Revolución Cubana

REVOLUCIÓN CUBANA

Revolución expresa un cambio violento en las instituciones políticas, económicas o sociales de una nación, según lo indica la Real Academia Española. A partir de este significado vemos que una revolución siempre viene de la mano de la clase social oprimida, ya que se ven desfavorecidos por el sistema que se está llevando a cabo en un país. Por lo tanto, este grupo revolucionario desea modificar o cambiar ese régimen por otro más conveniente para la mayoría de la población.

Un ejemplo perfecto para este tema es la Revolución Cubana

En 1940, Fulgencio Batista llega al poder tras propiciar un Golpe de Estado al gobierno de Carlos Prío Socarrás. La industria azucarera se vio afectada debido al deterioro de relaciones con Estados Unidos. Asimismo, se redactó una nueva Constitución, en donde el Presidente sería electo mediante el sufragio y gobernaría durante un período de cuatro años.

En 1944, se procede a realizar el período de elección presidencial, en este caso, ganó la presidencia Ramón Grau San Martín, quien estudió medicina en la Universidad de La Habana. Posteriormente, cede la presidencia a Carlos Prío Socarrás, quien no duraría mucho en el poder, pues, en 1952 recibe un Golpe de Estado por parte de Fulgencio Batista, instaurando entonces un gobierno dictatorial.

El enriquecimiento de un pequeño grupo de la oligarquía cubana y el régimen dictatorial generaron desacuerdo en el pueblo cubano, con lo cual se conformó una oposición dispuesta a derrocar a Batista. Esta oposición fue apoyada por estudiantes, trabajadores y diferentes entes políticos.

Este grupo opositor se llamó por un tiempo “La Juventud del Centenario”, debido al nacimiento de José Martí, quien fue un político democrático cubano y fundador del Partido Revolucionario Cubano en 1892. Este grupo de jóvenes, conformado por Ernesto Guevara, Raúl Castro, Camilo Cienfuegos y su líder Fidel Castro, no dudó en hacer uso de armas para derrotar el gobierno de Batista.

A principios del verano de 1953, el historiador de las relaciones cubanonorteamericanas, Portell Vilá, estaba sentado en un bar de La Habana, cuando un ex-alumno suyo de la universidad, que pasaba por allí, le dijo que estaba planeando un ataque contra el cuartel Moncada, de Santiago de Cuba. […] El ex-alumno era Fidel Castro Ruz, que entonces estaba a punto de cumplir veintisiete años, y era miembro del ala izquierda de los ortodoxos, conocido por su energía y facilidad de palabra. (Thomas, H.1982.17).

El 26 de Julio de 1953, el cuartel Moncada, en Santiago de Cuba, fue el punto de ataque por parte de los rebeldes opositores, sin embargo, el grupo de jóvenes había sufrido varias bajas y otros, incluyendo a Castro, habían sido capturados, enjuiciados y encarcelados en Cuba. Meses después, Batista otorgó la libertad a los rebeldes, quienes formaron el Movimiento-26 de Julio, este movimiento se formó con las bases ideológicas democráticas de José Martí y tenía como objetivo derrocar el régimen dictatorial de Batista.

El pueblo cubano por fin tenía una imagen que avocaba el deseo de una Cuba libre. Castro emanaba ese carisma juvenil que hacía frente al gobierno dictatorial de Batista. La facilidad que Castro poseía para hablar era de gran ayuda, de esta forma podía influir en la opinión del pueblo.

Cuba es un país donde la política, la magia y la religión son provincias colindantes, a veces sin línea divisoria. Al mismo tiempo la Victoria inspiraba en toda la sociedad un espíritu de virtud cívica que nunca se había dado antes en Cuba. Los cubanos no habían tenido mucho en qué creer. […] Desde la muerte de Martí, los cubanos habían estado buscando a este hombre. Ahora creían haberlo encontrado. (Thomas, H.1982.222).

Por su parte, Raúl Castro y Ernesto Guevara eran las personas más influyentes sobre Castro, pues, ambos estaban claros de su postura ideológica, y orientaban a Castro en el ámbito político que debía llevar la revolución.

Raúl Castro y Guevara, indudablemente, representaban una opinión extrema, no necesariamente marxista o comunista, pero creían que Cuba había de elegir entre dos extremos; o permitir que la burguesía norteamericanizada […] estropeara las perspectivas de revolución social, o instituir la dictadura del proletariado. […] Pero Guevara y Raúl Castro, siendo los jefes más destacados, habían tenido siempre mucha influencia sobre Castro. (Thomas, H.1982. 232).

La estrategia de Castro era simplemente dejar que el ejército, que dominaba en su mayoría los ministerios, se desintegrara solo. Muchos oficiales no estaban de acuerdo con la política de Batista, por lo cual, algunos (Villafaña, Durán Batista, Ubineo León) optaron por unirse al movimiento liderado por Castro. Sumado a esto, el ejército cubano no poseía experiencia en combate, no contaba con el armamento adecuado y se enfrentaba a un pueblo decidido a luchar contra la dictadura.

La tarea de Castro en la lucha fue la de crear una situación de guerra civil en Cuba, de forma que el régimen de Batista pasara a identificarse abiertamente con el ejército, y luego obligar a este ejército, empujado a esta situación de prominencia, a desintegrarse o destruirse a sí mismo a través de sus propias debilidades, divisiones, envidias y errores. Esto fue lo que hizo y, al mismo tiempo, obligó a los cubanos a odiar a Batista. […] Dijo Guevara en su manual de guerrillas: <<No hay que esperar necesariamente a que se dé una situación revolucionaria: puede crearse>>. (Thomas, H.1982. 224-225).

Ernesto Guevara y Cienfuegos se encargaron de la guerra en Las Villas. En 1958, contaban, aproximadamente, con 3.000 hombres armados en las montañas con orígenes revolucionarios que habían venido evolucionando desde antes de 1959. Castro, quien se encontraba en La Sierra, contaba con el apoyo de campesinos (trabajadores de las haciendas de azúcar o café) procedentes de distintas partes de Cuba. Por su parte, en las ciudades también se luchaba contra el régimen.

Tras el triunfo de la Revolución Cubana el 1 de Enero de 1959, Batista huyó de Cuba y se exilió en República Dominicana. Manuel Urrutia (político cubano) fue nombrado Presidente provisorio, posteriormente Fidel Castro se encargó del mandato de Cuba instaurando un gobierno revolucionario.

En el período de 1959 a 1963 estos revolucionarios se expandieron de tal manera que llegaron a institucionalizarse como las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR). Estas fuerzas se convirtieron en un instrumento burocrático para los

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