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JERUSALEM EN LOS TIEMPOS DE JESUS


Enviado por   •  15 de Mayo de 2014  •  3.176 Palabras (13 Páginas)  •  556 Visitas

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CAPITULO I: LAS PROFESIONES

I. LAS PROFESIONES Y SU ORGANIZACIÓN EN JERUSALÉN

El autor nos comenta que el judaísmo de esa época tenía gran estima a las profesiones, describe la entrada en Jerusalén de las procesiones de las primicias, cuyo encuentro salían los mal altos funcionarios del templo, y menciona como particularidad que hasta los artesanos de Jerusalén se levantaban al pasar la procesión y la saludaban, era un signo extraordinario de respeto , porque todo el mundo tenía que saludar a los doctores poniéndose en pie, mientras que los artesanos no estaban obligados a levantarse a su paso durante el trabajo, ellos trabajaban sentados en sus talleres que daban a la calle se tenía una gran estima por los artesanos y su trabajo. (pg. 19).

También se encontraban los skenopoios , esta profesión era la que ejercía el apóstol Pablo. Entre las profesiones que ejercían los más antiguos doctores mencionados en el talmud figuran los sastres, fabricante de sandalias, carpintero, zapatero, curtidor, arquitecto, constructores, barquero, etc. también el autor nos menciona que existieron oficios despreciados como el de tejedor, los motivos diversos por la cual deben de haber sido despreciados , son por sucios, otros por ser notoriamente fraudulentos y otro, por relacionarse con mujeres, se dice que este oficio tenía su sede en la parte meridional de la ciudad baja, en la Puerta de la Basura.

Los más significativos productos fabricados en la provincia eran los productos de lana, tales como tapices, mantas, tejidos, además de ungüentos y resinas olorosas. En Jerusalén se vendía lana en uno de los bazares de la ciudad, se dice que su elaboración era una de las obligaciones de la mujer en el matrimonio, como lo cita el autor en la Misná Ketuvot V5, de ahí que también da referencia al versículo citado en Proverbios 31:13 .

También nos comenta el autor, que en Palestina, un tejedor no podía llegar a Sumo Sacerdote, por lo mismo que el oficio de Sumo Sacerdote era muy honrado mientras que el de tejedor todo lo contrario, por ende, no tendría lógica para ellos, que un despreciado oficio llegue a tal importante puesto. Asimismo, los bataneros estaban estrechamente ligados al oficio del tejedor, ya que tenían que impermeabilizar, convirtiendo en fieltro la pelusilla de la lana, los tejidos procedentes del telar. Se habla también de los sastres en Jerusalén, y se constata la existencia de un mercado de vestidos en la ciudad nueva, además de los comerciantes de sandalias, ahora es entendible cuando en las historias del NT mencionan la ropa, el calzado, era porque ya existían comerciantes y fabricantes de estos artículos.

Otras de las cosas que el autor nos va a mencionar es cuanto a la alimentación, acerca de la producción de los recursos alimenticios, y en primer lugar se encuentra la elaboración del aceite, ya que Jerusalén es rico en olivares .

También en cuanto a los artículos de lujo, destaca la elaboración de ungüentos y resinas; la venta de ungüentos era muy usada en Jerusalén, como se puede ver en el texto que menciona a mujeres galileas que acompañaron a Jesús junto a la cruz y “compraron perfumes (mezclados con ungüentos), para ir a embalsamarlo”. el principal producto de este perfume era el cinamomo, los cuales se cultivaba en la ciudad, y se dice que cuando se quemaba, se esparcía un agradable olor; a este producto también se solían quemar en el templo.

Entre otras profesiones se encontraban los constructores de edificios, los médicos; que eran muy requeridos en la ciudad (para curar las lesiones y heridas, y realizar la circuncisión), un ejemplo en la biblia: Lucas; también se encontraban los barberos, cambistas, escultores y artistas de vidrio.

II. PECULIARIDAD DE JERUSALÉN Y SU INFLUENCIA EN LAS PROFESIONES

Jerusalén en aquel entonces era parte de la provincia de Siria, y se distinguía fundamentalmente de las otras grandes ciudades de las provincias, por su ubicación desfavorable para los oficios, asi que su única materia prima que en gran cantidad ofrecían era la piedra, por lo demás se encontraban los rebaños que ofrecían lana y pieles, para los vestidos y telas, y los olivares madera de olivo y aceitunas.

Pero a pesar de su ubicación desfavorable era rico en oficios, pero surge la pregunta como el autor lo cuestiona. ¿De qué medios o recursos disponía la ciudad para financiar este comercio?

El autor menciona 4 fuentes de ingresos que uso Jerusalén para financiar su comercio:

 primer lugar los fuertes ingresos del templo (que provenían de las donaciones de parte de todo el mundo),

 otra fuente de ingreso eran las peregrinaciones a las fiestas por parte de los extranjeros,

 también mencionar los ingresos por impuestos

 y por último el ingreso por parte de los grandes capitalistas: comerciantes al por mayor, recaudadores de impuestos y judíos de la diáspora que se volvieron ricos.

Cabe recalcar que la situación de la ciudad era totalmente desfavorable para el desarrollo de los oficios, Jerusalén sin embargo, por su importancia económica, política y religiosa, ofrecía una floreciente industria.

CAPITULO II: EL COMERCIO

I. INDICACIONES SOBRE EL COMERCIO DE JERUSALÉN

1. Generalidades

Consideramos que es de suma importancia entender el grado de desarrollo comercial en se encontraba en Jerusalén antes del 70 d.C. El autor nos describe en términos generales una economía urbana. Las mercancías eran transportadas a Jerusalén desde lejos por medio de caravanas de camellos, con frecuencia muy importante. Para el comercio con las regiones vecinas se empleaban también asnos como bestias de carga, los productos de los alrededores más próximos eran traídos a la ciudad por los mismos campesinos .

Habían varios mercados: de cereales de frutas y legumbres, de ganado, de madera. Existía un mercado de reses cebadas e incluso había un lugar especial para exposición y venta publica de los esclavos, allí se ponían y se exponían los esclavos. Para hacer las cuentas los comerciantes y peregrinos podían cambiar el dinero que tenían podían cambiar el dinero que traían en los puestos de los cambistas, por supuesto, Jerusalén tenía monedas propias.

2. El comercio con los países lejanos.

El flujo de Grecia sobre el comercio

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