LAS INSURRECCIONES POPULARES Y LA LUCHA POPULAR EN VENEZUELA

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER PUPOLAR PARA LA EDUCACION UNIVERSITARIA

INSTITUTO UNIVERSITARIO DE TECNOLOGIA DEL OESTE

“MARISCAL SUCRE”

CARACAS – VENEZUELA

LAS INSURRECCIONES POPULARES Y LA LUCHA POPULAR EN VENEZUELA

PRESENTADO POR:

Delfa Andrade

C.I. 15760480

Sección 8121

Trimestre IV

Trayecto II

Materia: Socio Política

Caracas, Marzo de 2016

INTRODUCCIÓN

En el presente trabajo recordaremos una parte de la historia de nuestro país que estuvo marcada por luchas armadas en pro de mejorar las condiciones sociales de los más desposeídos. En la época de la colonia, nuestro proceso hacia la independencia de Venezuela se vio marcado por hechos  que transcendieron en la historia, por ser distinto al resto de los procesos independentistas del continente americano.

La crisis colonial  producida en el país permitió que las masas vulnerables y populares a las cuales pertenecían indios, pardos y esclavos negros se armaran en rebelión por causas económicas y sociales, más que políticas, contra los blancos propietarios de grandes haciendas y latifundios, así como también contra España y su imperio, para luchar en pro de sus derechos sociales e igualitarios, como protesta contra los impuestos, gravámenes, injusticias, abusos e imposiciones a los que eran sometidos por parte de las autoridades españolas. Para ese entonces, la población en Venezuela estaba compuesta por un 20% de Blancos de los cuales se dividían en tres grupos: Peninsulares, Mantuanos y los blancos de orilla que eran pobres; 50% de pardos y 30% que estaba conformado por esclavos e indígenas.

LAS INSURRECCIONES DE ESCLAVOS Y LA LUCHA POPULAR

INSURRECCION DE JUAN FRANCISCO DE LEÓN

En abril de 1749, el Teniente cabo de guerra y juez de comisos Juan Francisco de León, se puso a la cabeza de unos 800 amotinados en Panaquire, quienes estaban descontentos contra los procederes de la Compañía Guipuzcoana. Este movimiento reflejaba el descontento de los colonos y represento el primer eslabón del proceso de integración por la lucha para la libertad individual.  Se presentaron armados en Caracas y como el gobernador no cumplía su palabra de expulsar a la compañía, León volvió meses más tarde a la cabeza de 8.000 manifestantes. Para el año de 1751 organizó una tercera manifestación armada, en la cual él y su hijo fueron derrotados y se entregaron después de haber huido. Una vez prisioneros, fueron llevados a España donde Juan Francisco de León murió, mientras que su hijo regresó a Venezuela años mas tarde.

REBELION DE LOS COMUNEROS DE LOS ANDES

Este movimiento estallo en la Región Andina en 1781 como protesta contra la política fiscalista del gobierno español que era ejecutada por el intendente José de Ábalos. Los Comuneros se apoderaron de San Cristóbal, Lobatera, La Grita, Mérida, entre otros lugares, decomisando el dinero y tabaco de las oficinas reales, así como deteniendo y desconociendo a las autoridades reales impuestas en las mismas. Este movimiento fue sometido a fines de octubre de ese mismo año, siendo encarcelados y enjuiciados sus dirigentes, aunque el Rey Carlos III les concedió un indulto total para agosto de 1783.

MOVIMIENTO DE JOSÉ LEONARDO CHIRINO Y DE JOSÉ DE LA CARIDAD GONZÁLEZ

Esta rebelión tuvo todos los indicios para ser una verdadera insurrección de carácter social clasista y hasta político, reconociendo que José Leonardo Chirino, empezó en Venezuela el movimiento revolucionario por la emancipación y liberación del pueblo Venezuela. Este proceso fue un alzamiento de negros, zambos e indios, que salieron desde Coro, al mando de Chirrinos, pasando por las armas a varios blancos poderosos así como también, quemando algunas haciendas.

El objetivo era la eliminación de los impuestos y el establecimiento de la República entregando el gobierno a un Cacique Indígena, la igualdad de todos los ciudadanos, aboliendo los privilegios, con la libertadas para los esclavos.  Al ser derrotados por las autoridades, fueron duramente castigados: Chirino, juzgado por la Real Audiencia, fue condenado el 10 de diciembre de 1796 a ser descuartizado; su compañero José de la Caridad González fue asesinado en las calles de Coro. A consecuencia de esto, entre los esclavos se quedo un estado de agitación que dejo muchas secuelas en las localidades de  Cumaná, Carúpano, Cariaco, Río Caribe y Maracaibo.

CONSPIRACION DE MANUEL GUAL Y JOSÉ MARIA ESPAÑA

Manuel Gual y José María España, instigaron con el fin de establecer una República independiente y lograr la separación de Venezuela de España. Con la ayuda de algunos ciudadanos mulatos de La Guaira y españoles que fueron deportados de España, se comprometieron en el proyecto de sublevación. El proyecto se caracterizaba como una verdadera revolución igualitaria, tanto políticamente como social. Entre sus ordenanzas figuraba la igualdad natural entre todos los habitantes, la revocación del pago de impuestos y tributos por los indígenas, la repartición de las tierras y la abolición de la esclavitud. Crearían la bandera de la futura República que constaría de una escarapela de cuatro colores, también, hicieron circular traducciones con los  Derechos del Hombre y de los Ciudadanos.

El proyecto de conspiración fue descubierto el 13 de julio de 1797. Gual y España se refugiaron en Trinidad donde continuaron su propaganda revolucionaria. España regresó clandestinamente a Venezuela donde fue capturado y condenado el 8 de mayo de 1799 a la pena de muerte. Fue, arrastrado por las calles de la cola de un caballo, ahorcado en la plaza Mayor de Caracas y descuartizado. Varios de sus cómplices también fueron ahorcados. Gual murió, probablemente envenenado por un realista, en Trinidad en 1800.

LAS INSURRECCIONES DE ESCLAVOS Y DIRIGIDA POR BOVES

El proceso de independencia, iniciado en abril de 1810, terminó con los lazos que contenían a todos los sectores sociales que habían sufrido por tres siglos la opresión del sistema colonial español en América. La primera rebelión de pardos se produjo en Valencia a pocos días de que fuera declarada la independencia de Venezuela; prolongándose la feroz lucha por más de un mes  lucha, terminando con centenares de muertos y heridos.

La represión que los blancos dominantes desataron contra el levantamiento de los pardos en Valencia fue la mejor demostración que en su proyecto de independencia no tenían cabida los sectores populares; aunque sin embargo, estos eran quienes constituían la mayoría de la población venezolana. Las rebeliones de esclavos de 1812 - 1813 en los Valles de Aragua, Valles del Tuy y Barlovento, y la incorporación de los esclavos a las filas de Boves, constituyeron expresiones particulares de esas ansias de liberación de los negros. Los blancos realistas que promovieron dicha rebelión, se vieron amenazados por los niveles que tomo el “Levantamiento de los Negros”, por lo cual tuvieron que huir para no convertirse en víctimas; puesto que fueron ellos mismos quienes se encargaron de distribuirles armas y lanzado sus proclamas de independencia. Los negros avanzaban rápidamente saqueando y quemando haciendas y caseríos, también asesinando a los blancos desde hombres, mujeres, niños y ancianos, que se encontraban en su paso, ya que su objetivo era vengarse por las míseras condiciones esclavistas a las cuales eran sometidos.  

El ejército de Boves, calculado aproximadamente en unos diez mil hombres, estaba compuesto en su mayoría por negros y mestizos, y los blancos no llegaban a representar el 1% de dicha fuerza militar, lo que quería decir, que la mayoría del pueblo venezolano estaba incorporado.

La campaña de Boves tuvo tan magníficos resultados en términos militares, que destrozó finalmente a todas las fuerzas patriotas y condujo a la pérdida de la Segunda República. El empuje decidido de los llaneros se convirtió en una herramienta mortífera en términos militares; la fuerza que le daba a las huestes de Boves el contenido igualitario de su ejército pudo más que el tesón de los patriotas radicales (como Bolívar y Ribas) que sin embargo no tenían el apoyo popular que acompañó al caudillo. Los efectos de su actuación contra los blancos implicaron el exterminio de gran parte de la clase dominante criolla, y de la población blanca en general.

Cuando el general Boves muere en la Batalla de Urica, su ejército fue desmantelado por el Cuerpo Armado que encabeza Pablo Morillo, por lo que los blancos o mantuanos que aun quedaban se lograron salvar. La fuerza del movimiento social levantado por Boves echó las bases del igualitarismo social propio de nuestro país, pues los blancos criollos nunca recuperaron totalmente el control de la sociedad venezolana, como lo habían tenido durante el período colonial.

Luego de 1814, los mestizos y los afrovenezolanos se convirtieron en actores sociales de relevancia fundamental, y no podían ser excluidos de los planes que se proponían conformar una nueva sociedad en territorio suramericano. El cambio en la estrategia patriota, formulado por Bolívar en 1815-16, al incorporar a los esclavos, mestizos y blancos de orilla al proyecto independentista mantuano, fue la consecuencia más contundente de la insurrección esclavo - mestiza de 1812-1814. Por esa causa Bolívar, al invadir nuevamente a Venezuela en 1816, decreta la liberación de los esclavos. El mérito de Bolívar consiste precisamente en haber logrado atraer para su proyecto independentista a los sectores sociales mestizos y a los propios esclavos. Aunque esa estrategia no fuera desarrollada hasta sus últimas consecuencias, ni siquiera por el mismo Bolívar, tal como se demostró en los procesos que condujeron al fusilamiento de Manuel Piar, y luego del Almirante Padilla

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