El Condominio

EL PARADIGMA DE LA CONSTITUCIÓN

Dentro de esta obra se hace referencia al análisis de un modelo de constitución ejemplar aterrizada sobre una verdadera realidad social, que cubra las necesidades del pueblo y que sobretodo se base en la búsqueda del bienestar de la raza.

En esta investigación, el Magdo. Covarrubias Dueñas establece que el pacto social debe reflejar las necesidades y problemática social, invocando así los sagrados derechos inalienables, de las personas y de los ciudadanos. Y que de cualquier forma, para encontrar los paradigmas en cualquier constitución siempre se deberá seguir el sentido de la nomología aunado a la politeia.

La nomología hace referencia al bienestar General del pueblo o la raza humana y politeia a la mima constitución paradigmática, dentro de un proceso social. Razonando así, queda en el entendido, que la base de la comunidad es la política, y que de ella se derivan todos los demás entornos, como lo son la religión, la económica, la cultura y hasta el mismo derecho; pues en este sentido; nace la suposición de que el hombre se une, vincula y forma parte de un conjunto social para satisfacer sus necesidades.

Por este motivo, es que Covarrubias Dueñas define al hombre como un “animal político” que origina procesos sociales normativos, a través del los cuales pretende proyectar su sentir; anhelando llegar al bienestar común. Y es por esto, que el autor en su obra no acepta, ni concibe de ninguna forma al mundo neoliberal y globalizado; pues asevera que a través de esta forma de poder, gobierno y economía, no se puede lograr un bienestar general, ya que ésta se crea en perjuicio del hombre y no a su favor; por ser totalmente “denigrante para el género humano”; Y donde el rico se hace rico a costa de la pobreza.

CUERPO O ESQUEMA DEL ANALÍSIS

Esta obra, para su mejor estudio, fue capitulada en cuatro partes, dentro de las cuales se va desarrollando el paradigma de la constitución.

La primera parte fue denominada “La comunidad Sociedad” donde se establece que el hombre se agrupa para resolver sus necesidades y es a partir de allí cundo éste, comienza a desarrollar un proceso cultural, creando valores, principios e intereses que se definen por sus costumbres. Y cuyo fin es irse haciendo cada vez más perfecto; hablando política y socialmente; debiendo existir siempre un equilibrio natural

Dentro del subtema aproximaciones conceptuales y problemática; Covarrubias establece que “la costumbre” es el primer paradigma social; destacando que la cultura y las creaciones de las personas son el resultado de un pensamiento social y conciencia colectiva.

También hace una reflexión sobre la interrelación individuo-sociedad como proceso social trascendente.

Dentro del tema la evolución se manifiesta que la costumbre se genera a través de hábitos personales donde se protegen principios comunitarios creados por las necesidades; de ahí su religión; sus clases gobernantes y gobernadas e instituciones.

Siguiendo dicho contexto, México lo define como “patético” por tener una sociedad infantil, por no ser capaz de crear valores y principios comunes arraigados; lo que se supone debería ser parte del Estado; porque no existen formas comunitarias de proteger y preservar lo que es nuestro y conforme a nuestros intereses, es decir, no hemos sido capaces de crear nuestra nomología. Resulta relevante destacar que “Una sociedad se convierte en comunidad, cuando la herencia cultural transformada en valores, principios, intereses y costumbres son armónicos”

La segunda parte de la presente obra denominada Nomología, muestra como segundo problema la configuración de la autoridad y el poder dentro del Estado Moderno; haciendo factible el desenvolvimiento de las comunidades. Suponiendo que la “representación” del país debe proteger y luchar por los intereses de todos.

Los griegos, en especial Platón señalan que la política es la ciencia del mando, por esto, una político es un pastor del rebaño humano, es un tejedor de relaciones humanas que debe buscar la sabiduría en las leyes escritas, las costumbres y de los mismos antepasados.

La Justicia es definida como el valor filosófico máximo, al cual aspira la norma jurídica y de la cual se deberán desprender los valores y el sentir del pueblo; México es un pueblo tolerante, no es de conquista, no aspira a constituirse en un Imperium, no somos depredadores, somos afables, amigables y dadivosos, y curiosamente se menciona el dato que más con los de afuera que con los hermanos.

Así mismo se establece que el mexicano no es trabajador, solidario, responsable, competitivo y capitalista, porque son ajenos, él trabaja para vivir, no vive para trabajar. Y es por esto que en el caso de México, los procesos sociales nomológicos, se han visto interrumpidos por las influencias extranjeras, sobre todo de Europa y EUA, y a los cuales siempre hemos querido copiar, sin ser capaces de formar nuestro propios paradigmas; y es de aquí que la propia Constitución, Instituciones y normas jurídicas en México, son una prueba más de las injerencias de injertos, transculturaciones, clonaciones y demás formas de que se puede copiar o imponer una norma.

La tercera parte que conforma la obra de Covarrubias hace referencia a la nomología – Politeia, y es aquí donde la Constitución Político como norma rectora se convierte en el tercer paradigma social jurídico.

Esto, por la existencia de una mezcla entre el derecho divino y las agrupaciones teocráticas que plasman lo que hoy es un Estado de derecho. La norma del Estado debe responder a una conciencia colectiva derivada de un proceso social, debe reflejar el sentimiento social; pues de igual forma la norma jurídica no pude ser entendida, interpretada o aplicada sin un contexto social. En cuanto al estudio de la “Constitución”, dicha palabra fue creada por la cultura griega, sin embargo es el derecho romano el que marca nuestra constitución.

Tres grandes paradigmas de conducta social y jurídica,

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