Cambios en el Mercado de los Gimnasios en Chile
Aliocha Nickolas Ruiz CalderonApuntes10 de Septiembre de 2023
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FACULTAD DE INGENIERÍA Y NEGOCIOS ESCUELA DE INGENIERÍA COMERCIAL
EXAMEN DE TITULACIÓN – INSTANCIA 2
CASO DE ESTUDIO
Área Marketing
Ingeniería de Ejecución en Administración de Empresas Ingeniería Comercial
Septiembre 2023
Caso: Cambios en el Mercado de los Gimnasios en Chile
Antecedentes del Mercado de Gimnasios
La pandemia de Covid-19 desató una compleja serie de cambios de hábitos que afectan la salud física y mental de la población: el 53% hizo menos ejercicio, el 61% engordó y el 67% tiene problemas de sueño. Así lo revela el informe Stress in América 2020: a National Menthal Health Crisis de la American Psychological Association (APA).
La mayoría de los adultos (61%) en Estados Unidos informaron haber experimentado cambios de peso no deseados desde el comienzo de la pandemia, y más de 2 de cada 5 (42%) dijeron que aumentaron más de peso de lo que esperaban. El aumento de peso significativo plantea riesgos para la salud a largo plazo.
Más de la mitad de los adultos (53%) dijeron que han estado menos activos físicamente de lo que querían. Más de tres de cada cinco de los que informaron un alto nivel de estrés (63%) dijeron que han estado menos activos físicamente de lo que querían, en comparación con el 42% de los que informaron un bajo nivel de estrés.
Los impactos físicos informados en los adultos más jóvenes son significativos: casi tres de cada cuatro adultos de la generación Z (74%) y una proporción similar de millennials (70%) informan cambios de peso no deseados desde que comenzó la pandemia, en comparación con el 58% de los X, 52% de los boomers y el 30% de los adultos mayores.
A medida que el sector de servicios gana dimensión en las economías, se multiplican las iniciativas para gravar nuevas actividades con el impuesto a las ventas o aumentarlo en los casos en que ya existe. Los gimnasios se vieron alcanzados por esta avanzada en algunos países, levantando una polvareda de discusiones, especialmente por el rol que el sector tiene en el cuidado de la salud.
En España, en septiembre de 2012, los gimnasios pasaron de un IVA reducido del 8% a uno del 21%. En Portugal, en 2008 se había logrado pasar de un IVA normal a uno reducido del 5%, pero en 2011 los gimnasios tuvieron que volver a tributar el 23%. En octubre de 2020 el Gobierno portugués anunció que a partir de 2021 los usuarios de gimnasios podrían desgravar un 15% del IVA, con un máximo de 250 euros por persona, un beneficio pobre e insuficiente, que pocos aprovechan.
Más cerca de Chile, en Costa Rica, ocurrió algo parecido. A mediados de 2019 los gimnasios pasaron de no tributar IVA a pagar uno del 13% –como el que pagan las empresas de entretenimiento–, en lugar de un IVA reducido –del 4%– como el que corresponde a las empresas de salud.
En el caso de Chile, el cambio de año 2023 traerá novedades. Desde el 1 de enero, los servicios prestados por gimnasios, estudios de fitness y clubes deportivos comenzarán a estar gravados por el mismo impuesto al valor agregado (IVA) que ya pagan las empresas de diversión y entretenimiento: un 19%. Así lo dispone la Ley 21.420, publicada el 4 de febrero de 2022.
La novedad provocó malestar, cuestionamientos y hasta cierta confusión respecto al alcance real de la medida: hubo dudas sobre si se aplicará a todos o no. En general, los operadores consideran que se trasladará a los clientes con suba de tarifas, aunque las empresas que tengan más elasticidad comercial podrían hacerlo de manera gradual. Los más pesimistas hablan incluso de cierres.
“La industria post pandemia está super resentida. Hay mucha competencia y se agotaron los recursos. Con casi 14% de inflación más un IVA de 19% está complicado. Habrá que aumentar un 30% el precio del servicio, mientras estamos en la economía más débil de los últimos 30 años”, opina Alfredo de Goyeneche, CEO de Latam Fit Chile, holding que opera en ese país las marcas O2 y Smart Fit, la cadena de gimnasios de bajo costo que tiene 48 sedes abiertas en Chile.
Los Competidores y el Entorno
Smart Fit está timoneada en este país por un grupo familiar que empezó en el sector en 2005 con los gimnasios O2, que aún conserva una unidad dentro del lujoso Hotel W, en Santiago. El primer Smart Fit en Chile se inauguró en 2014, y hoy estos gimnasios forman parte de la corporación internacional que cotiza en el Bovespa. Con la promesa de democratizar el fitness, este modelo procura atender a un alto volumen de usuarios que pagan un ticket que ronda los U$ 20 dólares.
Según destaca el empresario: “No hay una comprensión del beneficio que genera la actividad física en términos financieros para el conjunto de la sociedad. Es un mal negocio para el Estado de cualquier país no invertir en actividad física”, porque lo terminará pagando más caro en costos de salud. Es simple, cuando la población se mueve menos, se enferma más.
Los números de organismos especializados le dan la razón. El Global Status Report on Physical Activity 2022, de la Organización Mundial de la Salud (OMS), indica que a nivel global cerca de 500 millones de nuevos casos de enfermedades prevenibles ocurrirán entre 2020 y 2030 y traerán costos superiores a los U$300.000 millones - unos U$27.000 millones por año
- si no se cambia la prevalencia de la inactividad física.
“En general, los gobiernos de América Latina aún no asignan el grado de importancia ni reconocen el impacto positivo que la actividad física tiene en la vida de las personas. Somos, sin duda, salud y educación - dos áreas que siguen exentas de IVA, en Chile al menos - y no entretenimiento. Tendremos que trabajar más y unidos como gremio para hacérselo entender a las autoridades”, coincide Felipe Apablaza, CEO y cofundador de los gimnasios DMOOV.
Apablaza sabe en carne propia la importancia que tiene el ejercicio físico en la vida de una persona. Apasionado del deporte, este atleta devenido emprendedor logró tiempo atrás el récord nacional de salto en alto. En 2003, cuando aún era un deportista activo y dedicaba algunas horas a entrenar a un grupo de rugbiers para perfeccionar su técnica de carrera, empezó a gestar la idea de SpeedWorks.
“SpeedWorks fue el primer centro de entrenamiento funcional de Chile y se inauguró en 2007”, relata Apablaza, quien más tarde vendió sus acciones en esta empresa para fundar DMOOV en 2015, una propuesta de fitness con fuerte componente en lo social, con música en vivo, competencias y concursos. El ticket promedio de sus gimnasios es de $32.000 CLP por mes (cerca de 37 dólares).
Respecto al impacto que la aplicación del IVA tendrá en sus gimnasios, Apablaza vaticina: “Se aplicará a cada precio y tarifa antigua. No veo otra forma, y por ende se traspasará al usuario final. Esto provocará alguna baja en las ventas, sobre todo en sectores menos acomodados”.
Un panorama sombrío describe Marcela Díaz, Gerente General de Sportlife, la marca que hizo punta en el rubro al iniciar su operación en 1993. Fue fundada por Mauricio Musiet y luego adquirida en 2012 –en un 70%– por la empresa colombiana Bodytech, que desde hace varios años controla ya el 100%. El principal desafío hoy es la incorporación del IVA. Esto, sumado a la alta inflación, implica subir los precios en aproximadamente en un 32%. El impacto que
tendrá esto en el sector será desastroso. “Estuvimos dos años cerrados, con cero ingresos, absorbiendo costos obligatorios por parte del Gobierno. Todos tuvieron que ir a la banca y endeudarse para poder subsistir”, relata Díaz.
“Nuestros costos -prosigue- están indexados a la inflación, por lo que no subir los precios es inviable. Por otro lado, sumarle este impuesto hará que disminuya la demanda y puede que aumente el desempleo en el sector”. Con gimnasios desde Iquique hasta Punta Arenas, el ticket mensual en Sportlife va de $25.600 CLP (U$29,90) en la categoría Classic, a $58.000 CLP (U$67,70) en la Premium. Respecto al nuevo panorama impositivo, Díaz considera además que generará una competencia desleal: “Todas nuestras inversiones son a 10 años y todo el IVA que pagamos lo absorbimos como costo, no así los nuevos jugadores entrantes”.
Por su parte, José Gómez, fundador del centro de entrenamiento personal Motion Center, tiene una mirada diferente. “No creo que el IVA sea un gran tema para las cadenas, porque un aumento del 19% en un abono que vale $20.000 CLP significa 4.000 CLP más. No es algo que afecte significativamente al consumidor. Sobre todo con esta efervescencia que hay en el consumo de ejercicio físico”, reflexiona.
Motion Center combina el entrenamiento personal con servicios de nutrición, rehabilitación y kinesiología, ya que el socio de Gómez es fisioterapeuta. Con inquietud por la ciencia y la educación, Motion cuenta además con un instituto que otorga certificaciones y colabora en investigaciones con universidades. Además Gómez tiene junto a su hermano Felipe una marca propia de equipamientos, llamada Ilus Fitness, que se comercializa en todo el país.
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