ENSAYO REVOLUCION FRANCESA

Para poder comprender a cabalidad el tema a abordar es necesario tener claro el concepto principal y de mayor importancia; revolución: la cual se entiende como un cambio profundo y radical de las estructuras sociales, políticas, económicas y/o culturales de una sociedad. Si bien normalmente las revoluciones se caracterizan por ser acontecimientos explosivos que cambian dichas estructuras de formas más o menos rápida y repentina, su periodo de incubación suele ser muy largo, pues la sociedad no cambia de un día para otro, sino que deben estar preparadas para realizar y acoger dichos cambios.

A finales del siglo XVII Francia era la monarquía más poderosa de Europa. Su economía progresaba y tenía una enorme influencia política, diplomática y cultural en el resto del continente, Luis XIV había tenido éxito en poner límite a las ambiciones de la aristocracia y logró un manejo un poco mas racionalizado del gobierno. Sin embargo, la situación se agravó por el mal gobierno de Luis XV (bisnieto de Luis XIV), y que tocó fondo durante el reinado de Luis XVI, gobernante bien intencionado, pero de carácter débil. Durante los periodos de gobierno posterior a Luis XIV la aristocracia monopolizo los altos cargos en la administración y la iglesia. Su presencia freno los proyectos de reformas administrativas y económicas que podrían haber vulnerado sus privilegios, pero que eran necesarios para el comercio y la agricultura.

Con los desordenes que provocaron estas malas administraciones, los parlamentos retornaron al poder que habían perdido durante el gobierno de Luis XIV y se perpetuaron como el medio de expresión de las aspiraciones de la aristocracia, debilitando con ello el poder de la monarquía. La aristocracia se obstinaba en defender sus prerrogativas. La nobleza se había empobrecido, aun cuando una pequeña parte era extremadamente rica. Sin embargos, sus privilegios, tales como el cobro de impuestos o el derecho a ocupar un cargo en la administración, le permitían sobrevivir económicamente “Era natural que los nobles utilizaran su caudal principal, los reconocidos privilegios de clase”.

La burguesía reclamaba una mejor organización de la administración y una política económica que impulsara el progreso del comercio y la industria. Junto con los campesinos aspiraban a una reducción del número de impuestos y una racionalización del sistema fiscal.

Tanto Luis XV como Luis XVI nombraron buenos ministros que contagiados con las ideas de la ilustración, propusieron políticas cuyo objeto era modernizar el estado. Sin embargo la aristocracia se opuso y trabó dichas medidas, despertando la indignación en la burguesía. Un buen ejemplo de ministro lo fue Turgot nombrado por Luis XVI que dirigió una seria de reformas en pro de la modernización estatal, sus propuestas consistían en: explotar más eficazmente la tierra, liberalizar el comercio, mejorar la eficiencia de la administración, poner fin a las trabas e iniquidades sociales que obstaculizan el desarrollo de Francia, una política fiscal más racional e igualitaria, entre otras. Sus medidas se enfrentaron a la tenaz oposición de la aristocracia y Luis XVI erróneamente consintió en apartarlo del gobierno. Su salida demostró que la nobleza nunca permitiría las reformas a las que aspiraba la burguesía.

En 1778 se inicio en Francia una crisis económica que llevo a la miseria a las clases más populares e implico una fuerte recesión para agricultores, comerciantes e industriales “Francia se vio envuelta en la guerra de la independencia americana. La victoria sobre Inglaterra se obtuvo a costa de una bancarrota final, por lo que la revolución norteamericana puede considerarse la causa directa de la francesa” .En 1788 y 1789 la crisis se acentuó, provocando la indigencia del pueblo en las ciudades y en los campos perjudicando al mismo tiempo los intereses de la burguesía, una de las razones por la cual la miseria general se intensificaba era el aumento de la población. “Los problemas financieros de la monarquía iban en aumento. La estructura administrativa y fiscal del reino estaban muy anticuadas y como hemos visto el intento de remediarlo mediante las reformas fracaso”. Las clases populares y medias se unieron en su descontento contra el gobierno y exigieron disposiciones eficientes para dar solución a la crisis.

El malestar general llego a la irritación cuando la corona se declaro en bancarrota, a causa de su participación en la guerra de independencia de Estados Unidos en contra de Gran Bretaña “La guerra norteamericana y su deuda rompieron el espinazo de la monarquía”.

La crisis brindo una oportunidad a la aristocracia y a los parlamentos pero estos con su ambición reinante se negaron a pagar si no le aumentaban sus privilegios. El rey se vio en la obligación de convocar a los estados generales, vale decir, una asamblea en la cual participaba la monarquía, el clero, la nobleza y el tercer estado o estado llano. La reunión despertó una gran expectación. “La revolución empezó como un intento aristocrático de recuperar los mandatos del estado” sin embargo este intento fracaso principalmente por subestimar las intenciones independientes del tercer estado. La burguesía vislumbro la ocasión de realizar una reforma constitucional para remplazar el voto por estamento, los delegados del tercer estado consientes de que su propuesta no tendría acogida, se separaron de los estado generales y convocaron a una asamblea nacional para proponer una nueva constitución.

Las pretensiones de la burguesía amenazaban directamente el poder absoluto del rey, quien opto convenientemente por ponerse del lado de la aristocracia y disolver la asamblea nacional. Sin embargo, esta fue defendida por el pueblo y los campesinos, quienes con la toma de la bastilla el 14 de julio de 1789 que sucedió cuando la burguesía se vio apoyada por un gran sector explotado por la nobleza, los campesinos, que en medio de una agitada multitud revolucionaria formada por hombres y mujeres, saturados de injusticias y de hambre, se dirigen violentamente a la Bastilla, símbolo del régimen absolutista, donde funcionaba como cárcel de los opositores al régimen monárquico la cual toman por la fuerza (7) “ la gente aprovechó para saquear, aprovisionada con armas de diversos regimientos y con la furia del hambre que los aquejaba”. Esta demostración atemorizó a los partidarios del antiguo sistema, y sirvió para inclinar la balanza en favor de los revolucionarios, desplazando así del poder a los nobles y partidarios del absolutismo.

Paralelamente se produjo en las zonas rurales levantamientos de los campesinos contra los señores feudales, lo cuales fueron asesinados, y sus castillos saqueados e incendiados. Con estos hechos dieron inicio a uno de los acontecimientos que recorrió toda Europa y en general

...