ENSAYO “PRÍNCIPE DE MAQUIAVELO”

UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DEL ESTADO DE MÉXICO

FACULTAD DE DERECHO

ENSAYO “PRÍNCIPE DE MAQUIAVELO”

ALUMNA: RAMÍREZ VELARDE ALEXIA

ASIGNATURA: TEORÍA DEL ESTADO

El libro del príncipe de Maquiavelo, es un tratado de doctrina política, el cual en su momento va dirigido a Lorenzo de Médici, para explicarle cómo actuar y qué hacer para unificar a Italia y salir de la crisis en la que se encontraba. Casi al final, Maquiavelo hace un balance sobre las causas por la cuales los príncipes de Italia han perdido sus Estados, y entre ellas, las que encontró fueron carencia de ejércitos, mala relación con el pueblo, falta de previsión y de decisión al actuar.

Por todo lo anterior, cierra la obra exhortando al príncipe, a quien va dirigida la obra, a liderar Italia y liberarla de los bárbaros, que en este caso, eran los extranjeros.

Maquiavelo habla del Poder, como conseguirlo y mantenerse en él. Fue escrito en el Renacimiento, cuando los príncipes italianos (sobre todo los florentinos, como los Medici), deseaban mantenerse en el poder frente a la amenaza del papado y los burgueses urbanos.

En este libro, el autor nos menciona las cosas y situaciones que suceden entre los gobiernos, la forma de regir estados y la manera para poder organizarse y que haya una mejor y mayor estabilidad entre el estado y el príncipe. Mejorar la forma de gobernar.

Esta obra era más bien exclusiva para príncipes de la época, pero podría ser ocupada en algunas características modernas, ya que se adentra en la mente del hombre y cómo será su reacción en diversas situaciones, y en muchas de ellas, a pesar del tiempo que ha pasado desde esta obra, habría circunstancias en las que los hombres actuarían de la misma manera que en aquella época.

Maquiavelo expone lo que él ha vivido en su momento, y a pesar del paso tiempo muchas cosas se mantienen, siguen siendo asunto de debate mientras haya quien ostente el poder y haya quienes sean gobernados. Y es un gran guía para aplicar sobre el manejo del poder, el hacer elecciones que van en beneficio del bien común y sobre todo para reflexionar que en ocasiones el bien y el mal puede volverse difícil de apreciar.

Es en general Manual de política de primer orden que no envejece con el paso del tiempo. Hoy en día los arietes de asedio están representados por los lobbys de las distintas fuerzas políticas, que en su culto al líder han creado a sus propios príncipes. Y éstos, ahora sí nuevos príncipes, curiosamente cometen los mismos errores que ya advertía el florentino más de cinco siglos atrás.

Se habla sobre los tipos de principados, los nuevos, los hereditarios, los eclesiásticos y los mixtos. Expone que los principados hereditarios y los nuevos, no optan por tomar decisiones radicales que puedan llegar a modificar o intervenir con la vida y costumbres que tiene la población. Por otro lado, los llamados mixtos (que son nuevos, pero que se anexan a un principado antiguo), implican tratos diferentes, acordes con las circunstancias políticas que intervinieron en su adquisición.

Advierte sobre las dificultades de asumir el gobierno de un principado nuevo, y menciona la magnitud de la importancia de imponerse al grupo de poder anterior, y de manejar la política interna con cautela y eficacia para que haya una buena organización.

También menciona personas con las que se debe tener cuidado y por el contrario, personas en las que debemos confiar. Y todo lo que escribe, lo apoya dando ejemplos de hechos históricos que el presenció, en Italia, España, Francia, situaciones que acontecían en esa época, como es el caso de los papaos y el reinado de Fernando de Aragón. Incluso también menciona datos antiguos de los cuales él tenía conocimiento.

Para Maquiavelo, el bien del estado, estaba fuertemente ligado con el bien común y no con el bien individual, en ningún caso. Habla sobre perfeccionar a la sociedad, hacer una transformación política la cual nos ayudará a la humanización del poder y de la sociedad.

Maquiavelo considera que existen dos formas esenciales de gobernar un principado según las circunstancias políticas y puede ser detentando el poder absoluto o, haciendo una administración conjunta con un grupo de barones de nobleza propia que se refiere a que no debe ser adquirida por el príncipe.

Aconseja optar, de ser posible, por la primera de las opciones: detentar el poder absoluto, pues con la segunda, el príncipe ostentará una menor autoridad y deberá sofocar frecuentemente rebeliones internas.

También se analiza la forma de organización de un Estado gobernado por sus propias leyes, antes de ser conquistado y las tres opciones que tiene el gobernante, que se reducen a destruirlo, radicarse en él, o mantener las leyes y costumbres anteriores, pero si es el caso, se debe obligar a pagar tributos y ser gobernados por un grupo leal al príncipe.

Muchas veces cuando un príncipe conquista un nuevo Estado, se encontrará con personas descontentas por su conquista, y lo único que estas personas esperan del nuevo gobierno son cosas malas. Y que mejor oportunidad puede tener un príncipe, para que el pueblo descontento confié en él, como el de demostrarles que de quien esperaban mal les trae bien.

Sin embargo advierte que este tipo de Estados son bastante orgullosos en cuanto a su libertad y por ende, siempre estarán dispuestos a levantarse para reconquistar, y esto hace que el príncipe para seguir manteniendo el poder, lo único que puede hacer es arrasarlo y dispersar a su población

En cuanto a la adquisición de los principados, solo existen dos formas: con armas propias y virtud, aunque estos principados son más difíciles de adquirir, y a la larga, más fáciles de mantener, siempre y cuando se disponga de las suficientes fuerzas.  

Y la segunda forma es con las armas y la fortuna de otros, aquí los principados adquiridos con las armas y la fortuna de otros aunque pueden resultar muy fáciles de obtener, son, al contrario, difíciles de mantener, pues se depende de un conjunto de factores que lo condicionan.

También advierte sobre el uso de la crueldad y la forma en que esta debe ser aplicada. Sostiene que es bien usada si se cometen todos los crímenes al principio, lo que permite que luego, poco a poco, se pueda empezar a otorgar beneficios a los súbditos, para hacerlos olvidar las ofensas recibidas previamente.

La crueldad es mal usada cuando no son cometidas todas en un inicio, lo que fuerza a que deban seguir cometiéndose en lo sucesivo, lo que le atrae la enemistad del pueblo y conduce al príncipe al fracaso.

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