“La distribución de espacios en las edificaciones del Imperio Otomano”

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FACULTAD DE ARQUITECTURA

ESCUELA ACEDAMICA PROFESIONAL DE ARQUITECTURA

INFORME ACADEMICO

“La distribución de espacios en las edificaciones del Imperio Otomano”

Autor(es):

Bustos Macedo Ashely Marisol

Castillo Flores Nicole

Catunta Esquivel Myriam

Contreras Suarez Juan Eduardo

Cruz Vásquez Cristopher

Asesor:

Dr. Libertad Polo Romero  

Lima-Perú

2020-II

INDICE

1. INTRODUCCIÓN
2. DESARROLLO

1. Estilo de vida del Imperio Otomano.
2. El espacio arquitectónico del imperio Otomano
3. La penumbra en las edificaciones del Imperio Otomano
4. Representantes.
5. Comparación de las viviendas actuales y las del Imperio Otomano.
6. Objetivos

Objetivos Generales.

Objetivos Específicos.

1. CONCLUSIONES
2. REFERENCIAS
3. ANEXOS

1. INTRODUCCIÓN

si bien es cierto la arquitectura otomana se destaca en sus construcciones adoptando sus propias formas inclusive gracias a su extenso territorio se establecieron clases de las cuales la mas alta eran de gran importancia tanto en la forma de vestir como en las construcciones de las viviendas, los espacios que forman van generando orden, por ende, las viviendas eran su forma de demostrar el arte.

En las iglesias se destaca el ingreso de luz, el orden la proporción y de cómo aporta su construcción a la sociedad, los rangos de la religión islámica y las alturas que se podían contemplar a distancia.

las viviendas actuales suelen generar ciertos espacios generando orden en cuanto a sus distribuciones. por ello nosotros como equipo te incitamos a conocer los orígenes del gran imperio, tomando en cuenta las iglesias, viviendas y de cuál es la comparación con las viviendas actuales

1. DESARROLLO

1. Origen del imperio Otomano

El Imperio Otomano ha sido uno de los imperios islámicos que más han perdurado: durante 623 años los otomanos han conquistado y gobernado los más variados pueblos y razas, y pudieron extenderse en tres continentes: Asia, África y Europa, expandiendo en mayor o menor medida su cultura y tradición. La ocupación otomana de parte de Europa, por su lado, ha sido una importante fase en la que se ha unido Oriente con Occidente sobre tierras europeas, y que perduró algo más de cinco siglos, durante los cuales, gran parte de la Europa Occidental pasó a formar parte del mundo islámico política, económica y culturalmente. Se construyeron nuevas ciudades y se añadieron castillos y alcazabas a los ya existentes, transformándolos en nuevos centros poblacionales, culturales y grandes mercados. Algunas de estas ciudades han perdurado hasta nuestros días, y son importantes ciudades y capitales de países actuales. La creación de tantos centros poblacionales, ciudades y pueblos, se debe al sistema administrativo otomano, que dividía los territorios ocupados en estados, y los estados en provincias, llamadas sanajiq. Estas provincias llevaban generalmente el nombre de la ciudad más grande, pero en ocasiones, y por razones estratégicas, se elegía un pueblo como capital de la provincia, lo cual originaba un rápido crecimiento de éste para formarse en nuevas ciudades.

El Islam: Se convirtió en la religión oficial del imperio después de la conquista de Constantinopla y la conquista de las regiones árabes del Medio Oriente.

La posición más alta del Islam estuvo formada por el califato; un administrador islámico titulado “Califa

Cristianismo y judaísmo: De acuerdo con el Imperio otomano, a los cristianos se les garantizó algunas libertades limitadas, como por ejemplo el derecho a la adoración y alabanzas. Sin embargo, tuvieron prohibido el porte de armas, montar caballo y otras limitaciones legales.

Se dice que muchos cristianos y judíos se convirtieron al Islam para asegurar todas las garantías en la sociedad otomana.

1. Estilo de vida del Imperio Otomano.

Considerando que los sucesos históricos son diferentes para cada clase social; la supervivencia de la población durante el imperio otomano sin duda no fue de las más simples, o fáciles de llevar, la mayoría siendo esclavos. Según datan hechos de diversas fuentes, que tras las constantes guerras dadas en esta época los guerreros eran quienes cumplían un rol importante otorgándoles más derechos de los que se reconocían a los demás, y sultanes líderes de conquistas encabezando hasta guerras si lo consideraban favorables que siendo muchos cometían atrocidades contra ellos mismos.

El imperio Otomano velaba por nada más que su bien.

Aunque podemos dar contraria con su actitud religiosa, siempre respetuosos a su religión aun cuando, sabían que existían personas que no compartían de está viviendo en el mismo territorio. Eran tolerantes, pero siempre buscaron contrastar sus creencias.

De ejemplo podría decirse que teníamos a los árabes “Como era de esperar todas estas impopulares medidas determinaron que muchos leales súbditos árabes, descontentos por el autoritarismo giro que habían vuelto nacionalistas, pero deseaban ampliar sus derechos culturales y políticos” (Romero, I., Romero, E., Breve historia del Imperio Otomano).

 Que nos trata de decir que, ante todos los conflictos políticos sociales, siempre se cumplía una normal humanitaria sobre esta necesidad de “expresión propia”, que aunque estén sometidos por algún imperio, buscar comodidad entre los suyos para una mejor convivencia. En este caso los árabes buscaban una independencia

El palacio de Topkapi residencia del sultán junto a unos cuantos nobles, era magnifica, excelente estructura que contrastaba con sus jardines y patios ubicada con el entorno que comprendía la gran Estambul.

Había muchos mercados, pero ninguno como el Gran Bazar, las instalaciones interiores parecieran un laberinto, pero sin duda es esta lo que lo vuelve muy interesante.

Y teniendo de los ideales más raros con respecto a la mujer, desde muy chicas con poca suerte terminaban siendo raptadas y luego vendidas a bazares o a harems donde la mayoría ocupaban papeles de servicio domésticos, otras tenían que acudir a los deseos de sus dueños sin objeción alguna, a pesar de estar casados podrían tener concubinas que hasta las esposas podrían administrar y educar como servidumbre. Muchas de estas chicas no lograban más que aspirar a sultanas pues esta posición siendo de la más alta para una mujer, proclamaba ser más liberal a comparación que la mayoría que al llegar a su edad adulta que aproximadamente 24 años eran vistas con desagrado.

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