Emplazada en la antigua ciudad de Constantinopla, hoy llamada Estambul la Basílica de Santa Sofía es la obra cumbre de la arquitectura bizantina

Introducción

Emplazada en la antigua ciudad de Constantinopla, hoy llamada Estambul la Basílica de Santa Sofía es la obra cumbre de la arquitectura bizantina, y uno de los símbolos más icónicos de la ciudad. El espacio que ocupa en la ciudad, coronando la colina de la primera Bizancio y junto al Palacio Imperial, no hace sino reforzar el significado apuntado. 

Santa Sofia también es conocida como el tercer templo dado que en el sitio donde fue erigida había sido previamente el hogar de la “Gran iglesia” conocida así por su tamaño, el cual superaba a muchas otras iglesias contemporáneas de la ciudad. Esta primera iglesia fue inaugurada en el año 360 por el obispo de Antioquia.

La primera Iglesia fue quemada en el año 404 durante una serie de disturbios que se dieron a raíz de un conflicto entre el patriarca de Constantinopla y la emperatriz Aelia quien fue esposa del emperador Arcadio.

Teodosio II ordeno la creación de una segunda iglesia la cual fue inaugurada en el año 415. Esta edificación contaba con grandes techos de madera. El diseño de la basílica estuvo a cargo del arquitecto Rufino. La segunda iglesia sufrió los estragos de un incendio iniciado durante la revuelta Nika en enero del 532.

La tercera iglesia es la que hoy en día sigue en pie, fue mandada a construir por el emperador Justiniano en el año 532 a solo unos días de haber sido destruida la segunda basílica.

Para la tercera iglesia Justiniano decidió que este edificio debería superar todos los parámetros conocidos, en cuanto a las dimensiones y estructura del edificio. Para la tarea de diseñar un recinto de tal magnitud designó a un matemático y un arquitecto como los encargados del diseño.

Isidoro de Mileto (matemático) y Antemio de Tralle (arquitecto) se dieron a la tarea de diseñar una edificación sin antecedentes en cuanto a su estructura y tamaño, debía ser el hito mas representativo de la ciudad. Para esta construcción no se escatimó en recursos dado que debía ser un recinto majestuoso.

Se envió traer a los mejores constructores y obreros del imperio, así mismo se mandó traer materiales de todos los rincones del imperio. Entre los materiales utilizados destacan las grandes piedras de cantera de pórfido, grandes columnas helenísticas, mármol, piedra negra de la región del Bósforo, grandes murales adornados con oro, mármol verde traído de Tesalia entre otros.

La construcción de Santa Sofía represento un parteaguas en la arquitectura de aquella época siendo este edificio la cúspide de la arquitectura bizantina pero también marcó el final de lo que conocemos como arquitectura antigua.

El 27 de diciembre del año 537 es inaugurada la tercera basílica a solo cinco años de haber comenzado su construcción, un tiempo récord tomando en cuenta los sistemas constructivos de la época y las dimensiones del mismo edificio. A pesar de haber sido inaugurado se siguieron haciendo trabajos dado que muchos de los murales y elementos decorativos aun no estaban concluidos.

Estambul esta situado cerca de la Falla Anatolia Septentrional lo cual ha provocado numerosos terremotos a lo largo de su historia. En agosto del año 553 se produjo un gran terremoto que azotó la ciudad, muchas construcciones resultaron dañadas, entre ellas Santa Sofía, en cuya cúpula se presento agrietamientos. Posteriormente, en el año 557 se produjo un terremoto de mayor intensidad que el de cuatro años antes y el 7 de mayo del año 558 se produjo un tercer terremoto con el cual se derrumbó por completo la cúpula se Santa Sofía.

La cúpula fue reconstruida por Isidoro el joven, sobrino de Isidoro de Mileto quien había fallecido aun antes de que la obra fuera terminada. La nueva cúpula se construyó con materiales más ligeros y por orden del emperador se superó la altura de la cúpula anterior.

La cúpula de Santa Sofía representó su mayor reto, así como el mas grande defecto del diseño de los arquitectos originales, pero a su vez los llevó a la búsqueda de la innovación arquitectónica dado que la tarea era el poder sustentar una estructura que soportara una cúpula de 32 metros de diámetro a una gran altura y sin recurrir al uso de columnas para sustentar dicha estructura.

Este planteamiento llevo a una solución: la cúpula se sostendría sobre cuatro arcos siendo solo cuatro columnas las encargadas de sostener toda la estructura central de la basílica.

Para poder hacer que la estructura trabajara correctamente se debía lograr combinar ambas geometrías, el arco y la columna en un cuerpo que trabajara en conjunto para sostener la cúpula. La solución a la que se llego fue la implementación de un sistema nunca antes usado, las pechinas.

Una pechina se puede definir geométricamente como el fragmento triangular de una esfera. Este elemento permite la transmisión correcta de las cargas que reciben los arcos hacia las columnas dado que reciben las cargas laterales de los arcos y las desembocan puntualmente a la columna.

Habiendo solucionado la cúpula la estructura presento grandes problemas dado que el peso de la cúpula empujaba las columnas hacia los extremos, lo cual llevo a los arquitectos a una solución: para contrarrestar los empujes laterales se opto por usar dos medias cúpulas ubicadas al este y oeste del eje principal que rige a la nave central lo cual brindo mayor sustento a la estructura.

La estructura de Santa Sofía desafió todos los paradigmas arquitectónicos de la época dado que la nave central no contaba con muros o columnas que sustentaran la gran cúpula central dando como resultado una nave abierta con una cúpula suspendida en el aire.  

...