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El Amanecer De La Rebelión: Surgimiento Y Trascendencia Del Grupo Popular Guerrillero De Chihuahua. Por: Juan Fernando Reyes Peláez


Enviado por   •  8 de Junio de 2014  •  8.622 Palabras (35 Páginas)  •  364 Visitas

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El amanecer de la rebelión: Surgimiento y trascendencia

del Grupo Popular Guerrillero de Chihuahua

Juan Fernando Reyes Peláez

La experiencia guerrillera en el estado de Chihuahua de 1964 a 1968, y que tiene como uno de sus puntos principales el asalto al cuartel militar de Ciudad Madera, el 23 de septiembre de 1965, es uno de los acontecimientos que más influencia tuvo en México entre grupos de jóvenes revolucionarios activos en la década de los setenta. Cuando el Ejército Zapatista de Liberación Nacional irrumpió con su alzamiento armado en enero de 1994, reconoció como una de sus más profundas raíces a los combatientes de Madera.

Para comprender las razones de la opción armada por parte de un grupo de luchadores sociales, es necesario entender el contexto en el que se desarrollaron.

La situación económica y política del estado de Chihuahua a fines de los años cincuenta y mediados de los sesenta, no estaba muy alejada de lo que pasaba en otras regiones rurales del país: latifundismo, monopolios forestales, caciquismo, extrema pobreza de los campesinos, lento reparto agrario, corrupción, antidemocracia.

En Chihuahua se mantenía el predominio económico y político de la gran propiedad ganadera que encontraba su respaldo en el Amparo Agrario a la "Pequeña Propiedad" que había sido introducido en las reformas al artículo 27 constitucional durante el periodo de gobierno del presidente Miguel Alemán (1946-52), que benefició particularmente a los grandes propietarios de los negocios agrícolas, situación que trajo el acaparamiento de muchos certificados de inafectabilidad por parte de unas pocas familias. Entre 1960 y 1966, 145 familias eran propietarias de 3,700.000 hectáreas; y llegaron a existir incluso propiedades de un más de 100,000 hectáreas que pertenecían a un sólo dueño dedicadas a la ganadería.

En contraste, gran parte de los campesinos chihuahuenses tenían para sembrar sólo cerca de 900,000 hectáreas, cuyos productos representaban la mitad del total de la producción agrícola del estado. La siembra del algodón significaba el 60% del total, cuya comercialización dependía principalmente de las compañías norteamericanas, en particular de la Anderson Clayton.

Además, a principios de la década de los años sesenta, el número de trabajadores industriales había crecido en cerca de 26 mil y los empleados del sector comercio sumaban más de 17 mil; comenzaba también el establecimiento de las primeras maquiladoras en la zona fronteriza del estado, en particular a Ciudad Juárez. Chihuahua que se había conservado como una entidad agrícola y ganadera iniciaba una industrialización incipiente. Esto originó que en el seno de la sociedad chihuahuense se gestaran nuevas tendencias sociales y nuevos actores que buscaron cambios diversos caminos de lucha.

También a principios de 1960, existían más de 4000 solicitudes para la creación de nuevos ejidos o centros de población que no habían encontrado una rápida respuesta por parte de los organismos federales y estatales encargados de los asuntos del campo. El rezago en el reparto agrario era el común denominador en la política del gobierno mexicano.

Como marca Otto Granados Roldán, después de 1940, "El ritmo del reparto agrario descendió notablemente: en los 18 años en que gobernaron el país Ávila Camacho, Alemán y Ruiz Cortines se repartieron apenas poco más de doce millones de hectáreas, beneficiando alrededor de 410 mil ejidatarios; es decir, que en tres sexenios el reparto sólo alcanzó a poco más del 70 por ciento de lo que en un sexenio, el de Cárdenas, se había repartido".1

El inicio de la década de los sesenta marca también la continuación de las luchas campesinas por la tierra en el estado de Chihuahua, luchas dirigidas La Unión General de Obreros y Campesinos de México (UGOCM). La UGOCM, creada el 22 de junio de 1949, en la ciudad de México, se definió desde su nacimiento como un movimiento de izquierda independiente del Estado, su principal líder Jacinto López, dirigió muchas de las principales luchas campesinas de esta organización. En Chihuahua, la UGOCM era dirigida por los líderes campesinos y maestros: Álvaro Ríos, Pablo y Raúl Gómez Ramírez, Salomón y Salvador Gaytán, Ramón Mendoza, Francisco Luján Adame, los Hermanos Rodríguez Ford, Francisco Márquez, Miguel Quiñones y Arturo Gámiz García, entre otros.

La UGOCM, llevó adelante movilizaciones en demanda de tierra y tomas simbólicas de latifundios. En diciembre de 1960 el gobierno del estatal comienza la represión y encarcela a dirigentes de la UGOCM y campesinos ocupantes de tierra son desalojados por la fuerza pública y clausura cuatro escuelas normales rurales y dos internados.

En octubre de 1963, en Dolores de Cebadilla, Municipio de Madera, se organiza el "Primer Encuentro en la Sierra", con delegados de cinco estados, ahí se analizaron los problemas de las regiones y las tácticas de lucha a seguir. A principios de 1964, se extendieron las invasiones de tierras en las que participan campesinos y estudiantes normalistas. El gobierno responde deteniendo más campesinos y estudiantes. Muchos de ellos pasarían a construir la primera guerrilla del México Post-revolucionario y clausuran con su muerte el 23 de septiembre de 1965, un periodo de febril organización campesina y popular.

El profesor y doctor Pablo Gómez Ramírez, militante del PPS y dirigente de la UGOCM en Chihuahua, escribió a principios de 1963 un artículo en el que describe la forma en que se desarrollaba la lucha de los campesinos chihuahuenses y el porque de su lucha contra los caciques y su aliado el gobernador, subraya así: “Nuestro Estado que desde el punto de vista geográfico, carece de tierras aptas para la agricultura en forma extensiva, por falta de cuencas hidrológicas, se ha ido agravando este problema por múltiples causas entre las que debemos citar: El haber secado el Río Bravo, nuestros "buenos vecinos" destruyendo con ello la agricultura del Valle de Juárez y en toda la cuenca del mismo hasta llegar a Ojinaga, el gran acaparamiento que de la tierra han venido haciendo los usureros en todos los sistemas de riego del Estado, en contubernio con las autoridades Agrarias y Colonización”.Pablo Gómez, además, justifica las invasiones: "La miseria en que vive la inmensa mayoría de nuestro pueblo. La insultante diferencia económica de los latifundistas de toda clase nuestra gente humilde...Todo esto es lo que ha empujado a nuestro campesino a realizar LAS INVASIONES EN ALGUNOS DE LOS LATIFUNDIOS QUE EXISTEN, que la burguesía reaccionaria denomina con el nombre de "paracaidistas". 2

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