender el carácter de Aquiles, su ira, su relación con Patroclo y su retiro de la batalla. Los Cantos I y IX son particularmente relevantes para la ofensa de Agamenón y la negativa inicial de Aquiles a volver al combate. Sófocles, Filoctetes: Para conocer la historia de Filoctetes, su arco y la profecía que vincula su presencia con la caída de Troya. Aunque en la obra de Sófocles, Odiseo y Neoptólemo son enviados a buscar a Filoctetes, la idea central del arco infalible es clave. Otras fuentes de la mitología griega (e.g., Apolodoro, Higino): Para detalles adicionales sobre la profecía relacionada con Filoctetes y otros aspectos de la Guerra de Troya. |
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