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Ensayo

A continuación se presenta un escrito sobre los acontecimientos que tuvieron lugar en la antigua Francia y de cómo éstos son la base de lo que hoy en día hemos logrado en cuestión del ámbito educativo y social.

Estos sucesos marcaron una pauta para la sociedad, pues en base a los acontecimientos que tuvieron lugar en esta época se establecieron las bases para fundar los planes y programas educativos en los que se pretende formar miembros útiles de la sociedad.

Son muchos los hechos históricos que han marcado el rumbo de diversas sociedades, pero la Revolución Francesa dejó un gran impacto en la formación del hombre, pues desde ahí se comienzan a establecer las bases para lo que hoy día funge como nuestro sistema educativo. Desde ésta época se pretendía crear al hombre libre, capaz de pensar por sí mismo, sin las restricciones que oponía la dictadura sobre el pueblo, ya que era la Inquisición la que controlaba lo que se llevaba a cabo y cómo es que esto debía realizarse.

La Revolución Francesa es considerada como la hija del sigo de las luces ya con ella trajo un gran movimiento en el que se pretendía formar a un hombre libre de la ignorancia, capaz de razonar y de elegir lo que es mejor para su pueblo, pues su propósito como su nombre lo indica era sacar al hombre de las tinieblas de la ignorancia y convocar a las luz de las letras y el raciocinio, ya que se tenía la necesidad de tener ciudadanos instruidos, lo cual solo se lograría obtener mediante una educación regenerada y pública mediante la cual se inculcaran lo valores y los principios que la sociedad necesitaba.

En lo que se refiere a la educación, la Revolución Francesa pretendía crear dos utopías, la revolucionaria que pretendía comenzar todo de nuevo, desde cero; y la utopía pedagógica que tenía la firma propósito de hacer del hombre un ciudadano libre

Con esta nueva utopía se pretendía que la educación debía ser pública pues pertenece a la Nación de la cual enmona, con esto se pretendía quitarle todo el poder al clero, y fue hasta 1792 que prácticamente no quedaba nada del antiguo sistema de instrucción.

Pero, como suele suceder, después de haber existido un sistema educativo que duro tantos años vigente, las nuevas instrucciones demoran un tiempo en lograr un establecimiento fijo y duradero. Lo cual se vio reflejado en la variedad de proyectos que se llevaron a cabo durante este proceso.

En primer lugar tenemos al proyecto de “Le Peletier”, el cual trataba de que la educación fuera igual para todos, pera a tal punto que llegaba a ser extremista, pues consideraba que los niños no le pertenecían a sus padres, sino a la Patria y que ellos sólo debían cuidarlos hasta los 5 años para después ser enviados a casas comunes en donde se les tratará por igual, todos deberían lleva la misma vestimenta, consumir los mismos alimentos pero sobre todo recibir la misma educación que los enseñe a leer, escribir, contar y a medir, así como los principios de la moral hasta formar al pueblo con los niños reales.

A pesar de que el proyecto de Le Peletier despertaba un interés verdadero en la población por su intención de que la educación fuera para todos; a la vez había una ambiente de reserva y miedo pues se consideraba que se estaba tratando de formar un “sueño peligroso” pues pretendía quitarles por completo los derechos a los padres. Por lo que se opto por realizar las casas de igualdad con la condición de que la asistencia fuera optativa, pero después de muchas vacilaciones se decidió por ultimo a instaurar un sistema de enseñanza primaria.

Después, en el año de 1793 de acepta el proyecto de Bouquier el cual tenía como lema principal la libertad, la libertad de enseñar, pues se pretendía que cualquiera que pudiera leer y escribir podría abrir una escuela y tomar a su cargo la instrucción primaria, el proyecto pretendía sustituir la lealtad y el entusiasmo político con las competencias y capacidades.

Posteriormente, en su decisión de 14 pluviosos año 11 (7 de febrero de 1794) el comité de salud publica decide organizar en París cursos revolucionarios sobre el arte de refinar el salitre de fabricar la pólvora de moler, fundir y aflorar los cañones. Estos cursos que duraban tres semanas debía ofrecer una instrucción acelerada Revolucionar la instrucción era unir el clero patriótico de los mejores elementos, seleccionados como alumnos el saber y las competencias de los eruditos más eminentes.

La escuela politécnica debía formar en el lapso de los tres primeros años, ingenieros para los cuerpos técnicos del ejercicio. La escuela de Marte

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