Analisis "el extranjero"

De acuerdo a la reflexión de Tomás Gutiérrez Alea, ¿qué debe hacer el cine para ser algo más que un entretenimiento para el espectador? Relacione esta idea del cineasta cubano con las películas: "Y las vacas vuelan" (Fernando Lavanderos, 2004); "Smoke" (Wayne Wang y Paul Auster, 1995); "El Extranjero" (Luchino Visconti, 1967) y “Dos días, una noche” (Jean-Pierre Dardenne y Luc Dardenne, 2014). Para responder esta pregunta es necesario que argumente con detalles si cada uno de estos filmes cumplen o no el objetivo que plantea Gutiérrez Alea. En esta argumentación es necesario que haga referencia al menos a tres escenas de cada película. Cuide la redacción y ortografía de su respuesta, ya que influirá en la nota.

El cine es una industria que ha ganado demasiada importancia en temas artísticos, es la única “plataforma” que logra reunir y contener a los distintos tipos de arte, como la literatura, la danza y la música, los cuales han logrado que al cine se le nombre “el séptimo arte”. Pero como dice Rubem Fonseca, el cine es un arte híbrido… Hoy en día se ha posicionado como un objeto de consumo y de entretenimiento, por eso al pasar el tiempo una película pierde su valor y no causa el mismo impacto que la primera vez que se vio. Por lo mismo directores como los hermanos Dardenne, Wayne Wang, o más cercano, Fernando Lavanderos han optado por crear un cine de espectáculo pero con ideologías sociales, así el espectador se siente parte de esta realidad y trasciende lo superficial.

Veámoslo de esta manera, una película es un vehículo de ideas y el espectador es el que recibe estas ideas y las descifra, llevándose además de entretenimiento, conocimiento.

Así parten algunas de las exitosas películas que voy a mencionar, las cuales introducen temas sociales pero de una manera hollywoodense, con estrellas de cine. Así nace el cine de espectáculo como estrategia comercial. 

Voy a partir con un clásico, “El extranjero” de Luchino Visconti, es una película espectáculo, ya que lo protagoniza Marcello Mastroianni, una estrella del cine italiano, pero el tema social de existencialismo hace que el espectador disfrute este largometraje y que también se adentre en la ideología que representa. Podemos ver a lo largo de la película que el personaje de Arthur Meursault se cuestiona su existencia y su razón de vivir.

Todo el conflicto se desata cuando Arthur mata a un hombre sin ninguna razón poderosa, en la escena cuando testifica podemos cuestionarnos como espectadores porque le disparo cuatro veces al otro hombre. No hay un razón clara que nos diga la película, es necesario entender a Arthur y empatizar con su problema de crisis existencial.

Es un personaje que no tiene motivaciones como vemos en la escena donde rechaza un empleo mejor, vive su vida sin vivirla en realidad, solo pasa, no tiene creencias tampoco. Hay una escena en particular cuando discute con el juez acerca de creer en Dios, a lo cual él le responde que no,  en el año 1967 la religión tenía un peso importante en todo el mundo y también en la justicia, eso queda demostrado en el film.

El sentido de la vida te lo puede dar creer en Dios, pero Arthur se negó reiteradas veces, lo podemos ver en la escena donde no quiere hablar con el sacerdote ya que es una figura directa de Dios y Arthur no cree en nada, solo en la muerte que esta próxima a su destino.

Un destino que de alguna manera al final de la película logra sacar las ganas de vivir que aún tiene el personaje.

Ya hacia el final del análisis de “El extranjero” me gustaría resaltar que la película pierde mucho con respecto al relato de Albert Camus, pero creo que es un instrumento del cine espectáculo el masticar un poco la información para que el espectador pueda digerir de una manera más fácil lo que el director está proponiendo.

A mi parecer concuerda con lo que dice Tomas Gutiérrez, es un espectáculo que podríamos disfrutar cada vez que lo vemos y así descifrar e interpretar cosas nuevas. Eso tiene de relevante la filosofía combinada con el cine, así como podemos ver en “El perro Andaluz” donde la interpretación del espectador va haciendo un juego con la pantalla, lo cual permite una conexión y un entendimiento diferente…

Avanzando ya hacia el año 1995 el cine ya tenía un desarrollo mayor sobre contar historias de conflictos sociales. Ese año se estrena  “Smoke” dirigida por Wayne Wang y Paul Auster. En esta película podemos ver distintos conflictos sociales como dramas familiares e hijos abandonados. Son temas que podemos encontrar en duras escenas como cuando Auggie va a conocer a su supuesta “hija” de la que recién se enteraba tras pasar 18 años, era adicta al crack y estaba embarazada, aunque no es una película rupturista si abarca temas sobre el pasar del tiempo cuando Auggie le confiesa a Paul Benjamín que todos los días saca la misma foto, en el mismo lugar, a la misma hora. Esto puede provocar al espectador un tanto de nostalgia y promover la ideología filosófica de “mantener el tiempo” guardado en esas fotos. Esto está ligado a que en esos años ya estaba por llegar el nuevo siglo y generalmente el arte en cada fin de siglo cuestionan el rol de la humanidad.

¿Hemos mejorado?, quizás sí, en esta película podemos ver como abordan el tema del racismo, relacionado a la moral de que los negros no pueden juntarse con los blancos y como Paul se ve perjudicado por las malas andanzas de Thomas o también conocido como Rashid, pero aun así logran convivir formando una estructura aristotélica, dejando el pensamiento retrógrada del racismo de esa época en EE.UU.

En conclusión la película “Smoke” si cumple con lo que dice Tomás Gutiérrez pero no completamente debido a sus componentes cinematográficos.

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