MERCANTILISMO, FISIOCRACIA Y LIBERALISMO

HISTORIA DEL PENSAMIENTO ECONOMICO

GUIA 1ER PARCIAL

Introducción

A lo largo de la historia el ser humano ha tratado de satisfacer sus necesidades, de acuerdo con las condiciones naturales en que vive; gran parte se consideran económicas, ya que se precisa del uso adecuado de bienes, naturales o transformados, que de adquieren en el entorno. Dichos bienes pueden ser abundantes o escasos, por lo que su utilización debe ser moderada para que satisfagan las necesidades presentes y futuras.

Para cubrir sus necesidades, los seres humanos se valen de los medios disponibles, a los que se les pueden dar usos alternativos.

Alfred Marshall señalaba que la economía es “un estudio de la humanidad en el negocio ordinario de la vida; examina esa parte del individuo y la acción social que se conectan estrechamente con el uso y el logro de los requisitos materiales del bienestar”. Otro economista inglés, lord Lionel C. Robbins redefinió, el campo de la economía al decir que es “la ciencia que estudia el comportamiento humano como una relación entre medios escasos que tienen usos alternativos”.

Así, en las definiciones de economía encontramos de una u otra manera que “es la ciencia del economizar”, por lo que el asunto que preocupa al conjunto de la economía es hallar las opciones para lograrlo. La selección de alternativas implica elegir algunas y abandonar otras para producir un determinado bien o servicio, mediante el empleo de recursos disponibles.

Si bien existen diversos significados de economía, la expresión tiene un fundamento etimológico: está formada por las voces griegas oikos (casa) y nomos (ley), lo que literalmente significa “administración del patrimonio de la casa”, que no es otra cosa que la generación, acumulación y distribución de la riqueza disponible.

El concepto de economía comprende, por tanto, la economía individual la economía social en toda su complejidad; así, la economía es la ciencia que ayuda a la comprensión de la generación, adquisición y distribución de la riqueza para la familia y para la sociedad o el Estado.

En consecuencia, la economía se constituye en una de las áreas básicas del conocimiento de la relación que el ser humano establece con su entorno geofísico y con los otros seres humanos, orientada preponderantemente a la producción, distribución y consumo de los bienes que satisfacen las necesidades y deseos de los integrantes de las sociedades.

Relación entre historia de la economía, historia del pensamiento económico y otras ciencias

La actividad económica es una forma de actuar de algunos seres humanos que pretenden poner al alcance de los otros los bienes y servicios que éstos necesitan, como consecuencia de que los hombres sienten necesidades y tratan de satisfacerlas en el menor tiempo posible.

Esta actividad económica la encontramos en las distintas épocas de la humanidad.

A medida que avanzan los conocimientos de la acumulación de experiencias y de la preservación del género humano, los grupos pueden reproducir los bienes necesarios para satisfacción de sus deseos; y en tanto el mundo económico evoluciona, el progreso del hombre planea un mayor número de necesidades cada vez más complejas y variadas.

La actividad económica, se había centrado en la recolección y posteriormente en la caza, fue evolucionando en la satisfacción de necesidades y se fue ampliando para atender las necesidades humanas más variada, hasta llegar a lo que son los derechos humanos: alimentación, vestido, vivienda, descanso, diversión, el contra con una forma lícita de ingreso económico, con protección, etc.

La situación jurídica es una situación deseable frente a la cual la economía no ha tenido una tarea fácil, pues son muchos los obstáculos, los bienes naturales o recursos, pese a ser generalmente abundantes, son la mismo tiempo insuficientes dadas las múltiples necesidades y condiciones

humanas. Esos problemas han obligado a una utilización racional de los recursos económicos para dar satisfacción al mayor número posible de necesidades de los grupos sociales y particularmente a las más urgentes, que son vitales.

La ciencia económica surge como el sustento del conocimiento que permite la explicación de la actividad económica; su finalidad pensar sobre las necesidades que pretende satisfacer el ser humano, así como los fines u objetivos que persigue.

Las formas de explicación y comprensión de las actividades económicas han evolucionado a lo largo del tiempo. Ello ha permitido conocer las ideas de los diversos pensadores en los distintos momentos históricos y espacios geográficos. Los individuos y grupos sociales realizaban tareas de carácter económico, la ciencia y, por ende, el pensamiento económico surgió cuando individuos interesados en conocer dichas actividades económicas hacen sus interpretaciones de esa realidad.

La sociología tiene como objeto el estudio de la conducta del hombre en sociedad, que es el medio natural en el que se desenvuelve la vida humana. La actividad o acción humana es estudiada en sus aspectos físicos e interpretativos, por la antropología. El derecho pretende regular las relaciones que se dan entre los hombres y los órganos sociales y estatales, donde el Estado se considera el órgano social más representativo. Pero varias de las relaciones que llevan a actuar a los individuos entre sí y con el Estado son consideradas propias del estudio de la ciencia política, y también es innegable que muchas de las acciones políticas tienen carácter económico.

Hay un estrecho vínculo con los aspectos jurídicos ya todo hombre busca que sus relaciones se ciñan a determinados valores como la seguridad, la moralidad, el bien común y el orden. Pero para logar ese orden se requiere el equilibrio entre la fuerza y la libertad del hombre, que puede encauzarse tanto al bien como al mal.

La riqueza o capital en conexión con el patrimonio de las personas y con el patrimonio de las naciones tiene aspectos económicos, pero también legales, con lo que resulta fácil entender la íntima relación que existe entre la economía y el derecho.

La relación entre las ciencias sociales es tan íntima que no puede entenderse la legislación de un país y el derecho internacional si no se tienen nociones de la ciencia económica, política o sociológica. Es por ello que hay un constante intercambio entre el derecho, la política y la economía.

En síntesis, aunque cada una de las ciencias se ha desarrollado de manera autónoma, no hay ninguna que no implique en la comprensión de la realidad las perspectivas de las otras áreas del conocimiento, puesto que la política, la antropología, el derecho y la sociología, por citar algunos ejemplos, no se pueden entender al margen de los aspectos económicos. Por ello, la economía no es un área de conocimiento aislada, sino que forma parte integral de las demás ciencias sociales.

MERCANTILISMO

Características

Lo que ha hecho posible hablar de mercantilismo es la aparición, en diferentes países, de una serie de teorías que explicaron durante mucho tiempo la conducta de los estadistas, o les sirvieron de fundamento.

El mercantilismo debe ser considerado como “una fase de la historia de la política económica. Se destaca en primer plano la erección de los Estados- naciones y el sistema monetario, el proteccionismo y otros expedientes económicos se consideran meramente como medios para ese fin. Los que tenían a su cargo las funciones del gobierno aceptaban las nociones mercantilistas y ajustaban su política a ellas.

La mayor parte de los mercantilistas buscaban una autoridad central poderosa que les protegiese contra las pretensiones de sus rivales. El capitalismo mercantil procedió y preparó el terreno al capitalista industrial moderno. Los mercantilistas pedían un Estado lo bastante fuerte para proteger los intereses comerciales y para destruir las numerosas barreras medievales que impedían la expansión del comercio.

El monopolio, la protección y la reglamentación por el Estado no siguieron siendo características indispensables del capitalismo. El desarrollo de la industria moderna contra el monopolio empieza muy pronto en el campo del comercio interior mientras el mercantilismo sobrevive durante mucho tiempo en el comercio exterior. Adam Smith inició su famosa crítica del mercantilismo atacando la noción popular de que “la riqueza consiste en dinero, o en oro y plata”.

El comercio fue la fuerza dominante del desarrollo económico, la circulación de bienes o mercancías fue la esencia de la actividad económica. Su finalidad la acumulación de dinero, correspondía a las ideas tradicionales de la riqueza y de los objetivos de la política nacional. Serra el gran mercantilista italiano, daba por sentado que todo el mundo sabía “cuan importante es, así para los pueblos como para los príncipes, que el reino abunde en oro y plata”.

La alta estimación del dinero fue común a todos los mercantilistas. Miraban el proceso económico desde el punto de vista de la etapa primitiva a que había llegado el capitalismo (su etapa comercial) y esto les llevaba a identificar dinero y capital. La palabra riqueza se usaba claramente en el sentido de capital; y la teoría del dinero de los mercantilistas era parte de su opinión unilateral sobre la actividad económica. La era mercantilista pudo encontrar una confirmación sorprendente de los usos productivos del dinero que asestaron el golpe de muerte a la economía feudal y a las

prohibiciones canónicas de la usura. El comercio decían depende de la abundancia de dinero: cuando el dinero escasea, el comercio es flojo;

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