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Capitalismo Y Política Comercial


Enviado por   •  8 de Febrero de 2021  •  Ensayos  •  3.391 Palabras (14 Páginas)  •  110 Visitas

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Facultad de Ciencias Sociales

Licenciatura en Economía

Docente: Arlene I Guerrero Ávila

Asignatura: Historia de la Economía General

Tema: Capitalismo Y Política Comercial en la 1° Época Moderna

Alumno: Rodrigo de los Ángeles Chan Chan

Matricula: 66076

Fecha de entrega: 15/12/2020

Introducción

El capitalismo es una fase muy importante en la historia de la humanidad ya que con base a ello en la antigüedad ayudada a las personas de esa época a tener a una buena economía y la cual beneficiar a muchas personas, a tener muchas mejoras en la economía en las industria, trabajos y servicios y que gracias a ello nos ha ayudado, pero crees que ¿es solo una fase? o ¿tuvo una evolución en la historia? En este tema aprenderemos de muchas cosas del capitalismo moderno. En ella se encontrará cual fue la causa que hizo que la sociedad o empresario quisieron mejorar o tener un cambio en la economía. Al igual pese a que es una evolución al capitalismo en que otro aspecto pudo influir, crear, mejorar o tener mejores métodos para facilitar a la economía. También aprenderemos sobre el surgimiento de los bancos y bolsas ya que fue causa del capitalismo moderno y al igual se aprenderá sobre las lo que son los seguros y el mercantilismo y los estados absolutos ya que formaron parte de la evolución del capitalismo, como así se va saber un poco de los fisiócratas lo que pensaba sobre la ley divina y también sobre los monopolio comerciales y por ultimo sabremos sobre de los preparativos para la revolución industrial.

Desarrollo

Capitalismo Y Política Comercial en la 1° Época Moderna

I Comienzos del capitalismo moderno

El capitalismo fue un hecho posible por la creación de fortunas relativamente grandes deseosas de invertirse en los diversos tipos de empresas económicas, junto con la aparición de un nuevo espíritu en la vida económica que se proponía explotar todas las oportunidades para obtener beneficios. La acumulación de capital en grande escala de acuerdo con nuestras ideas hizo su aparición en la primera etapa de la época moderna. Aunque se pueden descubrir indicios de un régimen capitalista en la Babilonia y Siria antiguas, así como en las grandes ciudades del oriente alejandrino y del Imperio Romano, nada de ello es comparable a la situación de Europa en el siglo XVIII. Las ciudades mahometanas de Asia, África y España, así como los centros mercantiles bizantino, lograron aproximarse un poco más al capitalismo moderno. La aparición de una economía monetaria auténtica durante los primeros años de la época moderna contribuyó en los orígenes del capitalismo a promover mayor libertad entre los asociados en la empresa de negocios con la despersonalización de sus relaciones y la autorización consiguiente para que las sociedades se constituyeran sin apenas complicaciones personales, a estimular mayor racionalidad de la vida económica y a crear una estructura orgánica de la sociedad correspondiente. Ha habido considerables diferencias de opinión en cuanto a la procedencia de la riqueza excedente que hizo posible la aparición del capitalismo moderno. Aunque los datos estadísticos merecedores de crédito correspondientes a este período sean escasos, parece lo más probable que las acumulaciones privadas fueron formándose lentamente y de manera principal por la piratería, el corso, el comercio y las rentas urbanas. Los comerciantes que adquirieron su primer excedente por el comercio lo multiplicaron a menudo dedicándose a operaciones financieras en las que los riesgos eran grandes, pero muchas las oportunidades de obtener grandes ganancias. No hay que olvidar, sin embargo, la parte jugada en la formación de ciertas fortunas primitivas y en el incremento de las rentas públicas por las confiscaciones de los bienes de la Iglesia y muy especialmente de los monásticos en muchos países protestantes después del año 1525. La confiscación de las tierras de la iglesia por Carlos Martel contribuyó al desarrollo del feudalismo, y la confiscación de las mismas, 800 años después, por Enrique VIII, al del capitalismo. Constituye el capitalismo la característica económica más sobresaliente de los tiempos modernos y contemporáneos, sirviendo, más que ningún otro elemento, para diferenciar el período que se extiende hasta el año 1500 de la economía que prevaleció en la Antigüedad y en la Edad Media. Ciertas estadísticas compiladas en Inglaterra y Francia ilustran muy bien esta tendencia hacia un notable incremento del capital disponible. La estimación de la riqueza nacional de Inglaterra en el año 1600 llega a 17 000 000 de libras; en 1630, a 28 000 000; en 1660, a 56 000 000; en 1688, a 88 000 000. Igualmente, iluminador es el incrementado de moneda acuñada en Inglaterra durante el mismo período. Aunque las fortunas de esta época eran insignificantes, si se las compara con las de los siglos XIX y XX, excedían con mucho a las conocidas anteriormente en Europa occidental. Desde luego que para caracterizar al moderno capitalismo hay que echar mano de algo más que del volumen de las fortunas. La cantidad de dinero poseído difícilmente podía distinguir a los Fuggers de los Cresos.

II. Aparición de los Sistemas Bancario Moderno

En íntima relación con la génesis del capitalismo moderno y la aparición de nuevas formas de organización comercial está el desenvolvimiento del negocio bancario. Los orígenes del moderno sistema bancario pueden descubrirse en los cambistas judíos y sirios de las ciudades y ferias medievales. Estos, a su vez, no eran otra cosa que retoños del orden económico más complicado de la región oriental del Mediterráneo, donde sus orígenes se pierden en la antigüedad más remota. Entre las funciones más importantes de estos agentes financieros, además del cambio de las múltiples monedas en las ferias y mercados, figuraban la aceptación de depósitos en dinero para su conservación, el traslado de dinero de un lugar a otro y la emisión de letras de cambio. La aceptación de depósitos, particularmente en Inglaterra, llegó a ser una de las funciones reconocidas de los orífices. Una de las razones más importantes de este último desenvolvimiento fue que su uso ocultaba el cobro de intereses y de este modo hacía posible que los prestamistas no se vieran acusados de usura. Como instrumentos comerciales y de crédito, las letras de cambio fueron profusamente usadas en todas las ferias y mercados principales durante la última etapa de la Edad Media. Durante la Edad Media, la repoblación del norte de Europa y el desenvolvimiento de tan variados recursos en muchos lugares aplazó la consolidación del orden nuevo o moderno, al par que el desarrollo de sus enormes posibilidades impedía una estabilización efectiva del viejo. Cuando los bancos se desenvolvieron esto facilitó la aparición de los diversos tipos de instrumentos comerciales, cuyo uso es indispensable para el tráfico moderno, nacional o internacional. Entre ellos figuran los pagarés, los giros, los cheques y las letras de cambio. También fue importante para las operaciones de índole más reciente el desenvolvimiento, originado en Italia, de la contabilidad por partida doble y la aparición de diversos tipos de auxiliares del comercio, tales como auditores, agentes y corredores.  Al igual se desenvolvieron los cheque y el perfeccionamiento de la contabilidad por partida doble son hechos de importancia vital para la futura historia del género humano. Cada vez fue más evidente que ni el dinero contante y sonante ni los instrumentos comerciales originarios podían hacer frente a la totalidad del creciente volumen del tráfico. Empezó, por tanto, a desenvolverse, aunque lentamente, la práctica de pagar con cheques respaldados con depósitos de dinero en determinados bancos. En tiempos normales sólo una pequeña parte de las reservas bancarias son retiradas en dinero.  

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