Virtudes
EBPJOEnsayo4 de Febrero de 2015
5.313 Palabras (22 Páginas)213 Visitas
Virtud
La virtud es la integridad y excelencia moral, poder y fuerza, castidad o pureza. Es también una cualidad que permite a quien la posee, ayudarlo en las situaciones más difíciles para cambiarlas a su favor. El virtuoso es el que está en camino de ser sabio, porque sabe cómo llegar a sus metas sin pisar las de los otros, porque pone a los demás de su lado y los lleva a alcanzar un objetivo diferente. El virtuoso es el que «sabe remar contra la corriente».
También, una persona virtuosa es aquella que sabe sacar adelante cualquier problema que se avecina. Es una persona que tiene muchas cualidades y las pone en práctica a diario. La persona que quiere ser virtuosa lucha por adquirir ese hábito bueno que hace al hombre capaz de cumplir el bien.
Las virtudes se consideran cualidades positivas, y se oponen a los vicios. Las virtudes son las cualidades buenas y sensitivas del ser humano.
Virtudes del ser humano
Platón plantea que el ser humano dispone de tres poderosas herramientas: el intelecto, la voluntad y la emoción. Para cada una de estas existe una virtud: la sabiduría, el valor y el autocontrol. La sabiduría permite identificar las acciones correctas, saber cuándo realizarlas y cómo realizarlas. El valor permite tomar estas acciones a pesar de las amenazas, y defender los ideales propios. El autocontrol permite interactuar con las demás personas y ante las situaciones más adversas cuando se está realizando lo que se debe hacer para lograr los fines propios.
A estas tres virtudes se añade una cuarta, la justicia, que ayuda a poder vivir responsablemente y con seguridad ya que sin seguridad podrías salir de tu casa y ser asaltado (por falta de justicia).
Sócrates nos dice que la virtud nos permitirá resolver las mejores calificaciones y con ella podremos distinguir entre el final, el mal, el bien y lo irrespetuoso. También dice que la virtud se puede alcanzar por medio de la educación fundamentada en nuestra moral y en nuestra vida cotidiana.
Cree en el intelectualismo moral, el cual se basa en la idea de que la sabiduría se basa en la ética. Si alguien es buena persona automáticamente será sabio. El sabio ve el mal de lejos y se aparta. También Sócrates opina que la virtud es aquello que nos ayuda a conseguir el bien mediante razonamientos y la filosofía.
Los estoicos sostenían que la virtud consistía en actuar siempre de acuerdo con la naturaleza, que, para el caso del ser humano, concebido como ser racional, se identifica con actuar siempre de acuerdo con la razón, evitando en todo momento dejarse llevar por los afectos o pasiones, esto es, todo lo irracional que hay en nosotros, que no puede controlarse y por tanto debe evitarse. Los estoicos consideraban que la virtud, como facultad activa, era el bien supremo.
Virtudes con un papel fundamental
Las cuatro virtudes cardinales son:
Templanza (del griego σωφροσύνη, en transliteración sōphrosýnē)
Prudencia (del griego φρόνησις, en transliteración phrónēsis)
Fortaleza (del griego ανδρεία, en transliteración andreía)
Justicia (del griego δικαιοσύνη, en transliteración dikaiosýnē)
Estas virtudes eventualmente fueron incorporadas a distintas religiones.
Aristóteles
Ética Nicomáquea (Ἠθικὰ Νικομάχεια)
Conceptos clave
Ética nicomáquea o Ética a Nicómaco (griego Ἠθικὰ Νικομάχεια,sob transliterado Ethika Nikomacheia; gen.: Ἠθικῶν Νικομαχείων, Ethikōn Nikomacheiōn; latín Ethica Nicomachea) es una obra de Aristóteles escrita en el siglo IV a. C. Se trata de uno de los primeros tratados conservados sobre ética y moral de la filosofía occidental, y sin duda el más completo de la ética aristotélica. Está compuesto por diez libros que se consideran basados en notas sobre sus ponencias magistrales en el Liceo. La obra abarca un análisis de la relación del carácter y la inteligencia con la felicidad. Junto con el mensaje bíblico judeocristiano, constituye uno de los pilares fundamentales sobre los que posteriormente se erigió la ética occidental.
La Ética nicomáquea (conocida también como Ética a Nicómaco) es el primer tratado sistemático sobre la ética. Antes que él, Platón había abordado el tema en diversas obras, como el Protágoras, la República, el Filebo y en otros Diálogos, pero no con una modalidad tan sistemática. Otros filósofos contemporáneos a Aristóteles se mencionan en la presente obra, como por ejemplo Espeusipo y Eudoxio, de quien Aristóteles toma su definición del mal.
Como Platón y Sócrates, Aristóteles sostiene que la virtud lleva a la felicidad y esa es la base de la ética. A diferencia de Platón y Sócrates, Aristóteles enseña que la virtud no viene directamente del conocimiento, sino que requiere el hábito, que la felicidad no es un estado sino una actividad, y que el placer no es la felicidad sino una consecuencia de la virtud. Hay que destacar especialmente que el hombre tiene un fin en sí que proviene de su propia naturaleza racional, y que no es absorbido por los fines del Estado, sino que al contrario «individuo» y «estado», respecto de sus fines, coinciden. Aquí está la clave de lectura de la ética de Aristóteles: la finalidad del acto humano. Todo acto tiene un fin, que es la felicidad, pero se puede buscar este fin en diversas cosas. Aristóteles muestra que el fin ha de ser específico del hombre, y esto es la contemplación, a la cual ayuda la virtud necesariamente, pues la virtud busca el medio que le da la recta razón del individuo. La contemplación es el acto más autoeficiente y estable y para la plena felicidad requiere también el placer.1 Un aspecto que entra en juego y que no se resuelve del todo directamente en el capítulo 7 del libro X es la inmortalidad, a la que Aristóteles alude varias veces en otras partes también.2
El método de Aristóteles también difiere del de Platón, pues define claramente desde el final quiere hacer, propone argumentos en contra, muestra algunas dificultades y luego las resuelve. Es importante recordar que las obras de Aristóteles no eran libros destinados a la publicación sino más bien manuales, apuntes destinados a la enseñanza, o recordatorios para la enseñanza en el Liceo.
Dentro de las obras de Aristóteles, la Ética nicomáquea es de las últimas. Como Platón, había escrito en su juventud muchos diálogos y todos se han perdido. Ciertamente viene después de los tratados de lógica, pues menciona los Analíticos en VI, 3. Asimismo, Sobre el alma muestra un pensamiento menos preciso del alma que la presente obra, por lo que se cree que había sido elaborada con anterioridad. La Política viene después, pues X,9 la prepara directamente, en base VIII-IX, que versan sobre la amistad. Hay otra obra espuria sobre la ética, la Magna Moralia y una obra semejante pero probablemente previa, la Ética eudemia.
Contenidos
Aristóteles empieza su obra definiendo lo esencial de la ética: el bien. Con su habitual método inductivo, hace acopio de las opiniones hasta entonces dichas, que lo relacionan con la felicidad, pues tal cosa es "lo que todos buscan". En un paralelismo con las artes y los conocimientos prácticos, Aristóteles dirá que el bien para el hombre, la felicidad, consiste en el ejercicio de su función como hombre. Así, basándose en las tres disposiciones del alma aristotélica, establece que dicha función tendrá que estar relacionada con el alma racional, en tanto que es la que caracteriza al hombre. Para ello introducirá el concepto de virtud, que será identificado con la costumbre del buen obrar. El estagirita establece que las virtudes han de ser de dos clases: las virtudes llamadas éticas, morales o de carácter; especialmente la justicia, que vienen del alma desiderativa en tanto que esta obedece a la razón; y las virtudes denominadas dianoéticas, intelectuales o racionales, que son las que permiten alcanzar la felicidad y vienen del alma racional misma. Después muestra cómo el placer tiene que ver también con la felicidad, y por lo mismo con la ética. Como el hombre es social, necesita amigos para alcanzar la felicidad completa. Esto le lleva a una descripción final de la felicidad que será la que se alcance por una actividad acorde con la virtud más excelsa.
Libro I: Sobre el bien en general y sobre la felicidad
(Este Libro comprende trece capítulos) Al inicio Aristóteles se pregunta ¿Qué bien es el objeto de todos los fines? Toda actividad apunta hacia un bien, entonces la felicidad debe de ser también un bien. No sólo debe ser un bien, sino el bien al cual todos los demás bienes se dirigen. Se puede buscar este bien en diversas cosas, pero al final la verdad es el único bien delante del cual los demás bienes parecen incompletos.
Si no hay un bien final y alcanzable, entonces es irracional la naturaleza del hombre, que busca por naturaleza un bien. El no tener un bien final que se llama felicidad negaría la naturaleza, llevando al absurdo. Ahora bien, esta felicidad se compone de la vivencia de las virtudes y de una vida completa; la felicidad es una actividad del alma de acuerdo con la virtud ("excelencia") completa.3
El filósofo termina el primer libro hablando de la virtud a partir de las partes del alma, preparando así el segundo libro. Este pasaje es relevante, pues da la estructura para el resto de la obra. Como la virtud está en la parte racional del alma y también en la parte no racional que obedece a la racional, las virtudes se dividen en dos grandes tipos a partir de su fuente: las intelectuales (dianoéticas) y las morales (éticas). Pero
...