El gobierno de Frondizi

INTRODUCCIÓN:

El gobierno de Frondizi (1958-1962) estuvo caracterizado por un viraje ideológico inspirado por Rogelio Frigoría, hacia un tipo de desarrollismo menos impulsado desde el estado y mas orientando al desarrollo de la industria pesada y la extracción de petróleo. Promovió las inversiones extranjeras, la ley de educación libre (escuelas y universidades privadas), declaro el estado de sitio y el plan de represión CONINTES, para desmovilizar a la clase obrera.

Adoptó una estrategia de flexibilidad monetaria y fiscal que produjo un aumento de la oferta monetaria y, consecuentemente, ocasionó una crisis inflacionaria, agravada por el déficit de la oferta monetaria y balanza comercial. Legalizó el partido peronista para competir en las elecciones de 1962 para gobernadores provinciales, en las que los peronistas ganaron en cinco distritos.

Es considerado Frondizi por muchos políticos argentinos como el último presidente en implementar un proyecto estratégico de país, y también, en ser el último presidente con ideales industriales y desarrollistas. No logro terminar su mandato presidencial, ya que fue derrocado por un golpe de estado el 29 de marzo de 1962.

La presidencia de Frondizi (1958-1962)

Frondizi nació en Paso de los Libres, Corrientes, en 1908. Cursó sus estudios de derecho y desde su juventud se inclinó hacia la militancia política. Miembro de la unión cívica radical, fue elegido diputado en 1946, cuando era profesor en la universidad de Buenos Aires. Su actividad se vio orientada hacia la preservación de la autonomía del poder legislativo durante el primer gobierno de Juan Domingo Perón, aunque simpatizaba con muchos de los objetivos sociales de este.

Sus posiciones criticas ante la penetración de capital extranjero en Sudamérica hubieron de verse matizadas cuando accedió a la presidencia de la República en 1958, apoyado por los peronistas. Su programa de planificación estatal de la economía, nacionalización de la industria y reforma agraria se vio obstaculizada por la difícil coyuntura económica de la época. Depuesto por el estamento militar en 1962, fue encarcelado y posteriormente liberado y rehabilitado, reanudando su activad publica a la cabeza del movimiento de integración y desarrollo.

En las elecciones presidenciales de 1973, Frondizi apoyo al candidato peronista Héctor Cámpora y se integró en el frente justicialista de liberación (Frejuli).en los años siguientes siguió ejerciendo cierta influencia política, en buena medida a través de sus escritos.[1]

Su comienzo en la política

Frondizi había desarrollado, a través de una larga carrera política, un perfil con claras connotaciones nacionalistas y de izquierda. Su obra petróleo y política (1954), en que condenaba la acción imperialista ligada a ese combustible y promovía la explotación por YPF, era una de las bases de ese prestigio. En el régimen militar no dejo de haber algún intento de no entregarle el poder, con el argumento de que el era una mascara detrás de la cual se escondía el retorno de perón.

La acción de Aramburu finalmente se impuso y se realizó la transferencia del mando.Frondizi tenia, durante la campaña y enseguida después, dos equipos trabajando en el plan del gobierno. El más cercano a el era el que organizaba Frigerio, hombre de empresa que hacia tiempo había abandonado si izquierdismo juvenil y estaba ahora orientado de manera más pragmática, dispuesto a revisar sus enfoques anteriores y conseguir apoyo del capital internacional para la industrialización acelerada del país.[2]

Política sindical

En el campo sindical, Frondizi acelero las elecciones en los gremios y promovió la formación de una CGT unificada. Pero el antagonismo entre los dirigentes peronistas (de una nueva generación, pues los otros estaban inhabilitados) y los “libres”, que se habían posesionado de varias organizaciones durante la revolución libertadora, determinó la ruptura. En un congreso, supuestamente de unificación, quedaron 62 gremios del lado peronista y 32 del otro. Ese fue el origen de que las agrupaciones peronistas reconocieran como su entidad coordinadora, por mucho tiempo, a las “62 organizaciones”, más brevemente “las 62”.

Los antiperonistas, en cambio, formaron un nucleamiento denominado “los 32 gremios democráticos”. Después de unos años, la falta de apoyo oficial y de mucha simpatía entre las bases, determinaron el retorno al control peronista de la mayor parte de los sindicatos, incluyendo los baluartes de “los 32”, como los sindicatos de gráficos, municipales, empleados de comercio, la fraternidad y la unión ferroviaria.[3]

Política económica

En la parte económica, los cambios instrumentados por el gobierno de Frondizi respecto a su proyecto, fueron más significativos. Para dar la “batalla del petróleo” se realizaron contratos de perforación con empresas extranjeras, lo que era visto como anatema por el sector nacionalista, interno o externo a la UCRI, pero tuvo que ser aceptado por quienes quedaban en sus filas.

Para evitar la inflación, el gobierno se enfrento a las demandas de incrementos salariales, acompañadas por huelgas, que enseguida proliferaron.la represión de esos movimientos fue el principal componente de la ruptura entre el gobierno y el peronismo, sobre todo su ala sindical, y realimento la resistencia peronista, acompañada de sabotajes y huelgas violentas, aún mas violentamente reprimidas. [4]

Política educativa

En 1958, cuando el gobierno constitucional del Dr. a. Frondizi llevaba solamente meses en el gobierno se suscita nuevamente la polémica por la educación libre o laica, basada en una concepción reformista de la educación sistematica.la batalla liberada entre laicos y libres llego a agitar a los estudiantes y a la población en general.la lucha se centro entre los que defendían la postura de la educación libre, entre los que había tanto confesionales de otros sectores y que pretendían ejercer el derecho de otorgar sus propios títulos habilitantes.

Los “laicos”, sostenían, principalmente, el derecho del estado de monopolizar el otorgamiento de títulos.la enseñanza privada se había admitido en nuestro país hasta ese momento en los niveles primario y medio pero no en la Universidad.Arturo Frondizi había expresado, en 1932 que: “una de las conquistas máximas sancionadas en la ley de educación común, es la laicidad de la escuela…”.

Los estudiantes apelaron a todos los recursos para defender esta postura llamada “laica”, no obstante habían grupos que defendían la denominada “educación libre”, confundiendo quizá el verdadero sentido de libre, ideológicamente, por el de la mal entendida “libertad de las instituciones privadas “para otorgar títulos sin el control del estado.[5]

Aspecto cultural

En el frente cultural,Frondizi intento captar a un grupo de izquierda nucleado alrededor de la revista contorno, que se autodefinía como “denuncialista”,creada hacia unos años, expresaba las actitudes de búsqueda de nuevas orientaciones por parte de los intelectuales que comenzaban a re analizar el peronismo, pero aun mantenían fuertes resistencias hacia ese movimiento.la UCRI,o lo que comenzaba a llamarse “frondizismo,en cambio, les parecía una forma de insertarse en el poder e influir desde ahí para la apertura intelectual de la población hacia proyectos parcialmente socialistas.

Las posiciones, en el área oficial, otorgadas a este grupo, de todos modos no duraron mucho, pues ante la derechización de la política gubernamental decidieron retirarse, y los que persistieron fueron apartados, salvo por supuesto, los conversos al nuevo pragmatismo.[6]

La relación con la iglesia

De la fórmula de la UCRI, Arturo Frondizi-Alejandro Gómez, se impuso en las elecciones de febrero de 1958 por una importante mayoría de votos. Frondizi asumió el 1° de Mayo y a los pocos días envió al congreso un proyecto de Ley de Amnistía para los presos políticos peronistas y al poco tiempo el proyecto de Asociaciones Profesionales, devolviéndoles gran parte de su poder a los gremios peronistas. Frondizi estaba cumpliendo su parte del acuerdo con Perón. Pero comenzaron a hacerse sentir las presiones de corporaciones tradicionalmente más poderosas: la Iglesia y los militares, representantes a su vez de los grandes grupos económicos nacionales y extranjeros que veían con creciente preocupación el rumbo que parecía tomar el gobierno.

La iglesia se hizo sentir durante los intensos debates sobre la nueva Ley de Educación Superior que permitía a las universidades privadas otorgar títulos habilitantes y subsidiaba a la educación privada, en su gran mayoría en manos de la iglesia católica. El apoyo de Frondizi a la ley desató intensos debates entre sus allegados y provocó la renuncia de su vicepresidente Gómez. En su gobierno Frondizi autorizo el funcionamiento de universidades privadas, lo que genero un profundo debate entre los defensores de la enseñanza laica o libre, en su mayoría católicos. Esto fue considerado por sus opositores como una concesión a unos de los factores del poder, ya que la iglesia era la que se veía beneficiada con esta medida, por la instalación de dichas universidades privadas.[7]

Política internacional

Arturo Frondizi mantuvo una política de buenas relaciones con los países exteriores, durante el año 1958 realizo varios viajes alrededor del mundo, llegando a conocer al líder cubano Fidel castro, hasta haber llegado a estados unidos con objeto de mediar entre ambos países, que atravesaban un serio conflicto por la sospecha estadounidense

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